Los enemigos de la UAZ
GERARDO DE ÁVILA
Contrario a lo que otros piensan y vaticinan, el futuro de la Universidad Autónoma de Zacatecas (UAZ) es complejo pero rescatable, si y solo sí, la próxima administración realiza los cambios estructurales que requiere la noble institución.
Claro que se puede.
Armando Silva Cháirez tuvo su oportunidad histórica de sanear a la universidad y no quiso hacer los cambios. Los grupos antagónicos al interior de la UAZ aprovecharon la falta de liderazgo y escasa visión del actual rector. Ni quiso ni pudo, eso es la verdad.
Y se le acabó el tiempo.
En medio de esta discusión, la grilla por la sucesión se ha desatado en la comunidad universitaria. En los días venideros de tono. Los “suspirantes” a suceder al rector Silva han comenzado sus reuniones para diseñar la estrategia a utilizar por si son candidatos.
Primero lo primero.
La lista conocida hasta ahora no ha cambiado: Antonio Guzmán Fernández, Cuauhtémoc Rodríguez Aguirre y por supuesto los candidatos de los ex rectores Alfredo Femat Bañuelos y Francisco Javier Domínguez Garay, los más perfilados. No son los únicos…
Ojalá y surja una mujer.
Soy un defensor de la educación pública en México, no sólo porque en ella me he formado, sino porque, aunque suene romántico, la educación es y seguirá siendo el camino para que este país salga delante de la pobreza y la desigualdad.
No hay otro camino.
Sostengo que la universidad pública debe permanecer, a pesar de las voces que anhelan su cierre. Para su permanencia se vuelven indispensables cambios de forma y fondo. La universidad pública no es la única que está en crisis financiera.
Hay otras igual o peor.
Los enemigos…
¿Pero quién son los enemigos de la UAZ? La respuesta es sencilla: las administraciones rectorales pasadas y de ahora que no han sido capaces de poner orden y disciplina financiera, los insensibles gobiernos estatales que no apoyan como se debe y la propia Federación.
Incapacidades institucionales.
Para efectos de nuestro análisis, es pertinente hacer la aclaración de que ha habido esfuerzos de actores políticos y de funcionarios federales pero que han sido insuficientes, además de una falta de voluntad de los propios universitarios que toman decisiones. Esto incluye a los sindicatos.
Ha faltado valor y visión.
Si bien, la Federación ha solicitado a la universidad un proyecto de reingeniería para ver la posible condonación de la deuda, la UAZ requiere de más compromiso tanto del gobierno del Estado como del Federal. Y, los universitarios hacer su parte, pero a la de ya.
No hay de otra.
Lo que sí urgente, es que la universidad entienda que muchas cosas ya no funcionan y deben ser desterradas, como la corrupción. La crisis financiera puede tocar fondo en cualquier momento y provocar otra peor: la académica.
Cuidado.
Quienes aspiren a ser rector de la UAZ en el 2016 deben conocer bien a la institución y proponer salidas viables a los añejos problemas. Los retos y desafíos son enormes para el próximo rector y la administración que lo acompañe. Por lo pronto, la grilla ya comenzó.
Desde ahora lo decimos.
En suma, los enemigos de la UAZ pueden ser derrotados con resultados concretos en donde la UAZ continué siendo la máxima casa de estudios por excelencia en el estado de Zacatecas, y está en los propios universitarios que lo anterior ocurra.
Se acercan los tiempos.
Del archivo personal:
Parece que para el 2016: Alejandro Tello, Rafael Flores y David Monreal ya están. La pregunta es ¿Y Carlos Puente y “Chabelo” Trejo van o no van?
Es tan sólo una opinión.
(*) Periodista
Maestro en ciencia política