El partido que debemos ser

Como perredista una de mis principales convicciones es la de buscar el fortalecimiento del partido, lograr la unidad de las y los militantes, crear estructuras, renovar los cuadros y alcanzar alianzas con los partidos mexicanos de izquierda.

Ahora, que estamos en vísperas de que inicie el proceso electoral 2016, estoy más convencido de que sólo consolidando esos retos podremos hacer que el Partido de la Revolución Democrática se identifique con el pueblo mexicano y se convierta en una opción electoral que lo lleve a gobernar.

En un análisis autocrítico, debo señalar que al Sol Azteca nos ha faltado consolidarlo ante el electorado y retomar sus principales demandas para abanderarlas, identificándonos con ellas.

Por ello considero que estamos a tiempo de encauzar el rumbo y tomar las medidas necesarias para fortalecer al PRD, de tal forma que hagamos propuestas que coadyuven a atender la crisis económica y de inseguridad que enfrenta México; así como para combatir la pobreza y generar alternativas para la población.

El próximo año habrá elecciones para gobernador en 12 estados y una intermedia local; así como las del 2017, cuando se elegirá al ejecutivo del Estado de México y, finalmente, los comicios presidenciales del 2018.

Es por lo anterior que el PRD está obligado a diseñar urgentemente una estrategia integral en la perspectiva de transformar las condiciones sociales y políticas actuales y construir una agenda vinculada a sociedad civil hacia las elecciones próximas.

La estrategia que planteo debe oponerse firmemente a las políticas económicas neoliberales impulsadas por el gobierno de Enrique Peña Nieto, que provocaron mayor desigualdad y el debilitamiento del tejido social, sin brindar esperanza para las nuevas generaciones.

También debemos trabajar arduamente en lo interno para fortalecer a la militancia y los cuadros, con una formación política y sistemática, que promueva el relevo generacional y la unidad. Además, debemos mantener una comunicación y relación permanente con los gobiernos y representantes populares emanados del PRD para vigilar el cumplimiento de nuestras propuestas y de los intereses partidistas.

Para lograr esa fortaleza que tanto necesitamos es necesario aplicar las siguientes medidas:

1.- Ser un partido de firme oposición, de causas y claras propuestas.

2.- Ser un partido que acompaña, observa y verifica a sus gobiernos.

3.- Ser un partido que vigila y se coordina con sus grupos parlamentarios federales y locales.

4.- Impulsar una amplia política de alianzas.

5.- Abrir el partido a la sociedad.

6.- Ser un partido que impulse la formación política y el relevo generacional.

7.- Ser un Partido que reivindique, promueva y practique la ética y transparencia.

8.- Ser un partido con órganos de dirección, institucionales y fuertes en todo el país.

9.- Ser un partido que sepa comunicar.

Para alcanzar esas metas, el Sol Azteca debe darse a la tarea de realizar un diagnóstico organizativo en las entidades, revisar los errores cometidos en los métodos de elección de candidaturas, replantear el modelo de afiliación actual para abrir el partido y vincularlo a la sociedad.

Es menester regresar a nuestros orígenes con los ciudadanos, sociedad civil organizada, sectores y movimientos sociales.

Me parece necesario actualizar el programa y nuestra línea política de alianzas para los procesos electorales locales en 13 estados en el 2016; construir una estrategia electoral y organizativa que nos reposicione ante la sociedad y el electorado con una perspectiva ganadora en el 2018.

Es urgente que este mismo año se realicen las reformas estatutarias que acuerde la militancia para abordar temas como:

a)    Evaluación y fortalecimiento de los gobiernos estatales y municipales;

b)   Políticas públicas de carácter social;

c)    Agenda legislativa;

d)   Gobiernos de coalición de izquierda en donde gobernamos como PRD;

e)    Línea Política y Política de Alianzas;

f)     Partido frente

g)   Unidad de las izquierdas y frente amplio opositor; y

h)   Formas de coordinación política del Partido con sus grupos parlamentarios en ambas cámaras del Congreso de la Unión y Legislaturas Locales.

Sólo así estaremos a la altura de las exigencias y necesidades de la población mexicana y, por lo tanto, en la posibilidad de convertirnos en gobierno a través de triunfos electorales, en el que la población nos dé su voto de confianza.

*Consejero Nacional del PRD