El Madero del PAN
JUAN GÓMEZ
El Partido Acción Nacional definió este fin de semana a la Comisión Organizadora para la renovación de su dirigencia nacional, en medio de una crisis interna generada, principalmente, por el control del aparato político partidista y por las prácticas de corrupción que se han generado entre algunos de sus representantes populares.
El actual dirigente nacional panista, Gustavo Madero, logró sacar adelante su propuesta de Comisión Organizadora que será el árbitro de la contienda de renovación del partido, así como el reglamento que regirá en dicho proceso.
A partir de este lunes la citada comisión iniciará los trabajos preparatorios de organización para la elección de la nueva dirigencia, pero tendrá validez jurídica hasta que el Instituto Federal Electoral (IFE) avale su reglamento interno, lo que se estima será en el mes de febrero, y partir de esa fecha, correrán 90 días para que se realice la elección que será aproximadamente en el mes de mayo.
Madero continuará como presidente del Comité Ejecutivo Nacional albiazul hasta el mes de febrero y después dejará el cargo para contender con sus oponentes, el senador Ernesto Cordero (ex secretario de Hacienda con Felipe Calderón) y Juan Manuel Oliva, ex gobernador de Guanajuato, porque todo parece indicar que la ex candidata presidencial Josefina Vázquez Mota, no estará en la contienda.
En este momento el político panista que tiene los dados cargados en la mano es sin duda, Gustavo Madero
Al parecer Gustavo Madero controla a los estados fuertes que poseen el voto mayoritario de los panistas, así como a la mayoría de los gobernadores blanquiazules que podrían mover al aparato blanquiazul para llevarlo a la victoria nuevamente.
Asimismo habría que tomar en cuenta el apoyo que obtendría de la Presidencia de la República, puesto que ha sido pieza clave en la conformación del Pacto por México, de donde derivaron las reformas estructurales recién aprobadas, principalmente la Energética y la Política.
El actual líder blanquiazul es un hombre que ha conectado perfectamente con el equipo político del Presidente Peña Nieto, y por lo tanto, es un valioso activo que el sistema gobernante no lo dejará solo en la lucha por la renovación de la dirigencia.
Además, hay que tomar en cuenta que luego del “cambio” en el liderazgo panista estarán en puerta las elecciones federales del 2015 y después la sucesión presidencial, un coctel muy atractivo para el priismo nacional que requiere a un “buen negociador”.
En el camino de la sucesión por la dirigencia blanquiazul se encuentra el senador Ernesto Cordero, a quien pillaron en una llamada telefónica, después de la aprobación del Presupuesto de Egresos 2014, en la que le pide al diputado federal Fernando Rodríguez Doval, hundir al coordinador de los legisladores del PAN, Luis Alberto Villarreal y a Gustavo Madero.
Esta es parte de la conversación:
“Ustedes tienen la oportunidad de salvar al partido…ustedes tienen la posibilidad de hundir a Villarreal y de hundir a Madero. De hacerle un gran favor al partido. No lo defiendan Fernando, no lo defiendan… Todos ustedes saben la cantidad de… rapillerías que hacen allá adentro. No lo defiendan”.
La conversación telefónica pone de manifiesto no solo la confrontación al interior de la clase dirigente panista, sino los millonarios intereses que circulan en las bancadas de los representantes populares, como el “moche” en la gestoría de recursos para presidencias municipales y gubernaturas.
En otra esquina del cuadrilátero se encuentra el ex gobernador de Guanajuato, Juan Manuel Oliva, quien de acuerdo a versiones internas, tendría el apoyo de unos 16 comités estatales panistas, pues lleva más de un año haciendo campaña y levantando simpatías, como la del dirigente en Zacatecas, Arturo López de Lara.
Por cierto, Ernesto Cordero ha declarado que la contienda en Acción Nacional será una elección a modo. No obstante, afirmó que eso no será un pretexto para abandonar la contienda, por lo que competirá para poner a Acción Nacional de pie”.
Este escenario es el que viven los panistas en el país, quienes por primera vez elegirán a su presidente nacional, ya que previo a la reforma de sus estatutos, solo los consejeros tenían la facultad electiva.
Mientras todo esto sucede, la ex candidata presidencial Josefina Vázquez Mota, analiza la posibilidad de competir o no por el liderazgo panista. Esta decisión la tomará, según ha dado a conocer, hasta finales del presente mes.
¿Será Gustavo el Madero del PAN o el que lo resucite?
¿Podrán reconciliarse los calderonistas con la expresión más conservadora del panismo nacional y derrotar a Madero?
Al tiempo.
