Gobernabilidad democrática en México
CAMERINO ELEAZAR MÁRQUEZ MADRID
La gobernabilidad democrática de México estará en juego derivado del Proceso Electoral Federal 2017-2018, la cual, puede existir mediante la llegada de un proyecto de gobierno de coalición, cuyo reto principal será transformar el sistema económico y aportar a la construcción de un nuevo régimen político en el país, pues el presidencialismo que el PRI ha impulsado mediante las reformas estructurales sólo está beneficiandointereses privados.
El 8 de septiembre dará inicio formal el proceso electoral, ante ello, los partidos políticos tienen la obligación de hacer llegar al Instituto Nacional Electoral (INE) los métodos que habrán de seguir para elegir a sus candidatos para diversos cargos de elección popular, entre los que destacan el de presidente de México, senadores y diputados federales.
Las obligaciones de los partidos son para cumplir con lo establecido con la Ley General de Partidos Políticos y la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, las cuales tienen por objeto regular las disposiciones constitucionales aplicables a los partidos (nacionales y locales), establecer las disposiciones aplicables en materia de instituciones y procedimientos electorales, distribuir competencias entre la federación y los estados en estas materias, y la relación entre el INE y los Organismos Públicos Locales (OPLEs).
En el Partido de la Revolución Democrática (PRD) tenemos el compromiso de presentar la plataforma electoral a los más de 7 millones de afiliados, en la que debemos considerar que nuestro partido es determinante en los resultados de la próxima elección presidencial, por ejemplo, refiero los que obtuvimos en el proceso local en el Estado de México con nuestro candidato a la gubernatura, Juan Zepeda.
Tenemos que reflexionar que son amplias las posibilidades del PRD para seguir gobernando los estados de Morelos y Tabasco, además, recuperar Chiapas. Con lo cual los dirigentes, militantes y simpatizantes no debemos confiarnos, al contrario, tenemos que trabajar desde ahora, con unidad, organizados y dar a conocer a la ciudadanía los logros que nuestros gobiernos han alcanzado en favor del bienestar y la seguridad social.
Durante 28 años, el PRD ha obtenido triunfos importantes para México. Los resultados de nuestros gobiernos han sido de trascendencia con aportaciones favorables a la economía y desarrollo social, por ejemplo, en la Ciudad de México. Es real la posibilidad que en 2018 continuemos contribuyendo a la construcción de un futuro diferente al que vivimos, por ello, es fundamental impulsar candidatos idóneos que converjan con nuestros principios ideológicos.
Para poder consolidar un proyecto de gobierno ideal para México debemos tener presente que urge sacar al PRI de Los Pinos. En el Comité Ejecutivo Nacional del PRD aprobamos, por mayoría calificada, el documento que propone la creación de Frente Amplio Democrático (FAD).
La elección del 2018 no será una más, debido a que en ésta se jugará la vida democrática e institucionalidad del Estado mexicano, con ello, a que regrese la confianza de la ciudadanía. En definitiva, es tiempo de hacer política sin simulaciones e intereses particulares.
Promovemos que al FAD lo conformen la mayoría de los partidos políticos con el propósito de que haya equilibrio de poderes el cual permita construir un modelo semiparlamentario que haga que el presidente de la república le rinda cuentas al Legislativo, y que este último represente los intereses del pueblo mexicano, lo anterior, daría origen al equilibrio y autonomía en los tres poderes de la unión.
Buscamos un frente que intervenga para evitar que se sigan otorgando cuotas en los diferentes espacios de la función pública, por ejemplo, la designación de los magistrados del Poder Judicial de la Federación, ya que éstas obedecen a los intereses del partido en el poder, en este caso del PRI.
El contexto por el que votamos en favor del FAD es porque México está en un retroceso democrático en el que cada vez vemos mayor inseguridad, pobreza, desigualdad y descontento social hacia las instituciones, por ello, consideramos que es necesario consolidar un frente político ganador para la elección presidencial del 2018. Debo recalcar que en el PRD siempre ha sido una prioridad realizar alianzas con partidos de izquierda.
La alternancia es fundamental, sin embargo, para implementar cambios en lo sustantivo y volver a llevar a la sociedad mexicana a la vía democrática se requiere reconstituir todo el andamiaje institucional, de lo contrario incrementarán los índices delincuenciales, la intermediación de los poderes facticos como el narcotráfico, además, la corrupción e impunidad, los cuales están penetrando diversas áreas y niveles de las instituciones del Estado, esencialmente en las encargadas de brindar seguridad pública.
La realidad por la que atraviesa México ha generado que la mayoría de los electores no emitan su voto por el PRI, sin embargo, el propósito de ese partido es seguir ganando elecciones siendo primera minoría, como sucedió recientemente en el Estado de México, lo cual es absurdo; en tal sentido, debemos preparar una lucha electoral con propuesta, estrategia, organización, trabajo territorial y buenos candidatos, reconociendo que la unidad fortalecerá al proyecto de gobierno del que habremos de ser parte.
El Estado mexicano ha sido rebasado, no cumple con su obligación con la población, no brinda certeza de seguridad patrimonial y personal. Nos queda claro que su esencia es tener el monopolio a través de la violencia, por ello, en el PRD nos hemos pronunciado en favor de alianzas ganadoras que impulsen buenos gobiernos que encabecen proyectos que atiendan y erradiquen los graves conflictos por los que atraviesa el país, como los económicos, políticos y sociales. Se debe lograr la anhelada gobernabilidad democrática de México.
* Secretario de Organización del Comité Ejecutivo Nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD).