La estrategia de las encuestas y la suma de liderazgos

ISRAEL GONZÁLEZ

El proceso electoral local ya arrancó. 60 días en los que correrán, a través de tierra y aire, las propuestas de quienes encabezan los proyectos para las diputaciones locales y alcaldías.

Pero hay quienes, en lugar de proponer definen como su ruta crítica la clásica estrategia de “percepción es realidad”. Una artimaña que será la constante del proyecto de Morena que busca la alcaldía capitalina encabezada hoy por Jorge Miranda Castro, con miras a confundir al electorado.

Dichas prácticas son: las encuestas que favorecen en números, con el debido maquillaje de las cifras para mostrarse como inalcanzables, y que después se emplean para publicarse en algún medio de circulación local, tradicional o digital, para completar la táctica de “ganar agenda”.

Y la segunda, muy trillada, por cierto, que es la suma de algún liderazgo de los partidos de oposición hacia el proyecto de la 4T.

Aquí debemos partir de dos análisis. En la última encuesta realizada por Demoscopia, de fecha 25 de marzo de 2024, se tiene que considerar que:

Es realizada vía WhatsApp a mujeres y hombres mayores de 18 años (esto no se puede controlar, ya que cualquiera que conteste puede seleccionar cualquiera de ambas opciones, y realmente puede ser menor de edad, hombre o mujer, quien daría una respuesta, al final, engañosa.

El margen de error es de +/- 3.8 por ciento (esto nos dice que del resultado puede haber un error de 3.8 por ciento hacia arriba y/o hacia abajo)

En dicha encuesta el nivel de confianza es de +/- 95 por ciento (aquí es en donde comienza a ponerse interesante, primero porque el porcentaje de confianza es eso, la confianza del resultado que muestras. En números positivos el 95 por ciento de confianza es ideal, pero el -95 por ciento de confianza sólo muestra que la certeza es de un 5 por ciento.

Cabe resaltar, además, que el rechazo de la encuesta fue del 68 por ciento, lo que se traduce en el hecho de que cada cien personas a las que les llegó el mensaje y lo abrieron, sólo 32 lo contestaron.

En contraparte, la suma de los liderazgos que pretenden sumarse a dicho proyecto, encandilados por la estrategia anterior o por algún acuerdo remunerativo, tienden a caer en la incongruencia del equipo a donde se suman: NO ROBAR, NO MENTIR, NO TRAICIONAR.

Que no nos sorprenda pues la insistente línea estrategia durante las ocho semanas restantes de campaña.

1. La encuesta tendenciosa que arroja números elevados para mostrar la distancia entre un proyecto y otro y que será publicada siempre por un medio de circulación local impreso, que ha apostado a perder su credibilidad por encima del prestigio periodístico, y

2. La suma de liderazgos de los distintos partidos políticos que emplearán un discurso de convencimiento moral a modo de lectura discursiva para repetir lo que les han puesto en consigna y cerrar el acuerdo al que han llegado para verse favorecidos en lo individual, recalcando este último punto, poque ante la sociedad los destapan como líderes de sectores que pretenden sumar una gran agrupación, y al final son ellos solos sin seguidores quienes terminan adhiriéndose al proyecto invitado.