Las notas del Informe de Eruviel
RAÚL MANDUJANO SERRANO *
Las notas del Informe de Eruviel.– Se esperaban muchas reacciones y acciones durante el primer informe del gobernador mexiquense. Primariamente, en el Congreso, la pataleta de la oposición por el llamado (por ellos) “proceso electoral amañado” y los diretes por el uso de recursos públicos, dicen, utilizados en la campaña de Peña; pero no hubo mantas ni dimes, si acaso un leve esbozo de monserga del PT para exigir juicio político contra los consejeros electorales del IEEM. El resto fue una expresión masiva de conciliación y el emplazamiento a responder al débito con los mexiquenses que, si apuran al hacedor de las crónicas del Sótano, es lo más importante.
Si algo debe recuperarse del Informe de Eruviel Ávila, es su claridad por el trabajo fecundo a favor de las familias y, si deben ocuparse líneas en esta bóveda editorial por el quehacer político, está esa coincidente actitud de respeto hacia su trabajo y persona. Y se lo ha ganado el mandatario. Su integridad, amabilidad e inteligencia para reconocer como target a la gente, lo distinguen. Enhorabuena no sobra.
Pero el observatorio sectorial cayó en Enrique Peña Nieto, al acudir éste, como Presidente electo, por primera ocasión a un acto público al estado de México. Era de esperarse, piensa el potentado de la bóveda editorial, es la tierra que lo encumbró a Los Pinos y asimismo, una extraordinaria oportunidad para terminar con los chismes de pasillo que soslayaban una fractura con el gobernador mexiquense, inexistente, por obviedad. Así que el aplauso a ambos y su abrazo, evidencia que es axiomática la buena relación y que a la postre, los beneficiados serán todos los ciudadanos.
Insidioso como es, el kamasutra de las posturas editoriales advirtió, tal como lo marcó el protocolo, que Mancera, el electo gobernante del DF, quedó sentado justo atrás de Peña y estrechó su mano de Presidente ungido. Pudiera no significar nada o mucho, desde la óptica de quien sea, pero vamos, Marcelo Ebrard, el aún jefe de gobierno capitalino, tardó cuatro años y siete meses en darle la mano a Calderón, a quien AMLOranas tampoco reconoció nunca por considerar que ganó en unas elecciones que no fueron “limpias, libres ni auténticas”. Hoy pasa lo mismo con el tabasqueño, pero las reacciones de sus huestes, al menos en la entidad, han sido de cabal respeto y eso vale la pena citarlo.
Colofón: Curules limpias, secretarias nuevas
Mientras saborea un café con leche acompañado de una deliciosa concha con nata, el mayordomo de los aposentos sotanales escucha, de la mesa contigua, un desesperado lamento: “Amiga no sé que hacer, te juro que ya están revisando unas viejas piernudas los lugares. Y ahora nosotras ¿Qué haremos? ¿Nos van a correr? ¡No se vale!”… El pensamiento volátil del amanuense reflexiona… Les pasa a ustedes lo que le ocurrió a otras hace 3 años, y es una historia que no acaba, por muy piernudas que sean.
Lo cierto es que ya Aarón Urbina Bedolla encabeza la Junta de Coordinación Política y a los diputados del PRI, entre ellos el buen David Parra Sánchez, quien tiene ya una agenda preparada de tareas legislativas para dar cumplimiento a sus compromisos de campaña; en la panadería, Ulises Ramírez Núñez será el repostero principal del amasijo, mientras que Héctor Bautista tiene ya el penacho puesto para comandar a las tribus perredistas del Congreso; y tirando patadas chagui, Víctor Estrada Garibay ocupará el dojo del PANAL… Y van de nueva cuenta Oscar González Yáñez por el PT e Higinio Martínez por el Movimiento Ciudadano… Se ve que abundan las opciones en algunos partidos… Ah, y si llevan secretarias, presenten ¿no? Lo dice el trovador de los rincones de la bóveda periodística, aclaro.
De refilón.- Agundis Arias, coordinador del PVEM en la LVIII Legislatura local
Resulta que en la bancada verde del Congreso Mexiquense, Alejandro Agundis Arias fue electo coordinador de la fracción de ese ambientalista partido. Cuentan las buenas lenguas, que al lado de sus colegas de doctrina José Alberto Couttolenc Güemez, Alfonso Humberto Castillejos Cervantes y Fernando García Enríquez, ya se sentaron para preparar el esquema político de trabajo y cumplir con sus obligaciones –que serán muchas-, así como con los compromisos contraídos en campaña. Ya levantaron el dedo y aseguran que no será para pasar lista. Los andaremos aguaitando para ver si no salieron más gárrulos que el papagayo que adorna su escudo. Iniciamos con un voto de confianza.
La del Estribo: La parte de Chuy Ruiz
Ya entrados en años, resulta que el nietecito de Chuy Ruiz, afamado periodista de sensible corazón, le preguntó: Abuelito peperuchin: ésta parte que tengo en la entrepierna ¿pesa algo? Desde luego que sí, hijito –Respondió el periodista en retiro- Algo debe pesar. Y la parte que tiene mi papá ¿pesa más que la mía abuelito? Si muchacho, seguro pesa más… ¿Y tu parte abue Chuy?… Uyyy esa es la que pesa más. Con decirte que entre tu abuela y yo no la podemos levantar… Hasta otro Sótano.
* Periodista
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