El hábito de la lectura, un arma contra violencia: Mendoza
Zacatecas, Zac.- Un total de 637 talleres fueron impartidos en las 135 bibliotecas públicas, de 34 municipios, que participaron en el Programa Nacional de Verano “Mis Vacaciones en la Biblioteca”, como un esfuerzo por atraer de manera divertida a los usuarios, informó el coordinador estatal de Bibliotecas, Eduardo Mendoza Villalpando.
Dijo que uno de los retos más apremiantes de todo bibliotecario público es el de buscar cotidianamente mecanismos para atraer a los usuarios, porque la lectura es determinante en la formación intelectual del ser humano.
Dijo que durante el Programa “Mis Vacaciones en la Biblioteca”, acudieron a los talleres 39 mil 13 participantes, entre niñas, niños, jóvenes y adultos.
Comentó que los tiempos actuales son momentos difíciles, no solamente del estado, sino de todo el país, por lo que recomendó inculcar los valores, ya sean morales y cívicos, e hizo un exhorto a las madres y padres de familia para que infundan el hábito por la lectura.
Ser generadores de gente de bien, con criterio, que sean personas actuantes y pensantes, que utilicen su tiempo en leer, hacer deporte y no solamente sean robots del aparato televisivo, en donde la mayoría de los programas generan violencia, dijo.
Hizo una invitación también a las autoridades municipales en el sentido que se involucren en esta noble tarea, que estén al pendiente y apoyen a las bibliotecas públicas, con la finalidad que se realicen más actividades de fomento a la lectura.
Hoy en día, las bibliotecas públicas son instituciones más activas, porque no es solamente un centro que sirve para hacer tareas, investigaciones ni para consultar el Internet, se pueden llevar a efecto actividades como tertulias y círculos de lectura.
Además, propuso efectuar pláticas con la persona más longeva, para que los niños y jóvenes escuchen las historias de su pueblo, ir a los centros de salud y sean los médicos quienes impartan conferencias; en fin, aquí juega un papel importante la creatividad y la imaginación del o la bibliotecaria y, por supuesto, con el valioso apoyo de su autoridad municipal.
