Con Singular Alegría | Derecho a la Información. ¿Lo tenemos?
GILDA MONTAÑO
La comunicación política se articula en torno a dos ejes: el marketing gubernamental —que consiste en publicidad comercial insertada en radio y TV mediante pautas que saturan los medios— y, por otro lado, la comunicación gubernamental, donde se explican las políticas públicas y las decisiones tomadas por el gobierno.
Esta se estructura a partir de datos duros y de los argumentos que, según la lógica del gobierno, las justifican. El primero (marketing gubernamental) está prohibido en las democracias más desarrolladas, y es probable que, con el tiempo, también se prohíba en nuestro país. De ocurrir esto, se verá obligada a mejorar la calidad de la comunicación gubernamental, lo que hará que el discurso de los gobernantes adquiera mayor relevancia. Por el contrario, en los países donde el marketing gubernamental no está prohibido, muchos políticos tienden a minimizar la comunicación gubernamental.
Si hablamos de la comunicación gubernamental sabremos que se funda en el derecho de acceso a la información que tienen los ciudadanos. Si hablamos de derechos fundamentales, sabremos que éste es una disposición de derecho registrada en la Constitución o en los tratados internacionales. Los bienes básicos, son condición necesaria para la realización plena y la actuación del individuo como agente moral.
Como comunicadores, hay cosas que tenemos que contestar y cosas que no. Si encuentras a alguien que se quiere subir al ring, tú no lo hagas. ¿Cómo me voy a defender de presiones? Por ejemplo, a Obama le llegaban 22 mil comunicaciones diarias. La oficina de la Casa Blanca la procesaba. Esto lo debe estar haciendo con Trump. Pero el no está asumiendo el jaque que le está poniendo con sus aranceles al mundo entero. Ya China reaccionó, y se está hundiendo el mundo.
Gobernar es comunicar. Un buen comunicador debe articular el contexto con la acción, pero esto solo es posible cuando existe un proyecto político sólido como fundamento. Así podrá lograrse una evaluación efectiva de los resultados.
En la Comunicación Social debe tenerse una claridad en el proyecto político, porque sin esta, resulta imposible hacerla. Sería difusa y equívoca. Necesitamos una comunicación social que difunda el proyecto. Pero primero el proyecto, usted dirá…
Habremos de traducir el proyecto político en términos comunicacionales con tres propósitos: Que se conozca lo que se hace, que se acepte como bueno y bien hecho, que se entienda la lógica de las decisiones. La comunicación es un componente fundamental de la estrategia de gobierno para transmitir y consolidar su proyecto político.
Para que esto funcione correctamente, habrá que saber cuál es nuestro contexto para así poder comunicarnos. En el primero, debemos tener una lectura precisa del entorno, la caracterización del momento. Pero es el comunicador que busca saber cuál es la estructura social y cómo interpretarla. Tener el conocimiento puntual de las políticas públicas del gobierno, con sus respectivos programas y proyectos.
¿Quién es el comunicador? El que pronuncia el mensaje, lo articula, lo desarrolla, para luego transmitirlo. Con personalidad y cualificación personal. Tiene que ser congruente con el diseño, contenido y forma del mensaje. Su cualificación personal debe ser su trayectoria, estilo de trabajo, pero más que nada, su formación académica.
Es tan importante que la gente empate con quien da el discurso, y se sienta tan como él… que habrá que vigilar su apariencia, su vestimenta y cuidar su imagen. Proyectar sus valores. Hacerlo que pueda hablar delante de las cámaras, con una voz modulada y un lenguaje corporal que sea acertado. Que tenga carisma. Que transmita lo que quiere informar.
El viejo refrán dice que una imagen vale más que mil palabas. Así pues, el comunicador debe proyectar tres características: credibilidad; preparación y consenso. Es decir que sea aceptado por su congruencia, constancia, confianza, formación, responsabilidad, profesionalismo y liderazgo.
Como sabemos, existen muchas alternativas de transmisión, como los boletines, páginas web, redes sociales, declaraciones, discursos, entrevistas, artículos, radio, TV, cadenas nacionales.
Hay que tomar en cuenta que una buena política contempla, tener presencia en el espacio público, una buena información, diseño de mensajes, operar formatos adecuados, difusión, transparencia, apoyo a los periodistas. Por supuesto, lo primero que hará que cualquier gobernante, será su Plan Nacional, Estatal o Municipal de desarrollo.
Cada una de las acciones o programas que se desarrollan en la administración de cualquier gobierno, tienen la perspectiva de mantener en la ciudadanía las costumbres y tradiciones promoviendo los valores éticos y sociales con enfoque de género, para una mejor convivencia, celebrando la condición de (ayuntamiento, estado o República), con logros en la prevención del delito, la educación, la seguridad alimentaria y social, la modernidad, los servicios públicos y el crecimiento, con un imagen urbana integral atractiva para vivir y trabajar con un mejor nivel económico, educativo y cultural al reducir la desigualdad entre los mexicanos. Ojalá y suceda pronto.