Desaparición forzada y tortura se han sistematizado impunemente en México: Monreal
Ciudad de México.- Al lamentar que la desaparición forzada y la tortura sigan prevaleciendo en el sistema de justicia de nuestro país, David Monreal Ávila, senador de la República, votó a favor de la reforma constitucional en esta materia con la convicción de que estas prácticas –que se han sistematizado impunemente en México-, deben ser erradicadas de raíz, es decir, desde el mismo Estado.
El legislador aseveró que dichos delitos, al ser las más atroces de las violaciones a los derechos humanos, han destruido el tejido social y al respecto recordó que, al igual que en el resto de Latinoamérica, en México la desaparición forzada y la tortura han sido sistematizadas como la principal arma contra la oposición política e ideológica, y se caracteriza por el completo ocultamiento de información por parte de las dependencias estatales.
«¿Cuántas desapariciones forzadas hay? No lo sabemos porque el Estado no ha proporcionado la cifra, pero sabemos que son muchas, demasiadas», así lo afirmó el miembro del Comité y relator sobre el caso de México de la ONU.
La Convención Internacional Para la Protección de todas las Personas Contra las Desapariciones Forzadas, la define como: “el arresto, la detención, el secuestro o cualquier otra forma de privación de libertad que sean obra de agentes del Estado o por personas o grupos de personas que actúan con la autorización, el apoyo o la aquiescencia del Estado, seguida de la negativa a reconocer dicha privación de libertad o del ocultamiento de la suerte o el paradero de la persona desaparecida, sustrayéndola a la protección de la ley”.
Por si la comisión de estos delitos fuera poco, la situación nacional se agrava debido a la inmensa impunidad que rodea los casos denunciados, y con mayor razón, la infinidad de casos que no se denuncian.
La realidad es que sólo seis personas han sido condenadas ante los miles de casos de desapariciones forzadas denunciados; el Estado, al ser parte de este problema, no canaliza todos sus recursos para investigar y castigar de manera ejemplar esta privación de la libertad.
Desde hace años la sociedad y los familiares de las víctimas demandan una base de datos confiable y fidedigna, que contenga un registro nacional sobre desapariciones forzadas, como principio fundamental para garantizar un proceso que tienda a reconocer la verdad histórica.
La lentitud en la investigación y búsqueda de personas desaparecidas es otro flagelo que entorpece la averiguación sobre el paradero de las víctimas, el caso de Ayotzinapa es prueba irrefutable de este círculo vicioso en el que se encuentra sumergido el Estado mexicano.
Monreal Ávila sostuvo que no tener información veraz de este delito y estadísticas reales, dificulta emprender acciones para combatirlo con la efectividad que amerita, al igual, complica desarrollar políticas de prevención e investigación en el combate de la desaparición forzada de personas.
“México exige que las miles de personas desaparecidas y que aún no han sido encontradas, aparezcan. Ocultar la verdad acerca de cuál fue su destino, únicamente provocará impunidad, y que los familiares de las víctimas continúen sufriendo por no saber qué ocurrió con sus seres queridos”, finalizó.
LNY/Comunicado