Culpan a ex funcionarios del rezago en seguridad en Zacatecas

La indolencia y falta de recursos económicos que mostraron anteriores gobiernos municipales y el estatal, aunado a la violencia que se registra en México, sumieron a Zacatecas en un grave rezago en seguridad pública, cuyas consecuencias hoy se están pagando, afirmaron políticos locales.

Señalaron que la situación de inseguridad se agravó por las malas decisiones tomadas por una gran parte de los otrora alcaldes de los 58 municipios, quienes destinaron recursos del Fondo IV (fortalecimiento municipal) al pago de pasivos, en lugar de reforzar la seguridad pública.

Además, dijeron, en el Poder Legislativo siguen pendientes de análisis dos propuestas de ley en materia de seguridad, que fueron enviadas por el mandatario estatal, Miguel Alonso Reyes, desde hace casi medio año.

El secretario general de Gobierno, Esaú Hernández, reconoció la gravedad de la situación que el estado enfrenta en materia de inseguridad, lo que lo llevó a confirmar que la actual administración ha tenido que empezar de «muy abajo» en la implementación de programas e integración de corporaciones policiales.

– En una escala del 1 al 10, ¿de qué nivel estaría partiendo Zacatecas en cuanto a programas de seguridad e integración y eficacia de sus corporaciones policiales? Se le preguntó, en entrevista. La respuesta fue rápida y contundente: «De menos cuatro».

«Cuando se empieza de cero es porque no hay nada, pero aquí hay corporaciones con pocos policías, mal pagados, sin capacitación, corruptos y que en algunos casos ha evidenciado tener comportamiento delictivo, detalló el funcionario estatal.

Mencionó que esos vicios complican la situación y generan ante la ciudadanía desconfianza, por ello hay que recuperar para los policías la confianza y respeto.

En el esfuerzo por combatir la inseguridad pública, en enero la administración estatal lanzó una convocatoria para integrar a cerca de 300 nuevos elementos a la Policía Estatal, de los cuales 80 integrarán un grupo especializado, y así llegar a por lo menos 500 agentes, porque actualmente cuentan sólo con 214.

«Sin embargo, la tarea no ha sido fácil, pues muchos de los aspirantes no cubren los requisitos para integrarse y la rigidez de los exámenes ha alargado el proceso de selección», aceptó Hernández.

En ese ámbito, hizo de nueva cuenta un llamado a los cabildos de los 58 municipios para que reformen las leyes y sea creado el mando único policial, que hasta ahora no se ha podido concretar por la inconformidad de varios alcaldes que aseguran no tener conocimiento pleno de lo que implicaría.

Sobre las acusaciones de actores políticos, que responsabilizan al anterior gobierno de la perredista Amalia García, de haber permitido el recrudecimiento de la inseguridad e incluso la llegada de los «Zetas», manifestó que como zacatecano prefiere pensar que fue por indolencia y no por permisividad.

En ese sentido, el ex diputado federal perredista, Camerino Eleazar Márquez Madrid, señaló que el crecimiento de la inseguridad en Zacatecas es resultado de lo que sucede en el país y no culpa directa de un gobierno.

En su análisis sobre la inseguridad pública, Hernández agregó que los municipios también tienen responsabilidad, porque en muchos casos decidieron no invertir en el combate de este flagelo social.

Esa teoría fue confirmada por el titular de la Auditoría Superior del Estado (ASE), Jesús Limones, quien señaló que durante las diversas revisiones hechas a las cuentas públicas de los municipios se ha constatado la preferencia de los ediles por destinar recursos a otros renglones, en lugar de la seguridad.

El auditor explicó que los municipios reciben presupuesto del Ramo 23 para los Fondos III y IV, en este último se deja a los alcaldes la opción abierta para que los recursos transferidos por la Federación sean utilizados en seguridad pública, infraestructura y pago de obligaciones financieras.