Enroques y ajustes en el equipo
JUAN GÓMEZ HERNÁNDEZ *
Muchos priistas –no todos, por supuesto- se solazan por el triunfo obtenido en las urnas el pasado 1 de julio, que le dio el “carro completo” al gobernador Miguel Alonso Reyes y que lo colocó temporalmente como el hombre fuerte de la política zacatecana en este momento.
Con el triunfo en las pasadas elecciones el mandatario estatal arribará el próximo 8 de septiembre a entregar su segundo informe de gobierno a la LX legislatura y después, emitirá un mensaje político y una síntesis de las actividades desarrolladas durante este segundo año al frente de la administración pública estatal.
Alonso Reyes llegará fortalecido políticamente y también quienes le apoyaron en la operación para obtener un resultado contundente en las urnas.
En este contexto el Ejecutivo del estado medita y calcula los cambios que realizará en su equipo de trabajo en los próximos días que, seguramente, tendrán verificativo después de que rinda su segundo informe de labores.
Como siempre la especulación ronda en distintos ámbitos.
¿Cuáles son las dependencias que podrían ser sujetas de un cambio de su titular?
La primera que está en lista de espera es la Secretaría General de Gobierno, en la que el ingeniero Esaú Hernández Herrera, no ha logrado controlar los hilos de la política doméstica y tampoco imponer un estilo de gobierno entre el equipo gubernamental.
Otra de las Secretarías de Despacho que han sufrido un severo desgaste es la Secretaría de Educación y Cultura, en donde el estilo impositivo e intolerante de su titular, Marco Vinicio Flores Chávez, se ha impuesto en la conducción de la política educativa del estado.
El Secretario de Educación y Cultura no ha entregado buenos resultados durante dos años de gestión en la Secretaría de marras. Tampoco se ha fortalecido políticamente, pues en su afán de jugar en dos bandos, terminó quedando mal con todos.
Hombre políticamente cercano a la lidereza magisterial Elba Esther Gordillo en otra época, llegó a la Secretaría con la aureola “sentista”, pero una vez sentado en la silla máxima de la educación estatal, jugó las cartas de la burocracia política en la sucesión de la dirigencia magisterial.
No quedó bien ni con Dios ni con el diablo. Su suerte está echada.
En la Contraloría Interna su titular Guillermo Huizar Carranza ha sufrido un acelerado desgaste tanto al interior de la administración pública como de cara a la opinión pública zacatecana.
Su dualidad política le restó credibilidad e imparcialidad a la función que desempeña en una dependencia que si algo requiere, es confianza e imparcialidad. Ninguna de las dos le ha proporcionado.
Huizar Carranza es uno de los impulsores de la reforma administrativa que recientemente fue aprobada por la LX legislatura y además, goza de la confianza y apoyo del gobernador Miguel Alonso.
Sin embargo, colocarlo como titular de la aprobada Secretaría de la Función Pública, aceleraría la desconfianza y falta de credibilidad en una dependencia que requiere, no solo de la anuencia del mandatario estatal, sino de la sociedad zacatecana en su conjunto.
Además, está pendiente la resolución que emita la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) sobre las denuncias en su contra durante el pasado proceso electoral.
En los Servicios Coordinados de Salud podría también generarse un ajuste en su dirección general, a causa de que el actual titular Raúl Estrada Day, no ha podido conducir con mano firme a la dependencia y sobre todo, transformar una de las instancias públicas más sensibles de una sociedad como la zacatecana.
En la Secretaría de Desarrollo Económico el caso es diametralmente diferente. Eduardo López Muñoz, ha dado resultados muy por arriba de una expectativa en un estado marcado por el rezago y la marginación industrial. Su trabajo y sensibilidad han caracterizado su desempeño al frente de la Secretaría y por ello, las causas de su separación de la dependencia obedecen a otra lógica en la administración pública.
Y en este sentido, el posible ajuste que se haga en la Procuraduría de Justicia del Estado, a cargo de Arturo Nahle García, obedecerá también a otro tipo de enroque político.
Al tiempo.
* Periodista