Los medios detrás de la violencia
RAÚL MANDUJANO SERRANO
La semana pasada, el hacedor de los corajes informativos hablaba del miedo, pero sobre todo, miedo a estar sometidos cuando se supone que vivimos en una sociedad libre. A la larga, todo control –como el que padece el mundo- tiende a estallar, a buscar una salida, como las ollas de vapor. Todo conflicto no controlado detona en violencia, y eso está pasando en Estados Unidos. El asesinato de Floyd fue el resonante, ese detonador que sacó del cerebro de los vecinos del norte una ira acumulada por las políticas racistas y violentas de su presidente. La policía, tortura, es violenta, asesina y abusa porque el mandato legal norteamericano se lo permite.
Hay referentes, se explica el amanuense. Hace unos días, la red social Twitter, puso un aviso de violación de reglas en una de las publicaciones más recientes del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que incluía la frase: «cuando comienza el saqueo, comienza el tiroteo». Ello fue una de las consecuencias de la extensión de la violencia. Twiter refería que el mensaje “infringió las reglas de Twitter sobre alentar la violencia «. Ya antes habían sido censuradas las cuentas de los presidentes Bolsonaro y Nicolás Maduro por situaciones similares.
¿A qué se refiere el periodista? A que estamos observados. La aldea global, esta teoría del canadiense Marshall McLuhan sobre el rompimiento de las barreras socioculturales a través de la tecnología de masas, en la actualidad lleva a los medios de comunicación a no ser tan neutrales y más bien, parciales, porque así conviene a sus intereses; por ello, el responsable inmediato de que explote la violencia, son los medios de comunicación como herramienta del uso que a los mensajes da quien los crea.
Por eso Estados Unidos, casi en todos sus estados, se encuentra inmerso en la violencia. Entre quienes lo hacen de forma pacífica y protestan por el racismo que provocó la muerte de George Floyd, pero también están los que aprovechan las protestas, para violentar, robar, saquear, los que usan el momento y el anonimato para delinquir, porque además lo hacen casi con permiso, en medio de la mayor impunidad social.
Pero la amenaza de Trump de censurar a las plataformas sociales no es la solución, regularlas si, es importante, porque se han convertido en una herramienta del poder, de los opositores y de la delincuencia para manipular a la sociedad, sobre todo a la que se encuentra en niveles de marginación y pobreza. Recordemos que ser pobre es el mejor alimento del voto político, y para aquellos que se manifiestan de forma pacífica, los mantiene a raya la amenaza financiera, la advertencia económica y el miedo.
Estados Unidos se convulsiona ante el poder de los mensajes en medios masivos, la pandemia y la violencia, pero cualquier país que reprime y amenaza a sus medios y a la prensa, debería entender que tienen estos la cualidad de invocar la violencia, cuando la sociedad generadora de empleos es maltratada. Pregunte Usted a Bolivia y Venezuela.
Susurros: La vacuna de AMLO contra el COVID
Lo dijo el presidente cuando le preguntaron cómo sanar del Covid: “Estar bien con nuestra conciencia, no mentir, no robar, no traicionar, eso ayuda mucho para que no dé el coronavirus»… Y habrá quien se lo crea. Esos son mensajes de “ternurita”, y ahora a trabajar la maquinaria de bots para responder a la crítica racional… Y acá el periodista “chupándose el dedo” … Creo que me tomaré un respiro ante tanta demagogia barata…
Twitter: @ raulmanduj