Los otros datos
SOLEDAD JARQUÍN EDGAR
A poco más de un mes de que se cumpla un año desde que se decretó para Oaxaca la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres, la titular de la Secretaría de las Mujeres de Oaxaca anunció en un programa de la radio local que finalmente los 40 municipios cuentan ya con sus consejos municipales, el último, Santa María Apazco, que de acuerdo a un boletín sucedió hoy o ayer.
Así las cosas, Ana Isabel Vásquez Colmenares Guzmán, anuncia con bombo y platillo, semejante “logro”, como también señala que el próximo 16 de agosto se realizará en la capital oaxaqueña un Foro Regional con los estados del sureste del país que cuentan con Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres y dice –llena de orgullo, claro- que ésta reunión, como la realizada por el Instituto Nacional de las Mujeres hace unos días, son resultado del “compromiso, el impulso” que Oaxaca ha dado a estos (“Los temas”) los temas de la violencia feminicida y el feminicidio.
¿De verdad?
Y es que, aunque quisiera no se puede aplicar el asunto del vaso medio lleno o medio vacío, o aquello que todo depende del cristal desde donde se mira, porque los datos estadísticos -que entre otras cosas nos ayudan a mirar la violencia y con ello la desigualdad, una herramienta fundamental en los estudios feministas-, revelan en Oaxaca otras cosas que la titular de la Secretaría de las Mujeres de Oaxaca no puede ver y se ahoga entre sus propios elogios de un trabajo que tiene resultados funestos para las oaxaqueñas y sus familias.
Y sí, ya sabemos en agosto próximo se cumple un año de la declaratoria hecha por la Secretaría de Gobernación para 40 municipios de Oaxaca. El primero en responder casi de manera inmediata fue Oaxaca de Juárez, de ahí hasta hace unos días y durante largo rato no lo hicieron otros municipios. Una tarea en la que la secretaria de las Mujeres de Oaxaca tenía toda la responsabilidad sobre sus hombros y que no logró durante largo rato explicar a las autoridades de qué se trataba eso de la Alerta de Violencia de Género, ni cómo se debía aplicar o qué deberían hacer. Aun así, ella, con voz festiva responde en un programa de radio de la Corporación Oaxaqueña de Radio y Televisión.
Y ahora sí, como dice Andrés Manuel López Obrador, las organizaciones de la sociedad civil tienen “otros datos”, los que evidentemente no corresponden a las cuentas que brindó en ese noticiario la secretaria de las Mujeres.
Por ejemplo, Consorcio para el Diálogo Parlamentario y la Equidad Oaxaca elaboró una gráfica que muestra el aumento de feminicidios durante el gobierno de Alejandro Murat con respecto a su antecesor Gabino Cué, en el periodo de los dos y medio primeros años de gobierno.
Lo que encuentra este organismo de la sociedad civil es que en el caso de Cué Monteagudo (diciembre de 2010-mayo 2012) ocurrieron 198 feminicidios y con Murat (diciembre de 2016-mayo 2019) la ocurrencia fue de 297 feminicidios, 99 (noventa y nueve) más. Cosa grave, pues representa un incremento del 67 por ciento entre un gobernante y otro, reitero, en los 30 primeros meses de gobierno de ambos mandatarios.
Por otro lado, indispensable citar también las estadísticas que sobre el feminicidio reporta el GES-Mujer, que señala que en este año en Oaxaca la ocurrencia de asesinatos de mujeres asciende a 80, y que en entre el 1 de diciembre de 2016 –cuando asume la gubernatura Alejandro Murat- y el 16 de julio pasado, la cifra funesta de feminicidios es de 329 casos.
La gran pregunta es ¿cuántos de estos asesinos han sido detenidos, procesados y sentenciados?
Y hay una cifra más, desde la declaratoria de alerta de violencia de género, que dicho sea de paso no es varita mágica, pero sí revela mucho de lo poco que se hace para terminar con el problema desde la institucionalidad –como sucede con el municipio de Apazco-, es que han ocurrido más de 100 asesinatos contra mujeres.
Lo último, es la declaración temeraria de la titular de la Secretaría de las Mujeres de Oaxaca, refiriéndose a las reuniones de Inmujeres que ya se hizo, y la que se hará con Conavim en agosto próximo, “a nosotras nos alegra, porque el tema de la violencia feminicida es grave, no podemos permitir que haya ni un caso más”, una medida muy alta para el gobierno donde más asesinatos y mucha impunidad ha existido en las últimas décadas.
