Cerro de La Bufa, lugar emblemático de Zacatecas
Zacatecas, Zac.- «Quien venga a Zacatecas y no lo visite es como si no hubiera venido», afirma un dicho popular de esta tierra, por lo que el cerro de La Bufa es una de los principales paradas turísticas de la ciudad.
Recorrer este cerro no sólo significa revivir la historia al pisar el escenario de una de las batallas más importantes para México, que es la Toma de Zacatecas, sino también sentir el fervor religioso del pueblo, conocer el sufrimiento de los mineros, comprar artesanías locales y disfrutar de paseos por el cielo.
La Bufa debe su nombre al parecido que los españoles encontraron de su cresta con una «vejiga de cerdo» y que es lo que precisamente significa.
El cerro se ubica muy cerca del centro de la ciudad de Zacatecas y es uno de los puntos más altos del país, con más de dos mil 600 metros sobre el nivel del mar.
Miles de turistas al año visitan La Bufa, lugar emblemático del estado, pues ahí, el 23 de junio de 1914, las tropas revolucionarias de Pancho Villa vencieron al ejército huertista, definiendo con ello el futuro de esta nación.
En homenaje a esos héroes revolucionarios, los turistas pueden observar las estatuas ecuestres de los generales «Pancho Villa», Pánfilo Natera y Felipe Ángeles.
En la cresta, también se ubica el Museo Toma de Zacatecas, remodelado el año pasado en el marco del Centenario de la Batalla de Zacatecas.
En este se exhiben ropas y armas utilizadas en la batalla; se encuentra también una maqueta de la zona donde se llevó a cabo la contienda. También podemos encontrar copias de páginas de periódicos y fotografías de la época, artillería y documentos que atestiguaron la revolución, entre otras cosas más.
En este edificio, los paseantes pueden conocer a fondo y de manera divertida, a través de un sistema multimedia interactivo, los detalles de ese evento bélico y de sus principales protagonistas; así como de la cultura e historia de Zacatecas.
Un paseo por el cerro de La Bufa incluye obligadamente un recorrido de 650 metros en el teleférico, desde el cual se tiene una vista panorámica del centro de esta ciudad y que en su punto más alto alcanza una elevación de 85 metros sobre el nivel del suelo, y que además une al Cerro de la Bufa con el Cerro del Grillo y la Mina «El Edén».
Para Alicia Castro Gómez, visitante de Guadalajara, subirse al teleférico «fue una experiencia padre. Dan nervios, pero es padre», comenta para Notimex sobre su recorrido.
En las mismas instalaciones está el Bar El Teleférico, desde donde se tiene una hermosa vista hacia la ciudad de Zacatecas mientras se disfruta una bebida.
Surcar el cielo zacatecano no estaría completo sólo con el paseo en el Teleférico, también es necesario lanzarse por la Tirolesa 840, la tercera más grande de América Latina en doble hilo y que se ubica en el acceso principal a La Bufa.
El fervor religioso del pueblo zacatecano se puede sentir al visitar el Santuario de La Virgen del Patrocinio, construido en el siglo XVI. Este templo es sumamente visitado por la feligresía, confirma el sacristán Jaime Olvera Hernández, quien dice que un paseo por La Bufa también es un recorrido religioso.
Desde el mirador, que se ubica en la cresta del cerro, las personas pueden disfrutar de una vista panorámica única; que se complementa con un recorrido en trenecito.
En el corredor entre el Santuario y acceso al teleférico se encuentran instalados puestecitos de huicholes, que venden sus coloridas y características artesanías de chaquira.
Hay en el cerro una sección de venta de artesanías zacatecanas y mexicanas, en la que los paseantes pueden adquirir los suvenires de esta tierra colorada, designada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1993.
De esta forma, «turistear» por el cerro se convierte en una experiencia única, que conjunta la historia, la religión, la cultura, el entretenimiento, la diversión y el arte en un solo y único lugar: La Bufa.
LNY/Redacción