Jerez festeja el Sábado de Gloria con el regreso de sus paisanos y la seguridad
Jerez de García Salinas, Zac.- Llegó el día más esperado de la Feria de Jerez 2016, y con él miles de visitantes de varios puntos del país y el extranjero para presenciar la gran cabalgata en la que finos caballos y vistosos atuendos charros visten el Centro Histórico.
En su caballo español, Pepe Pasteles, al lado del gobernador del estado, Miguel Alonso Reyes, encabezó el inicio de la tradicional cabalgata partiendo del puente del Río Grande y recorriendo la calle principal a paso lento, saludando a quienes observaban desde sus palcos y banquetas el recorrido de los cabalgantes.
Alonso Reyes resaltó lo valioso de mantener una tradición como la del Sábado de Gloria, y sobre todo en Jerez, en donde las condiciones de seguridad han mejorado, de ahí que el turismo rebasen todas las proyecciones de ocupación hotelera y los migrantes vuelvan a creer en su estado recorriendo las carreteras con seguridad.
Pepe Pasteles sorprendió a los espectadores poniendo a bailar a su corcel, portando el tradicional traje charro y saludando a su paso a todos aquellos que se unieron a la gran fiesta charra, muchos de ellos migrantes, a lo cual el alcalde comentó que era satisfactorio ver de regreso a las familias de paisanos que en su mayoría arribaron al municipio para ser parte de la Feria desde su inicio el pasado 19 de marzo.
Tras descender de los caballos, el gobernador y el alcalde se dirigieron al palco ubicado a un costado del Portal Inguanzo, desde donde el munícipe presenció el paso de los caballos y saludó en algunos caso a la distancia, en otros de mano, a las personas que participaron en la multitudinaria cabalgata a la que se unieron este año cerca de 10 mil equinos.
Llegadas las 13:00 horas, dio inicio la quema de Judas que se realizó frente a los bares y cantinas de la ciudad y se extendió a otros puntos como la calle Galeana, donde se colocó una cantidad importante de artefactos, lo que permitió descongestionar un poco el centro de la ciudad.
Miles de personas provenientes de diferentes partes de la república y Estados Unidos fueron partícipes de esta feria, en la que imperó la música de banda y tambora, además de algunos conjuntos norteños y mariachi, que en todas partes de la ciudad pusieron alegría a la fiesta que tiene ya más de un siglo de tradición.
LNY/Comunicado