López Obrador ¿un hombre de palabra?
MARÍA DEL SOCORRO CASTAÑEDA DÍAZ
Esta semana hemos presenciado situaciones de diversos tipos en la tan traída y llevada 4T. Esta Cuarta transformación, en el día con día, demuestra que sí sabe cómo cambiar las cosas, pero para quedar igual. Me limitaré a hablar de dos asuntos que son igualmente preocupantes, porque son el reflejo de esa parte de la personalidad del presidente Andrés Manuel López Obrador que las personas deberíamos tomar muy en serio, sobre todo aquellas que siguen siendo sus incondicionales y alaban cada una de las torpezas de quien consideran casi como un héroe.
El mismo que en los anuncios de su primer informe de gobierno se ostenta como un “hombre de palabra”, está demostrando en los hechos que su estrategia de imagen tiene mucho que ver con que “la inexperiencia de los políticos hoy la hacen pasar por un valor. Incluso quienes hacen política como profesión son considerados como vividores […] el lenguaje soez, las expresiones populares, son consideradas una señal de autenticidad”[1]. Esto es que los recursos baratos funcionan, o al menos al de Macuspana le están resultando, sobre todo entre quienes lo apoyan porque su llegada al poder representa una especie de “venganza” hacia sus predecesores.
El asunto es que, al presidente de la República, al jefe de Estado, que debería ser ejemplo de respeto, tacto y diplomacia, se le ocurrió, ni más ni menos, que poner un sobrenombre al expresidente panista Felipe Calderón Hinojosa. “Comandante Borolas”, le llamó. “No olvidemos que cuando declara la guerra a la delincuencia organizada, va a Michoacán, a Apatzingán, vestido de militar. Se puso un chaleco que hasta le quedaba grande. Parecía el comandante Borolas, Y ahí declara la guerra”[2]. Este burdo ataque lo hizo el presidente, además, un día después de haber declarado que ya no culparía de los problemas del país a las administraciones pasadas.
Al parecer, AMLO todavía no ha entendido que ya pasaron los tiempos en que él era “presidente legítimo” (con todo respeto, una verdadera payasada que duró seis años y que francamente debió ser el principal motivo para negarle el voto)[3] y Calderón era el “presidente espurio”. Hace casi 13 años que ocurrió, y ya no es momento de continuar un enfrentamiento en el que cada día parece que López Obrador mantiene un profundo rencor que no se le pasa ni porque se da el lujo de pasear y hasta vivir en el Palacio Nacional, creyendo ser el salvador de la patria, tal vez pensando que sus acciones están a la altura de casi de Benito Juárez. A ocho meses de haber tomado posesión del cargo, el señor presidente sencillamente no ha querido o no ha podido darse cuenta de que ya ganó y que ponerse a pelear como gallito de barrio no le favorece. Pero eso sería realmente lo menos importante, porque de su persona y su figura a muchos no nos interesa mucho. El verdadero asunto es que el presidente de este y de cualquier otro país no debería salir a ponerle apodos a sus rivales políticos. Bueno, de hecho, nadie con tantas responsabilidades tendría motivos válidos para desperdiciar dos horas o más cada día para, entre otras cosas, dedicarse a insultar públicamente a quien no está de su lado.
El siguiente asunto que me ocupa respecto a los acontecimientos de la semana que concluyó, es el despido (o para decirlo elegantemente, el acuerdo de separación) del periodista Carlos Loret de Mola de la empresa Televisa.
Digamos que nunca he sido y por supuesto tampoco seré fiel seguidora del mencionado comunicador. Su trabajo no me parece de lo más contestatario y no lo considero un paladín de la libertad de expresión. El problema es, más bien, que resulta muy sospechosa su salida de la empresa y por supuesto da mucho de qué hablar. Su padre, Rafael Loret de Mola, quien en otros tiempos defendía a AMLO a capa y espada, hoy lanza una acusación directa: «Parece que hay coto de cacería contra periodistas, ¿a cambio de qué? (…) En el caso de Televisa, por ejemplo, un convenio de mil millones de pesos no es cualquier cosa, es una enorme cantidad de dinero y, claro, a cambio de ello puede pedir cualquier cosa, puede hacer que se guillotine a un periodista»[4].
Lo preocupante es que se den estas negociaciones en un momento en que se suponía que la libertad de expresión sería respetada. Es una cuestión de doble moral, en realidad, porque, por ejemplo, López Obrador en su momento expresó solidaridad con la periodista Carmen Aristegui, quien a causa de la publicación en el año 2015 del trabajo de investigación sobre la Casa Blanca, también fue despedida de la cadena MVS.
Honestamente no cambia mucho la situación respecto a lo que ocurrió esta vez con Loret de Mola, porque, de acuerdo con el columnista de El Universal Javier Tejado Dondé, luego de que Aristegui salió de MVS, la compañía realizó operaciones con el gobierno Federal, como una pauta de publicidad oficial con el gobierno, la venta del espectro radioeléctrico de la banda 2.5 GHz y el cambio a televisión abierta, por poco más de 6 mil millones de pesos[5].
Digamos que, aunque cambian los momentos, las personas y las cantidades, la acción es exactamente la misma, aunque por supuesto no puede ser comprobada cabalmente.
El asunto es grave, si lo consideramos como un antecedente de lo que puede llegar a ser la 4T en materia de respeto a la prensa, y si tomamos en cuenta las constantes descalificaciones del presidente hacia quienes no sólo no piensan como él, sino que además lo publican, y recordamos que, desde su punto de vista hay “prensa fifí”. Estamos ante una situación que no debe ser subestimada. Han pasado casi nueve meses desde el inicio del nuevo gobierno y las señales no son buenas, sobre todo si consideramos ese afán del Peje porque los medios y los periodistas funjan como sus lacayos y si no lo hacen, sean objeto de desprestigio. Ya pasó en su momento con el Grupo Reforma[6] y ahora el despido de Loret de Mola despierta serias dudas acerca del ejercicio de la libertad de expresión en los próximos años, sobre todo porque, como ya se ha dicho en este espacio, los medios son un negocio y sus dueños, indudablemente, van a privilegiar sus intereses económicos.
Por último, no hay que pasar por alto que ahora que se acerca el primer informe de gobierno, a nueve meses del inicio de la Cuarta Transformación, el balance inicial de ésta tiene dos caras muy distintas. Por un lado, el optimismo ilimitado de un presidente que todavía no se entiende si en realidad cree en las mentiras que cuenta y vive en un México paralelo. Por otra parte, está el pesimismo de quienes desde afuera observamos que el país no tiene un crecimiento económico, que la situación mexicana en el panorama internacional se dificulta, entre otras cosas, por la postura servil de un gobierno que ha cedido en todo ante las exigencias de los vecinos del norte en materia migratoria y sobre todo, porque no se vislumbra una solución en materia de seguridad, en un país donde las cifras de muertes y desapariciones alcanza niveles escandalosos. Estos son solamente algunos de los problemas que muchas personas observamos y que, sin duda, serán tratados en el informe de gobierno, pero, obviamente, como parte de las cuentas alegres de un México en el que sólo viven AMLO, su gabinete y sus incondicionales seguidores, que por supuesto, siguen pensando que, en los próximos cinco años las cosas van a cambiar. Al tiempo y ojalá yo no tenga siquiera un poco de razón. Lo deseo en serio.
[1] Disponible en https://www.huffingtonpost.it/entry/neri-marcore-inutile-tornare-a-votare-senza-una-nuova-legge-elettorale-serve-la-governabilita-prima-di-tutto_it_5d624ffee4b02cc97c8ef6bf?ref=fbpr&fbclid=IwAR03NU4-64mCVkuB3Odk8pYsAAMNuoGKU8we3aLYQLKKochYOHUzttJjXhw
[2] Disponible en https://www.eluniversal.com.mx/nacion/politica/amlo-llama-comandante-borolas-felipe-calderon
[3] Disponible en https://elpais.com/internacional/2006/11/21/actualidad/1164063605_850215.html
[4] Disponible en https://www.nacion321.com/gobierno/video-papa-de-loret-de-mola-acusa-caceria-de-periodistas-en-la-4t
[5] Disponible en https://www.eluniversal.com.mx/columna/javier-tejado-donde/cartera/el-precio-de-carmen-aristegui-6-mil-millones
[6] Disponible en https://www.contrapesociudadano.com/hasta-aristegui-defiende-a-grupo-reforma-de-amlo-se-equivoco-de-adversario/
