Iván Husain Vitar Soto, incongruente, intolerante y represor
OSVALDO ÁVILA TISCAREÑO
Ya en otras colaboraciones me he ocupado de la problemática que enfrentan los antorchistas del municipio de Ojocaliente, donde Iván Husain Vitar Soto llegó al gobierno municipal a través de la alianza PAN- PRD, al cual desde los primeros días de la administración le entregamos un pliego petitorio que incluía demandas de carácter elemental como servicios básicos tales como agua potable, electrificación, pavimentación de calles y apoyos de carácter asistencial como becas, despensas, empleo temporal, apoyos a la vivienda, etcétera.
Como puede ver cualquiera, se trata de acciones que son perfectamente posibles de incorporar a cualquier programa de gobierno, en virtud de su carácter básico y de su gran impacto social debido a la precaria condición económica en que viven la mayoría de los mexicanos.
La respuesta inmediata, fue un rosario de justificaciones y negativas para atender las solicitudes, siendo el punto central la carencia de recursos dado el profundo endeudamiento en que se encontraba el municipio y la falta de programas que pudieran atender a los peticionarios. No quedó otro camino que salir a la calle a denunciar la falta de voluntad para la atención de las demandas y la respuesta no se hizo esperar.
Personalmente el Alcalde y consortes visitaron las comunidades, ofreciendo el oro y el moro a condición de que la gente abandonara las filas del antorchismo y a cambio de ello se les prometieron todos los apoyos sociales y por el contrario, a los que se negaban recibían la clara amenaza de que serían excluidos de por vida de las acciones del gobierno municipal, o sea que el cuento de que no había recursos, sólo nos lo aplica a nosotros, pues Vitar Soto hace dispendio de los recursos para desarticular movimientos sociales y allegarse de incondicionales.
* Dirigente estatal del Movimiento Antorchista de Zacatecas