El ahorro de energía es una apuesta al futuro
El Horario de Verano consiste en adelantar el reloj una hora durante los meses de mayor insolación para hacer un uso óptimo de la iluminación natural.
En nuestro país, este horario se registra en el periodo del año cuando hay mayor duración de luz solar, debido a la inclinación del eje de la Tierra y al movimiento de traslación.
El propósito principal de esta medida consiste en aprovechar la luz solar que se gana durante ese periodo por la inclinación del eje terrestre.
Entre las ventajas del Horario de Verano podemos contar el ahorro de energía en el consumo de energía eléctrica (en particular, por iluminación en los hogares), la reducción en la emisión de contaminantes en las zonas de generación de energía eléctrica y, por consiguiente, una disminución en el sobrecalentamiento de la tierra y evitar enviar a la atmósfera gases que provocan el efecto invernadero.
Las principales fuentes de emisión de estos gases están relacionadas con el consumo de combustibles fósiles para la energía, el transporte y la industria, pero el suministro energético es causante del 26% de las emisiones globales.
El Horario de Verano es parte del conjunto de medidas que requieren la participación, tanto del gobierno como de la sociedad, las cuales están orientadas a desarrollar una nueva cultura del ahorro y uso eficiente de la energía.
Entre estas medidas destacan el Programa Nacional de Sustitución de Electrodomésticos; el Programa de Eficiencia Energética en la Administración Pública Federal; el Programa de Promoción de Calentadores Solares de Agua a efecto de dar cumplimiento a los acuerdos de reducción de emisiones del Protocolo de Kioto.
En la actualidad, más de 90 países aplican el horario de Verano tanto en el hemisferio Norte como en el Sur; que en México comienza el primer domingo de abril y termina el último domingo de octubre.
En nuestro país, el consumo de energía eléctrica en iluminación es una de las fuentes de gastos más elevados.
Sin embargo, contamos con diversas alternativas de energías iluminación limpias, como los focos y luminarias de bajo consumo.
Como he insistido, tenemos la oportunidad de explotar el enorme potencial que tenemos en México y, particularmente, en Zacatecas para el uso de energías renovables; el Horario de Verano da la posibilidad de que una parte importante de la energía eléctrica usada en iluminación en los hogares, sea sustituida por energía solar.Con este objetivo, está dirigida la reciente aprobación del proyecto de la Norma Oficial Mexicana de Eficiencia Energética de Lámparas para uso general establece que: «Las lámparas incandescentes de 100 watts y mayores no podrán comercializarse a partir de diciembre de 2011; las de 75 watts a partir de diciembre de 2012, y las de 60 y 40 watts a partir de diciembre de 2013”.
Se estima que como resultado de la aplicación de esta norma, en 2030 el consumo de energía por iluminación registrará una caída de hasta un 48% con relación a su línea base.
Sin embargo, no es suficiente y es necesario erradicar totalmente la utilización de bombillas y luminarias incandescentes.
Paralelamente a esta acción, hoy en día, es evidente que la solución para nuestras necesidades energéticas futuras estriba en un mayor uso de fuentes de energías renovables en la generación de calor y electricidad.
La amenaza del cambio climático así lo exige y el mundo debe encaminarse hacia una transición energética, lo que puede lograrse solamente a partir de un cambio en la forma de producción de la energía, de su distribución y consumo; esta transformación requiere, indefectiblemente, seguir las pautas siguientes: La puesta en práctica de soluciones renovables, especialmente con sistemas energéticos descentralizados, el respeto de los límites naturales del medio ambiente, el desmantelamiento de fuentes de energía sucia y no sustentable, el alcance de una mayor equidad en el uso de los recursos y el desacoplamiento del crecimiento económico del consumo de los combustibles fósiles.