Jerez… Miel y veneno a la vez
RICARDO EVODIO CABRAL VERA
Se cumple el acuerdo
Cuando los regidores del bloque rebelde y la síndica exigieron incluir en la minuta de acuerdos para liberar la presidencia municipal, un punto en el que consideraban una jornada para capacitación sobre atribuciones, derechos y obligaciones de todos los miembros del cabildo, nos apreció un absurdo total y así lo señalamos en este mismo espacio, que a estas alturas estuvieran demandando ser instruidos sobre sus funciones y con ello reconocer que no se consideran aptos para el cargo.
Madrid como opción
Sin embargo alguien resultó demasiado lista y amparada posiblemente en ese acuerdo, se va a tomar un curso por cuenta y costo del erario municipal, pero no a Zacatecas como ocurre en la mayoría de las ocasiones que alguien va a tomar esta clase de adestramientos, ni a la ciudad de México que podría ser aceptable o a otra entidad de la república; de la larga lista de invitaciones que con frecuencia reciben los municipios para este tipo de eventos, muchos de los cuales resultan patito o negocio redondo de quien los promueve, la síndica Adriana Margarita Berumen Acuña, escogió nada más y nada menos que la ciudad de Madrid, España.
Lo paseado quién se lo quita
Algunas personas que han estado cercanas a ella en las recientes semanas en las que se mantiene en el ojo del huracán, dudaban de que efectivamente la funcionaria hubiera tomado la decisión de acudir a este curso, porque se consideró la posibilidad de que se tratara de una trampa para exhibirla, pero finalmente, parece que Madrid resultó más tentador que cualquier temor y bueno como dicen, que hablen y que critiquen, lo paseado quien se lo quita y si efectivamente pudiera tratarse de una trampa, cayó redondita, sin la mínima dificultad y con una aparente inocencia.
En qué nos beneficia
Valdría la pena cuestionar, en qué se beneficia el municipio con este tipo de supuestos cursos, cuando hay verdadera voluntad y vocación de servicio, no se requiere más que hacer efectivas las palabras que –parece que sólo como protocolo–, se dicen al momento de rendir protesta para el cargo y que deberían comprometer a cumplir y hacer cumplir la Ley Orgánica, el Bando de Policía y Buen Gobierno y los reglamentos que de ellos emanan, cuando esto se cumple, todo lo demás viene por añadidura y no se requiere andar ideando la forma de irse de viaje con el pretexto de la capacitación.
Sin credibilidad
Como lo ha hecho en las ocasiones anteriores, no dudamos que Adriana Margarita podrá salir a dar la cara ante esta nueva situación que por su magnitud es más escandalosa que las anteriores y por lo tanto sus argumentos son menos creíbles. El costo político, aunque ella insista que no es política, podría resultar alto en lo personal y el manejo de esta nueva crisis no le resultará tan sencillo como las dos ocasiones anteriores; hay quien incluso anticipa escenarios inmediatos a su retorno de España y consideran que tal vez el Ayuntamiento se vea en la necesidad de recurrir a su suplente, pues sea cual sea el argumento que pueda dar, se invalidará por la misma ciudadanía que paulatinamente le ha restado credibilidad y si en algún momento alguien se conmovió con una madre que de manera férrea defendió a sus hijos, hoy le voltean totalmente la tortilla.
