De campañas y “guerra sucia”
JUAN GÓMEZ
Sin duda que Veracruz es uno de los estados de mayor resonancia mediática en el escenario de los 13 estados en donde se llevan a cabo elecciones este año, de los cuales 12 renovarán al poder Ejecutivo.
Los veracruzanos se debaten en un clima de preocupante incertidumbre a causa de la “guerra sucia” que se da entre los principales contendientes electorales, la violencia y el endeudamiento crítico en el que se encuentran las finanzas estatales.
El lodo que se lanzan un día si y otro también los candidatos de la alianza PRD-PAN, Miguel Ángel Yunes Linares y su primo hermano Héctor Yunes Landa, de la alianza PRI, Verde, Panal, confronta no solo a la clase política veracruzana, sino pone de manifiesto una campaña de odio recíproco que daña a familias y círculos sociales.
En tierras veracruzanas se respira tensión e incertidumbre, no solo por el choque entre quienes han gobernado al estado en los últimos 20 años, sino por la violencia desatada por las bandas criminales, y los 18 periodistas asesinados durante la actual administración del gobernador Javier Duarte de Ochoa.
En este cruce de caminos crece la propuesta de Cuitláhuac García Jiménez, el abanderado del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), ante el desgaste de los dos principales contendientes.
Chihuahua es otro de los estados que se encuentra en una situación electoral similar a la de Veracruz. Este fin de semana se realizó un debate entre los seis candidatos al gobierno de la entidad, organizado por el Instituto Estatal Electoral del estado, en donde los ataques personales nulificaron las propuestas.
El panista Javier Corral, el independiente José Luis Barraza y el priista Enrique Serrano, se enfrascaron en recriminaciones, complicidades de endeudamiento estatal (más de 42 mil millones de pesos), nexos con el narcotráfico y conflictos de intereses.
El escenario en las 13 entidades donde habrá elecciones -12 renovarán gobernador- tiene características peculiares.
Por ejemplo las 12 entidades agrupan el 32% de la deuda total de los estados del país, situación que solo ha sido utilizada como arma de ataque a la administración en turno, pero omisa en cuanto a la propuesta de solución en las campañas electorales.
En Zacatecas se entreveran dos estrategias en la recta final del proceso electoral estatal: la “guerra sucia” entre los principales contendientes, Alejandro Tello Cristerna (PRI, Verde y Panal) y David Monreal Ávila, del Movimiento de Regeneración Nacional; y el desfonde de los partidos de la Revolución Democrática y del Trabajo, principalmente.
La filtración de intercepciones telefónicas de manera ilegal en redes sociales, las acusaciones de nexos con la delincuencia organizada, antecedieron a la denuncia interpuesta en la Procuraduría General de la República (PGR) en contra del actual gobernador Miguel Alonso Reyes, por presunta apropiación ilegal de un terreno donde se construye desde hace varios meses una residencia familiar.
Después de esta denuncia que interpusiera el actual diputado local, Cuauhtémoc Calderón Galván, ex coordinador de la fracción del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en la actual LXI legislatura zacatecana, la dirigente del PRI de la Ciudad de México, Mariana Moguel denunció al delegado en la Cuauhtémoc, Ricardo Monreal Ávila ante la Contraloría del gobierno de la Ciudad de México (CDMX) por presunta inducción del voto a favor de su hermano y utilización de recursos públicos con fines electorales.
En este escenario se genera la “caza” de trailers y el “descubrimiento” de bodegas con despensas, así como la destrucción y vandalización de espectaculares de uno y otro candidato o candidata.
Parte de esta confrontación electoral se dio durante la realización del debate entre los siete candidatos al gobierno del estado (cinco postulados por partidos con registro y dos independientes), reyerta en la que también participaron los dos independientes, Alma Rosa Ollervides y Javier Soto, quienes fueron puntillosos en los temas de endeudamiento estatal, que por cierto registra un crecimiento del 813%.
La otra estrategia que puso de manifiesto es la del debilitamiento del contrario mediante la incorporación de algunos dirigentes y militantes a la campaña.
Aunque el PRI ha sumado a algunos cuadros de oposición, quien lleva una estrategia sistemática es el Movimiento de Regeneración Nacional, que prácticamente ha desfondado la candidatura de Rafael Flores Mendoza, el abanderado de la alianza Unidos por Zacateas que conforman el PAN y PRD.
Dos ejemplos ilustran la estrategia monrealista: el pasado 30 de abril la ex comisionada del PT en el estado y candidata a una diputación plurinominal en el número uno de la lista, Geovanna Bañuelos de la Torre, anunció su adhesión y la de 11 candidatos a presidencias municipales de ese partido, a la candidatura de David Monreal Ávila.
La segunda acción, seguida de otras, se realizó esta semana cuando el jueves pasado el coordinador de campaña de Rafael Flores Mendoza, Ignacio Fraiere, manifestó abiertamente su incorporación a la campaña del candidato de Morena en Zacatecas, bajo el argumento de que el aspirante de la alianza PRD-PAN no tenía ninguna posibilidad de triunfo.
También esta semana generó una fuerte polémica y controversia la publicación de bienes patrimoniales de los tres principales aspirantes al gobierno del estado: Alejandro Tello (PRI,Verde y Panal) declaró 14 millones 222 mil pesos; David Monreal Ávila, 27 millones 212 mil pesos y Rafael Flores Mendoza, declaró ingreso neto anual por Un millón 688 mil pesos, así como propiedades inmuebles por más de 4 millones de pesos.
El cuestionamiento sobre la credibilidad de los datos patrimoniales declarados en la plataforma 3de3 y hechos públicos en los medios de comunicación locales, alcanzó a la declaración que como servidor público hizo el gobernador del estado, Miguel Alonso Reyes, ante la Secretaría de la Función Pública, cuyo titular Ernesto Escalante, dio a conocer bienes por más de 20 millones de pesos del Ejecutivo del estado, pero sin detallar la información.
De última hora me entero de la decisión del ex precandidato del PRD a la gubernatura del estado, Pedro de León Mojarro, cuñado del mandatario estatal Miguel Alonso, de sumarse a la campaña de su contrincante en el proceso interno priista, Alejandro Tello Cristerna.
Este es solo parte del debate que se vive en Zacatecas durante este período de campañas que, dicho sea de paso, es uno de los más judicializados con 261 recursos presentados ante el Tribunal de Justicia Electoral del Estado de Zacatecas.
¿Cómo afectarán las guerras sucias al proceso electoral y qué tanto influirán en la tendencia del voto?
Al tiempo.
* Director general de Pórtico Online
