Falta de ética andar en campaña con cargo público: Enríquez
Zacatecas, Zac.- Los precandidatos al Senado por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), José Narro Céspedes y Jaime Enríquez Félix coincidieron en la necesidad de que los aspirantes a cargos públicos deben renunciar a sus cargos, como parte de los “principios éticos y morales” que siempre ha enarbolado el Sol Azteca.
Narro Céspedes, por su parte, calificó como “preocupantes” las aseveraciones de la diputada federal Claudia Anaya Mota, quien afirmó que “no tienen por qué renunciar a su cargo”, ya que los estatutos del partido, así como los del Instituto Federal Electoral (IFE) determinan cuándo es que deben separarse de sus puestos los servidores públicos.
El legislador federal con licencia afirmó que la separación de los cargos tiene que darse como parte de la coherencia democrática, toda vez que se tiene que garantizar que todos los participantes de los procesos electivos contiendan en condiciones de equidad.
Por ello, ratificó la separación de los cargos como un asunto de congruencia personal y para con todos los participantes del proceso interno de selección de candidatos.
En el mismo sentido, Enríquez Félix expresó que la Declaración de Principios del Partido de la Revolución Democrática, en cuya elaboración “participamos sus fundadores”, es muy clara en los señalamientos éticos a su militancia. “La búsqueda de cambiar hábitos inadecuados que habían permanecido entre los viejos priístas, era una de las intenciones de ese documento”, dijo.
Y asentó que, precisamente, uno de esos principios contiene la facultad de votar y ser votado, pero junto a ello, “la práctica de una democracia interna que permita la movilidad entre los actores políticos del PRD, la no permanencia de los mismos personajes en diferentes puestos en demérito de la participación de todos y, desde luego, un conjunto de normas que buscan idealmente generar el ambiente de la Democracia con que soñó desde siempre el partido del Sol Azteca”.
Y agregó que las convocatorias son normatividades específicas que reglamentan la participación para contiendas electorales internas –sólo eso–, “y desde luego, no son la filosofía del partido. Esta se encuentra en los Documentos Básicos y en el Estatuto, que parecen no comprender quienes viven en el analfabetismo político”.
El uso de los Recursos
José Narro, quien solicitó licencia a la diputación federal el pasado 15 de diciembre, cuestionó el hecho que la diputada Anaya Mota refiera que las precampañas no implican ir a buscar votos al exterior del partido y, por lo tanto, no se requiere hacer uso de recursos.
Y explicó que el PRD aplicará una serie de encuestas para determinar a los candidatos para el Senado y las diputaciones federales, resultados que serán ratificados por el Consejo Nacional perredista, por lo cual, “estos ejercicios demoscópicos serán aplicados a la población en general y no sólo a miembros del partido”.
En este sentido, el dirigente nacional de la expresión política perredista Unidad Democrática Nacional (Udena), recordó que la misma convocatoria perredista fija topes de gastos de campaña al tiempo que establece tiempos en medios electrónicos, concretamente en el caso de la precampaña presidencial.
Por lo anterior, José Narro ratificó su llamado a que se separen del cargo todos aquellos pre candidatos que actualmente ocupan algún cargo de elección popular o un cargo gubernamental, estatal o federal, con el fin de garantizar un proceso en condiciones de equidad.
Sí hay Clara Ventaja
En este contexto, Jaime Enríquez recalcó que “es claro que quienes contamos con un cargo público tendremos una ventaja en términos de presencia y recursos sobre los demás compañeros que no lo tienen”.
Y es que, explicó, ser presidente municipal, diputado, senador o funcionario público conlleva percibir un salario o una dieta, específicamente por el encargo o las funciones que se desempeñan. “Pero utilizar esa remuneración, o el tiempo pagado a esa actividad para hacer campaña política por otro puesto, no sólo me parece falto de ética, sino el preámbulo para la generación de un contexto de corrupción colectiva que justifica cobrar a toda costa por hacer lo que sea”.
Además agregó, en clara alusión a precandidatos como Iván de Santiago, alcalde Villanueva, que un presidente municipal, “por el salario que percibe, debiera estar administrando su municipio y evitar dar ruedas de prensa sobre temas ajenos o visitar otras comunidades con el fin de promover su candidatura. ¿Es acaso correcto utilizar el encargo público de un poder colectivo como el Legislativo, para afirmar en ruedas de prensa que la gestión individual genera dinero para programas específicos? ¿Qué no los presupuestos se discuten en las comisiones respectivas, colectivamente, y luego en el pleno colectivamente con 500 diputados? Por lo que en las cámaras de diputados o de senadores sólo hay decisiones colectivas”.
Por ello insistió que usar recursos públicos para precampañas “no solamente es poco ético sino inmoral, y rompe con uno de los principios básicos por los que murieron más de 600 militantes en la búsqueda de ejercer una democracia plena”.
