Los poetas populares en la Jornada Nacional de Declamación
JACOBO CRUZ
El próximo sábado 28 de septiembre, el Movimiento Antorchista de Zacatecas se unirá a la II Jornada Nacional de Declamación, evento que se realizará en el Colegio de Bachilleres (Cobaez), del municipio de Trancoso en correspondencia a la convocatoria de la Comisión Cultural Nacional y estatal de la organización.
La enseñanza y divulgación de las distintas disciplinas culturales es otra de las tareas que Antorcha ha desarrollado desde su fundación hace 50 años, buscando que el ser humano se cultive a través de las bellas artes, las disfrute, las comprenda y las practique; pero lo más importante es que por medio de ellas entienda la causa de los fenómenos naturales y sociales, de tal forma que no sea víctima del engaño o la manipulación, a la vez que se decida a transforma la sociedad por una mejor.
Esta edición del evento cultural de declamación también será de carácter nacional y se convierte en un escenario donde se revive la voz de los poetas del pueblo que crearon obras de la llamada poesía social, que a través de este lenguaje se denuncia la explotación de los recursos naturales y la fuerza de trabajo de los desposeídos y con sus versos llaman a luchar contra la pobreza, promueven la unidad de la gente independientemente de su raza o nacionalidad porque la desigualdad no tiene límites estatales ni fronteras.
Los autores que desarrollaron su poesía para defensa de los oprimidos tienen una importante vigencia, por eso los declamadores antorchistas traen al presente su voz de trueno, son conscientes de que es necesario llamar al pueblo empobrecido a luchar para terminar con un sistema político y gubernamental que trabaja para perpetuar la desigualdad en el modo de producción capitalista, que a cambio de la acumulación desmedida de riqueza ha provocado la destrucción del planeta trayendo enfermedades mortales, la contaminación de la tierra, del agua y aire, por lo que es urgente que se piense en una organización distinta de la sociedad, causa que fue defendida por ellos como el chileno Pablo Neruda que en Oda a los poetas populares lo dijo así:
Poetas naturales de la tierra,
escondidos en surcos,
cantando en las esquinas,
ciegos de callejón, oh trovadores
de las praderas y los almacenes,
si al agua
comprendiéramos
tal vez como vosotros hablaría,
si las piedras
dijeran su lamento
o su silencio,
con vuestra voz, hermanos,
hablarían.
Numerosos
sois, como las raíces.
En el antiguo corazón
del pueblo
habéis nacido
y de allí viene
vuestra voz sencilla.
Tenéis la jerarquía
del silencioso cántaro de greda
perdido en los rincones,
de pronto canta
cuando se desborda
y es sencillo
su canto,
es sólo tierra y agua.
Así quiero que canten
mis poemas,
que lleven
tierra y agua,
fertilidad y canto,
a todo el mundo.
Por eso,
poetas
de mi pueblo,
saludo
la antigua luz que sale
de la tierra.
El eterno
hilo en que se juntaron
pueblo
y
poesía,
nunca
se cortó
este profundo
hilo de piedra,
viene
desde tan lejos
como
la memoria
del hombre.
Vio
con los ojos ciegos
de los vates
nacer la tumultuosa
primavera,
la sociedad humana,
el primer beso,
y en la guerra
cantó sobre la sangre,
allí estaba mi hermano
barba roja,
cabeza ensangrentada
y ojos ciegos,
con su lira,
allí estaba
cantando
entre los muertos,
Homero
se llamaba
o Pastor Pérez,
o Reinaldo Donoso.
Sus endechas
eran allí y ahora
un vuelo blanco,
una paloma,
eran la paz, la rama
del árbol del aceite,
y la continuidad de la hermosura.
Más tarde
los absorbió la calle,
la campiña,
los encontré cantando
entre las reses,
en la celebración
del desafío,
relatando las penas
de los pobres,
llevando las noticias
de las inundaciones,
detallando las ruinas
del incendio
o la noche nefanda
de los asesinatos.
Ellos,
los poetas
de mi pueblo,
errantes,
pobres entre los pobres,
sostuvieron
sobre sus canciones
la sonrisa,
criticaron con sorna
a los explotadores,
contaron la miseria
del minero
y el destino implacable
del soldado.
Ellos,
los poetas
del pueblo,
con guitarra harapienta
y ojos conocedores
de la vida,
sostuvieron
en su canto
una rosa
y la mostraron en los callejones
para que se supiera
que la vida
no será siempre triste.
Payadores, poetas
humildemente altivos,
a través
de la historia
y sus reveses,
a través
de la paz y de la guerra,
de la noche y la aurora,
sois vosotros
los depositarios,
los tejedores
de la poesía,
y ahora
aquí en mi patria
está el tesoro,
el cristal de Castilla,
la soledad de Chile,
la pícara inocencia,
y la guitarra contra el infortunio,
la mano solidaria
en el camino,
la palabra
repetida en el canto
y transmitida,
la voz de piedra y agua
entre raíces,
la rapsodia del viento,
la voz que no requiere librerías,
todo lo que debemos aprender
los orgullosos:
con la verdad del pueblo
la eternidad del canto.
Nosotros estamos convencidos que se debe alentar a la gente para que entienda la realidad que describen los autores, porque es un reflejo de la sociedad y el tiempo que les tocó vivir dicho en hermosas palabras que es una de las características de este tipo de literatura.
Además hay muchas evidencias de que los poetas fueron aclamados por unos, pero repudiados por otros incluso algunos fueron perseguidos, otros más encarcelados o hasta asesinados, muestra de lo amable o punzante de sus escritos.
La intolerancia y persecución política a los escritores, por parte del estado ha cobrado varias víctimas, es el caso del comunista Pablo Neruda pues investigaciones sobre su muerte han arrojado resultados que apuntan a que fue envenenado por agentes de su país con complicidad de la CIA y no murió a causa del cáncer de próstata que se le atribuyó oficialmente.
Federico García Lorca, poeta, dramaturgo y prosista fue fusilado por el régimen de Francisco Franco en España el 18 de agosto de 1936, mientras que su contemporáneo Miguel Hernández fue encarcelado, torturado y abandonado, lo que finalmente le provocó la muerte a los 31 años de edad.
Pero no nos olvidemos de Oscar Wilde, cuando había publicado su obra más célebre, El retrato de Dorian Gray en 1890 fue llevado a la cárcel acusada de “graves indecencias y sodomía”, quien antes fue reconocido como el escritor más popular de Londres, al salir de prisión se exilió voluntariamente en Francia donde murió en el año 1900.
El próximo sábado podremos disfrutar de las creaciones de destacados poetas como Salvador Díaz Mirón, María Enriqueta Camarillo, Nicolás Guillén, Miguel Hernández, Pablo Neruda, entre otros, escritores muy reconocidos en el mundo de las letras. Esta vez serán más de 30 declamadores los de los municipios de Guadalupe, Fresnillo, Vetagrande, Trancoso y Valparaíso.
Los antorchistas, que también luchamos contra la pobreza, la desigualdad y contra toda forma de injusticia social tenemos muchas razones para declamar y refrescar sus obras mediante la jornada de declamación del próximo sábado, porque el camino que recorremos buscando un mundo mejor, más justo y generoso con todos los mexicanos requiere de fuerza de voluntad y de las enseñanzas de los poetas populares.