En Colotlán estamos muy agradecidos con Miguel Alonso: Haro Esparza
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
Zacatecas, Zac.- En Colotlán, toda la población estamos muy agradecidos con el gobernador de Zacatecas, Miguel Alonso Reyes, pues gracias a su apoyo se logró reencarpetar el Bulevar Reforma, afirmó Víctor Manuel Haro Esparza, secretario del Ayuntamiento de ese municipio de Jalisco.
En entrevista vía telefónica, el funcionario municipal, si bien aclaró que no existe la intención de cambiar el nombre del bulevar, de Reforma a Miguel Alonso Reyes, sí hay un ánimo muy fuerte a favor del mandatario zacatecano, ya que logró destrabar recursos que el gobierno de Jalisco, encabezado por Aristóteles Sandoval, en su momento, les negó.
Haro Esparza detalló que el presidente municipal, José de Jesús Navarro Cárdenas, acudió con el gobernador de Jalisco, para solicitar los recursos y llevar a cabo esta obra que beneficia a todos los que transitan por la carretera federal que conduce a Guadalajara, «entre ellos muchos zacatecanos».
Sin embargo, las gestiones en su gobierno no fructificaron, de ahí que el alcalde «se fue a Zacatecas, habló con el gobernador, y éste lo canalizó a la delegación de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), que encabeza Luis Alfonso Peschard.
Así, con la ayuda de los zacatecanos, se asfaltaron tres 270 metros lineales distribuidos en cuatro carriles, igual a 45 mil 780 metros cuadrados más cien metros. Se incluyó también el balizado y señalética nueva.
Cabe destacar que, según información de la Presidencia Municipal de Colotlán, la inversión aproximada de la obra por kilómetro asfaltado es de cinco millones de pesos. El Bulevar Reforma cuenta con una longitud de tres kilómetros 270 metros.
La obra en el Bulevar Reforma fue de reencarpetamiento asfáltico que requirió de maquinaria pesada utilizando una asfaltadora, un rodillo de llantas, una barredora de cilindro, una pipa de regado de emulsión, una pipa de abastecimiento de agua y ocho camiones góndolas de 50 toneladas.
Igualmente, la mano de obra requirió de 24 personas distribuidas entre operadores, choferes, y personal afine a los trabajos realizados, así como una cuadrilla de bacheo integrada por seis personas.
Víctor Manuel Haro expresó que los trabajos que se realizaban antes en ese bulevar «eran muy malos», de ahí que cada seis meses se tenían que hacer arreglos «pero nunca quedaba bien».
LNY/CGVD
