Denuncia Hortensia Aragón inequidad por parte del TEPJF
México, D.F.- Cuando el Partido de la Revolución Democrática debería estar dedicado de lleno al trabajo político en el estado de Michoacán y en definir el método para elegir al candidato que lo representará en las elecciones presidenciales de julio próximo, las recientes semanas han tenido que ser ocupadas en tratar de cumplir una controversial decisión tomada por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que ha obligado al PRD a renovar a los integrantes de sus congresos y consejos a nivel nacional, estatal y municipal justo en medio del proceso electoral 2012 que acaba de iniciar hace unos días.
Vía comunicado, Hortensia Aragón Castillo, coordinadora nacional de Foro Nuevo Sol-PRD, señaló que ello constituye una flagrante intromisión en la vida interna del instituto político permitida y promovida por un grupo de personajes que se dicen “compañeros perredistas”, pero que desde hace tiempo, con sus acciones, sirven, queriendo o no, a los intereses del PAN y del PRI, por lo que no es gratuito que desde hace tiempo vengan dinamitando – como lo acaban de hacer con el recurso que nos tiene empantanados en las elecciones del 23 de octubre- cualquier esfuerzo por configurar un partido competitivo que pueda frenar la permanencia del PAN o evitar el regreso del PRI.
Si el origen de la queja promovida descansa en que la vigencia de los consejos y congresos perredistas tenía cinco meses de haber vencido, nos gustaría saber qué opinan tanto nuestros compañeros como los integrantes del TEPJF de lo que sucede en otros partidos, donde en lugar de dirección formal operan con delegados designados por el dirigente nacional en turno.
Por ejemplo, el PRI del DF lleva 11 años sin un dirigente local formal, trabajando desde entonces bajo la figura de “delegados especiales”, sin que el Tribunal Electoral se haya pronunciado al respecto durante todo ese tiempo. El colmo es que el pasado 25 de agosto el TEPJF mandató anular el proceso para elegir al nuevo dirigente del PRI-DF, lo que permitió a dicho partido designar a Jesús Murillo Karam como delegado especial, quien con total holgura seguramente será el responsable de palomear a sus candidatos para el Distrito Federal.
Es claro que al mantener distraído al partido desde septiembre y hasta noviembre de este año en sucesivas elecciones internas que se empalmarán con el proceso electoral de Michoacán y el presidencial del próximo año, lo que el TEPJF en realidad propicia, como lo señalara la magistrada María del Carmen Alanís Figueroa, es sentar el primer paso para configurar una contienda inequitativa de cara a los comicios en Michoacán y a las elecciones federales de julio próximo.
Al escenario de la inequidad en la competencia rumbo al 2012 hay que sumarle la exclusión, pues como se pudo ver en el pasado proceso en el que se trató de elegir a los tres consejeros faltantes en el Consejo General del IFE, la idea era volver a dejar fuera las propuestas del PRD. De ahí que la llegada de Emilio Chuayffet a la Presidencia de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados no haya sido fortuita. Su principal tarea desde el momento de asumir dicho cargo ha sido constituir un órgano electoral a modo de Enrique Peña Nieto.
Si en 2006 los diputados del PRI, del PAN y de sus aliados lograron desaforar a nuestro candidato para tratar de impedirle competir ese año por la Presidencia de la República, con su decisión el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación inhabilita de facto no a un candidato, sino a todo un partido para que no pueda competir de manera plena y en igualdad de condiciones en las elecciones presidenciales del próximo año.
Una vez que ha arrancado el proceso interno para elegir a sus nuevos consejeros y congresistas, seguimos manteniendo la opinión de que el PRD debió haber omitido el cumplimiento de dicha resolución, pues ahora tendremos que atenernos a la habilidad de los diversos grupos vinculados con el PRI y el PAN que intentarán reventar en las urnas este ejercicio, que servirá de pretexto a las grandes televisoras para lastimar la imagen del PRD en cadena nacional.
Desafortunadamente, con las tomas del edificio sede de la Comisión Nacional Electoral, sus infundados señalamientos sobre un presunto fraude el día de la elección y su litigio mediático, diversos grupos políticos pretenden sembrar la duda sobre la legalidad de un proceso que de no satisfacer sus expectativas nos puede encaminar nuevamente a un litigio que dejaría a nuestro partido en la indefinición jurídica.
Hoy más que nunca se requiere una dirección nacional comprometida con la legalidad e institucionalidad del partido, que respalde la autonomía de sus órganos y facilite el diálogo entre las distintas fuerzas políticas que contenderán este domingo 23, fecha en que esperamos que más de un millón de personas acudan a sufragar por los diversos candidatos en cerca de cuatro mil 500 casillas distribuidas en todo el país.
El compromiso debe ser caminar unidos para llegar fortalecidos para enfrentar las elecciones presidenciales de 2012, que sin duda están llamadas a ser un parteaguas para la vida de millones de ciudadanos que rechazan la simulación que prevalece entre la clase política y que claman por el cambio verdadero y la democracia plena que se nos sigue debiendo desde la caída del sistema en las elecciones de 1988.
