La música balcánica de Goran Bregoviç se apodera de Zacatecas
Zacatecas, Zac.- Goran Bregoviç trajo sus cartas desde Sarajevo a Zacatecas, en una metáfora que le ha significado esta gira que lleva el mismo nombre de sus dos discos: Three Lettres from Sarajevo, misma que compartió con los zacatecanos y con México, en el día 11 del Festival Cultural, que ocupa a esta ciudad.
Sarajevo es como una metáfora, lo que vimos con la guerra de Sarajevo está pasando en todas partes, este álbum integra canciones en hebreo, español y árabe, dijo unas horas antes de su concierto, en un encuentro que sostuvo con los medios locales.
Lo que él hace va en contra de los políticos y las religiones, el hace música y desgraciadamente no puede cambiar el mundo; lo que importa es que queda esa iniciativa de cambio a las nuevas generaciones, asintió.
“Nuestro compromiso es ofrecerle a los zacatecanos y a los habitantes de este país las distintas manifestaciones culturales y musicales que se presentan en diferentes partes del mundo”, puntualizó.
La obra de Bregoviç, la que él mismo denominó en esta charla con la prensa zacatecana como una especie de Frankenstein, se ha caracterizado por tener ese carácter festivo y esta parte de su quehacer musical lo ha complementado como una especie de homenaje al carácter ecléctico de su ciudad natal.
Así, acompañado de Wedding & funeral band, alineación conformada de alientos, violines y coros, el músico del cineasta Emir Kusturica, reúne en Three lettres from Sarajevo voces y tradiciones cristianas, judías y musulmanas.
Dotada de una belleza infinita, esta obra se constituye en tres partes, que incluye a las tres de las cinco religiones principales de la tierra en un interés utópico cuyo gésis radica siempre en cosas buenas.
Así que, el nombre de una ciudad, en este caso su natal Sarajevo, se convierte en una imagen de nuestro tiempo, en una época actual en la que puede converger la buena vecindad.
A su repertorio añadió temas de sus anteriores producciones discográficas como Bayla, Gas gas, Nata Nihara, Bella ciao, y antes Ausencia, de Cesaria Évora, que su público de Zacatecas bailó al compás de sus alegres ritmos, con los cantos y los alientos.
LNY/Redacción
