Huevos para combatir la inseguridad
RAÚL MANDUJANO SERRRANO *
Huevos para combatir la inseguridad.- Mientras degusta de un reconstituyente tamal de rajas con queso y un atole de arroz previo a la jornada laboral, el kamasutra de las posiciones editoriales lee las conclusiones del diagnóstico que especialistas del país realizaron sobre seguridad y justicia, del foro promovido por la Fundación Colosio. Los datos no son nada alentadores. Tan sólo el 50 por ciento de la población piensa que la seguridad es el mayor problema del país y el 87 por ciento de los delitos cometidos no se denuncia, lo que fomenta la percepción de que el gran ganador de la escena nacional es la impunidad.
Y no es que esto parezca nuevo. No lo es; está por demás claro que el autoritarismo del ministerio público relega a segundo plano a quienes debe servir, que son las víctimas del delito, amén de que los procesos son extremadamente largos, formalistas y poco transparentes, inhibiendo así la presentación de denuncias de parte de los ofendidos. Vamos, piensan los que analizan esta situación, “se ha perdido la confianza por el entramado de instituciones públicas y las disposiciones jurídicas que fueron diseñadas para procurar y administrar justicia pero que, paradójicamente, han terminado siendo sumamente ineficaces y arbitrarias”.
El hacedor de las fábulas mandujanescas deja de comer… Coloca en la mesa de mármol italiano de su inmenso desayunador, la hoja de maíz que guarda medio tamal y a un lado el jarro semivacío. Está intranquilo, sigue leyendo con ojos desorbitados el informe: En México se lavan entre 19 mil y 29 mil millones de dólares anuales. Solamente entre 2004 y 2009, la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda detectó poco más de 28 millones de operaciones “relevantes, inusuales y preocupantes”, pero, aún sobre esta información, el número de personas sentenciadas por este delito es bajísimo. Se emitieron únicamente 53 sentencias entre 2006 y 2010. Entiende el amanuense que esto podría implicar que es, o buen negocio, casi indetectable (que ya vimos que no) o que existe contubernio para permitir que estas operaciones continúen.
El Fondo Monetario Internacional al respecto, ha señalado que el bajo número de sentencias es resultado de fallas en la capacidad judicial y de la debilidad de la evidencia presentada por la Procuraduría General de la República. ¿En serio? ¿Será? ¿Neta?
Y van más datos: Durante 2010, el crecimiento de los homicidios dolosos se concentró en 73 de los 2 mil 440 municipios del país. En más del 40 por ciento la presencia policial es nada, hecho que implica control de espacios, cobro de cuotas por “derecho de piso”, venta de “protección”, en fin…
El irreverente escribano recuerda que al crearse el Sistema Nacional de Seguridad Pública, se formuló su estructura como una gran base de datos que, entre otros objetivos, se convirtiera en una gran base de datos criminal y compartiera ello a las instituciones de seguridad pública del país para actuar con mecanismos de inteligencia en el combate a la delincuencia. No ha sucedido y, contrariamente, las mea culpas son una constante hasta en la propaganda política.
Que absurdo eso de “que los delitos se cometen en estados gobernados por el PRI”, “Los feminicidios crecieron en el Estado gobernado por Peña”… ¡Jaladas! ¿Quién gobierna el país? ¿Y las promesas de Calderón? ¿Será diferente porque el panadero sea mañana repostera?… Si las cifras se dispararon en este sexenio, es porque quizá en la receta del amasijo les faltaron güevos, ni duda cabe… ¿O era con “h”?…
Colofón: Vaya día para morir
El 15 de mayo ha quedado guardado en la memoria del México de la cultura. Y es que, vaya día para morir. Elba Esther avisa en su mensaje que no aceptará chantajes, que la historia la absolverá y que la villana de la película no es ella, sino Vázquez Mota. Ésta a su vez replica a la eterna dirigente que es la culpable de todos los males de la patria, y según ella, puso al descubierto un maridaje entre Peña y la Gordillo. Han pactado –dijo-… En ese ejemplo de paz y respeto que recuerda que entre mujeres pueden despedazarse pero nunca hacerse daño, Carlos Fuentes partió al limbo intelectual y literario, para reseñar el nuevo evangelio. Sus eternas frases desde hoy si serán la biblia del mortal.
El creador de la irreverencia vodevil recuerda en La Muerte de Artemio Cruz, de su autoría, que “La muerte espera al más valiente, al más rico, al más bello. Pero los iguala al más cobarde, al más pobre, al más feo, no en el simple hecho de morir, ni siquiera en la conciencia de la muerte, sino en la ignorancia de la muerte. Sabemos que un día vendrá, pero no sabemos lo que es”… Quizá eso le faltaba aprender y era el momento del perene aprendizaje. El Maestro se va…
El hacedor de las crónicas sotaneras se queda con la mejor de las irreverencias de Fuentes: “Las conferencias deben ser como las faldas de las mujeres: suficientemente largas para contener algo y suficientemente cortas para despertar el interés”… No cabe duda, por algo Carlos Fuentes falleció el Día del Maestro…
De refilón: Los Bulterriers de San Pedro Tultepec
La manifestación de ejidatarios- propietarios de Lerma, específicamente de Amomolulco frente a la Casa de Gobierno de la entidad, parece una advertencia. Como auténtica jauría, los bulterriers tultepequenses invadieron 44 hectáreas y anuncian que tomarán otras mil 900 que les corresponden y se ubican en Lerma. El asunto, aunque corresponde ser solucionado por la Federación, al menos en el litigio, tiene una arista, hay enfrentamientos y heridos, niños y mujeres… ¿Eso también lo debe solucionar la Federación? ¿Qué oscuros intereses mueven la iniciativa violenta de los ejidatarios de San Pedro?
La del estribo: La caja negra
Cuenta la leyenda que en cierta ocasión, tres mulatas decidieron viajar de Cuba a México en avión. Mientras esperaban subir, una de ellas dijo: “Yo no sé utede, pero yo me vo a poné una tanguita de coló rosa ante de montame en ese avión”. ¿Y pa’ qué? –Cuestionaron las otras dos-. “Poque si el avión se cae y caigo con el culo p’arriba, la tanguita coló rosa se va a ve desde lejo y será fáci recatame”. La segunda dijo: “Pué yo me vo a poné una tanguita naranjada y foforecente”. ¿Y po qué de ese coló? –Preguntaron- “Poque si caigo al agua con el culo p’a rriba, ese coló sinifica recate”. Entonces la tercera dijo: “Ah, pue si es así, yo, no me vo a poné na”. ¿¡Cómo dice!? –Preguntaron sorprendidas sus acompañantes- “Que yo voy sin tanguita ni na’, voy a culo pelao. ¡Como lo oyeron! poque cuando se cae un avión lo primero que bucan e la caja negra… Hasta otro Sótano.
* Periodista