La llegada a la Comisión Estatal de Acceso a la Información Pública
El derecho a la información aparece por vez primera en la Declaración Universal de Derechos Humanos, aprobada por la Organización de las Naciones Unidas en 1948. Su artículo 19 disponía que «Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión; este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión».
NORMA JULIETA DEL RÍO VENEGAS
Hoy comentaré sobre mi designación como comisionada Estatal de Acceso a la Información Publica en mi Estado.
Hace 11 meses participé en el proceso de selección para ocupar un lugar como comisionada Nacional del Instituto Federal de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos (IFAI) en el Senado de la República, proceso y foro nacional que me dio la oportunidad de expresar la urgente necesidad de voltear a ver este tema de transparencia y rendición de cuentas, siendo muy satisfactorio el haber sido de las 22 mujeres participantes del total de 147, y estar en el grupo de los 52 con grado de Doctorado, eso me ha distinguido y reforzado mi carrera profesional.
A través de mi trayectoria he conocido a personajes relacionados con el tema como la senadora Arely Gómez, hoy procuradora general de la República; los ex comisionados nacionales del IFAI: Ángel Trinidad Zaldívar, Jacqueline Peshard, María Marvan y el querido y nunca olvidado Alonso Lujambio (QEPD), también a Joel Salas, actual comisionado nacional y amigo y compañero de trabajo en la SFP, todos amigos de bastantes años a los cuales admiro y respeto y siempre aprendiendo de ellos.
Igualmente a Eduardo Bohórquez, drector de Transparencia Mexicana Capítulo México; al senador Salvador Vega Casillas, a Ma. Elena Vázquez Nava, consultora; como también a Víctor Manuel Andrade, de la ASF, solo por citar a algunos, obteniendo gratas experiencias y apoyos para coadyuvar con mi estado en este tema desde años atrás.
Ante la Reforma Constitucional que se dio el 7 de febrero del año pasado, debemos analizar las Fortalezas, Oportunidades, Debilidades y Amenazas (FODA) de nuestra Comisión Estatal de Acceso a la Información Pública (CEAIP).
La Comisión es un organismo público descentralizado de la administración pública estatal, con autonomía presupuestaria, operativa y de decisión; encargado de promover y difundir el ejercicio del derecho de acceso a la información y resolver sobre la negativa a las solicitudes de acceso a la información y proteger los datos personales en poder de los sujetos obligados.
Tenemos ante nosotros un nuevo reto que nos da la oportunidad de seguir llevando a la CEAIP a posicionarse como un verdadero Órgano Autónomo que fortalezca la credibilidad de la ciudadanía en las Instituciones Públicas.
El mayor impacto de la rendición de cuentas y la transparencia implica continuar con el cambio cultural en la gestión administrativa, que fortalecerá la confianza en las instituciones públicas de México mediante la apropiación masiva del derecho de acceso a la información por parte de los ciudadanos.
En la aplicación de este derecho, los servidores públicos deberán aceptar que están sujetos a un escrutinio permanente, por cualquier persona, en cualquier momento y desde cualquier parte, pero también se deberá reconocer que la información en posesión del gobierno es un bien público que se encuentra al alcance de todos los mexicanos.
Seremos tres comisionados encargados de lograr este reto.
Hablar del acceso a la información pública, rendición de cuentas y transparencia es hablar de la construcción de una sociedad y gobierno más justo y democrático, de un principio lógico de políticas públicas en donde todos los funcionarios públicos están obligados a rendir cuentas a sus gobernados, de qué hacen y cómo lo hacen, en qué gastan y cómo gastan los recursos del erario, por tal motivo aparece la necesidad de crear marcos jurídicos que garanticen el acceso a la información pública como unaherramienta más para la rendición de cuentas.
La rendición de cuentas y la transparencia son dos componentes esenciales en los que se fundamenta un gobierno democrático. Por medio de la rendición de cuentas, el gobierno explica a la sociedad sus acciones y acepta consecuentemente la responsabilidad de las mismas.
La transparencia abre la información al escrutinio público para que aquellos interesados puedan revisarla, analizarla y, en su caso, utilizarla como mecanismo para sancionar. El gobierno democrático debe rendir cuentas para reportar o explicar sus acciones y debe transparentarse para mostrar su funcionamiento y someterse a la evaluación de los ciudadanos.
En esta perspectiva, el acceso a la información contribuye a reforzar los mecanismos de rendición de cuentas e incide directamente en una mayor calidad de la democracia.
La obligación de transparentar y otorgar acceso público a la información abre canales de comunicación entre las instituciones del Estado y la sociedad, al permitir a la ciudadanía participar en los asuntos públicos y realizar una revisión del ejercicio gubernamental.
Tengo un nuevo reto que me da la oportunidad de trabajar de manera conjunta y coordinada con mis dos compañeros comisionados: Raquel Velazco y Antonio de la Torre, de llevar a la CEAIP a escalar en los primeros lugares del país.
Así que en la aplicación de este derecho, los servidores públicos deberán aceptar que están sujetos a un escrutinio permanente, por cualquier persona, en cualquier momento y desde cualquier parte, pero también se deberá reconocer que la información en posesión del gobierno es un bien público que se encuentra al alcance de todos los mexicanos.
Fue un proceso de selección competido, lo que me satisface aún más, ya que habla de una competencia de nivel que legitima el proceso.
Las instituciones son chicas o grandes según sean los personajes que las dirigen y cómo las quieran ver; en el Órgano Interno de Control del Instituto de Investigaciones Eléctricas del Gobierno Federal, en el cual me desempeñé por tres años como titular, fue evaluado por la propia Secretaría de la Función Pública, cuando asumí esa responsabilidad, entonces se encontraba en el lugar 108 de desempeño de 220 Órganos Internos de Control de la Administración Pública Federal, era de los OIC´S “chicos”.
Al final ese Órgano Interno de Control quedó evaluado en la posición número 10, ascendiendo 108 lugares en calificación comparado con el cierre 2010, tiempo en el que asumí esa titularidad. Todos volteaban a vernos, éramos ya de los “grandes”. ¿Cuál fue la fórmula? Entregar resultados de auditorías en tiempo y llevar a cabo los procesos jurídicos con resultados, nada más, trabajo y resultados.
Lo anterior lo refiero por que se pudiera pensar que la CEIAP es chica, no, la CEAIP es grande, es un órgano garante con bastantes facultades pero también hay que decirlo, difusión y prevención antes de llegar a corrección, esa es la misión y desde luego vincularnos con el ámbito nacional.
Me he conducido en mi carrera en apego a la normatividad, las experiencias que he tenido en el servicio público me han brindado conocimientos, habilidades y sensibilidad para que en cada caso que se presente, se encuentre la mejor manera de resolverlo.
Mi designación fue por siete años, pero se requiere de menos para avanzar…
