Jerez… Miel y veneno a la vez
RICARDO EVODIO CABRAL VERA
A otra cosa mariposa
Una vez concluido el proceso electoral en otras entidades, especialmente la del Estado de México, que concentró la atención de los partidos políticos durante varios meses, se intesificará la actividad política en otros estados como Zacatecas, sus municipios y sus distritos, tanto de índole federal como local.
Algunos políticos con posibilidades y otros acostumbrados a hacer ruido para negociar espacios, empiezan a darse a notar, aprovechando por ejemplo el marco por el Día de la Libertad de Prensa del que hace apenas unas semanas no tenían ni idea que existía y repentinamente organizan un evento para “reconocer el trabajo de los comunicadores”.
A la mitad del camino
Aunque el presidente Fernando Uc Jacobo continúa por ahora encabezando la lista de candidateables, por el nuevo formato de reelección, sin embargo, a casi la mitad de su corto periodo constitucional, el mismo alcalde ha abierto múltiples coyunturas que hacen renacer en varios, la posibilidad de sucederlo por los tres años siguientes.
Hay quien opina que por las dificultarse sobre todo de tipo económico y la ausencia de obras de relevancia, no le dará a Fernando Uc para repetir en el cargo, sin embargo también hay que decir que por ahora el resto de los partidos y el mismo Revolucionario Institucional, han enseñado poco y los destapes disfrazados se han dado a título personal en las redes sociales y cuidando en no incurrir en acciones que a la postre puedan considerarse actos anticipados de campaña y con ello su ilusión se vaya por la borda.
Se piensa incluso que el munícipe como cabeza de un proyecto y como alcalde de un municipio que es cabecera tanto del distrito electoral federal y del local, tendría la posibilidad de buscar otras alternativas.
La historia no le favorece
Históricamente, al menos durante los últimos periodos gubernamentales, los alcaldes en turno –sin excepción–, le han suspirado con fuerza a la posibilidad de una diputación federal y cuando la realidad política se encarga de ubicarlos, se conforman al menos con seguir vigentes en una diputación local que la mayoría tampoco ha conseguido.
En los últimos 30 años, sólo dos presidentes han logrado ese salto de la presidencia municipal a una curul, Jesús Sánchez García, quien en 1995 dejó la alcaldía para buscar y ganar la diputación local por el entonces distrito 18 de Villanueva y Andrés Bermúdez Viramontes que en 2006 dejó inconcluso su periodo gubernamental para convertirse en diputado federal por el segundo distrito que por vez primera tenía su sede en Jerez.
En su momento Benito Juárez García pretendió la candidatura por un espacio en el Congreso de la Unión mismo que le fue arrebatado por una maniobra política de sus antagónicos y posteriormente intentó ser diputado local, de inicio se le declaró ganador, pero finalmente se cambió la decisión en la fase postelectoral.
El otro caso sería más reciente y por lo tanto más fácil de recordar, el de José Manuel Viramontes Rodarte, quien siendo alcalde fue por la diputación federal, con muchas posibilidades pero a final de cuentas no le alcanzó.
A la inversa, es decir de la diputación a la presidencia, también ha quedado en intentos y aunque algunos lograron ser primero diputados y luego alcaldes, no fue un brinco inmediato, sino que debieron pasar algunos años; Alma Araceli Ávila, diputada en la LVI Legislatura se postuló como alcaldesa y perdió con Andrés Bermúdez; seis años después lograría su objetivo.
Arturo Villarreal Ávila, que asumió la diputación como suplente en la última parte de la LII Legislatura, supliendo a Jesús Manuel Díaz Casas, debió dejar pasar casi dos periodos para alcanzar su anhelo de ser munícipe.
Si bien las estadísticas históricas no son norma, éstas no favorecen a los alcaldes en turno para seguir vigentes después de concluido su periodo.
Existe por otra parte el factor del supuesto hartazgo, que alentado por los grupos políticos contrarios, cobra efecto cuando el electorado parece cuestionar, ¿otra vez los mismos?, sólo brincan de un lugar a otro.
Tempus fugit Laboremus
Por ello aunque la baraja de posibilidades para Fernando Uc Jacobo parece más amplia que la reelección, lo más sano sería desarrollar un buen papel y lo demás tendría que darse por añadidura. Nada mal le vendría poner un poco de orden no sólo en su gobierno, también a nivel partidista.
Tempus Fugit Laboremus. Así reza el escudo que por años utilizó el municipio y que ahora resultó de propiedad privada; trabajemos, el tiempo se va.
Aunque pareciera que el ejercicio gubernamental apenas empieza, es momento de preparar el primer informe de gobierno, es decir a la mitad del camino y a partir de ahí quedará medio año para el inicio de las campañas, pues justamente en 12 meses estaremos viviendo una nueva jornada electoral.
LNY/Redacción