Casa del Estudiante de Guadalupe, opción para la juventud
JACOBO CRUZ
Las nuevas instalaciones de la casa del estudiante “Francisco García Salinas”, están listas para recibir a los jóvenes de la zona rural que deseen continuar sus estudios de secundaria, preparatoria y universidad en instituciones educativas de la ciudad. Los requisitos son ser estudiante, así como participar en las actividades colectivas que propicien un ambiente de estudio y respeto mutuo.
La institución tiene gran arraigo social en Guadalupe Zacatecas y por más de treinta años ha dado alojamiento a cientos de estudiantes de municipios como Pinos, Loreto, Valparaíso y Villa de Cos, además de los originarios de la región serrana de otras entidades como Durango, Hidalgo y Jalisco, principalmente.
A lo largo de tres décadas, muchos de los que fueron moradores se han formado como profesionistas destacados, por lo que puedo afirmar que se ha logrado el propósito de brindarles una opción para alcanzar la meta profesional que se trazaron al salir de sus pueblos y se puede enlistar a decenas de abogados, médicos, economistas y maestros, que concluyeron con su formación gracias a que vinieron a este lugar en donde el objetivo central es estudiar.
Durante años no se tenían instalaciones propias, pero con el respaldo de la lucha y gestión del Movimiento Antorchista finalmente pudieron establecerse en la colonia Ejidal de la ciudad guadalupense. Fue en el mes de marzo de 2019 cuando se concluyó la nueva casa, obra que consta de un edificio de cuatro plantas, un digno comedor, una sala de reuniones, sala de cómputo y biblioteca, donde definitivamente existen mejores condiciones físicas que en las instalaciones antiguas.
La administración corre a cargo de Mariana Cancino Joaquín, quien procura el funcionamiento adecuado en los servicios, el alojamiento, la alimentación, además del acceso a internet y de los talleres artísticos, para propiciar un ambiente sano de estudio y desarrollo para mujeres y hombres.
Adicionalmente se siguen trabajando los talleres culturales y clubes deportivos, actividades complementarias a la formación académica que permiten hacer vida colectiva con muchachos de distintos perfiles profesionales, porque los antorchistas estamos convencidos de que la situación del país se puede modificar si los niños y jóvenes tienen oportunidad de estudiar para que obtengan otra perspectiva de su futuro y no sean blanco de la delincuencia que azota a la mayor parte de México.
Lo anterior es muy importantes porque en el país no se logró el avance que prometió la 4t en materia educativa, tanto que en 2021 teníamos un rezago educativo de 28 millones de personas mayores de 15 años que no sabían leer ni escribir o que no habían terminado su primaria o secundaria; pero en el último tramo del gobierno federal sigue la indolencia de las autoridades en la Secretaría de Educación, que como en cada sexenio, los morenistas pretenden implementar un nuevo modelo educativo que responda a la visión del grupo gobernante, lo que ahora se llamó la Nueva Escuela Mexicana.
Considero que la casa del estudiante “Francisco García Salinas”, es una verdadera opción para la juventud que quiera ser profesionista, pues responde a las necesidades de los tiempos actuales, donde debemos fomentar la preparación académica e intelectual en un ambiente de respeto, hermandad y compromiso social, para que los padres de familia estén tranquilos porque sus hijos estarán inmersos en trabajo colaborativo, donde se les fomentan valores como la responsabilidad, la honestidad y gratitud, como seguramente lo desean las familias de escasos recursos con metas de progreso.
La casa del estudiante está localizada al lado del Colegio de Bachilleres (Cobaez) “Víctor Rosales”, por lo que es de fácil acceso a otras escuelas de la zona conurbada. Por eso invito a que se acerquen a informarse al teléfono 492 128 88 93, pues tiene un costo simbólico dado que existen becas económicas de hasta el 50 % y se sigue trabajando para lograr el total equipamiento del nuevo edificio que tiene capacidad para alojar al menos a unos cien jóvenes, esto como una aportación del Movimiento Antorchista con los estudiantes zacatecanos.