Cáncer no quita ganas de vivir a jovencita zacatecana
MARÍA CHÁVEZ
Zacatecas, Zac.- Juana Lizbeth Castro Castillo es una adolescente que cumplió 15 años el pasado 2 de octubre. Tiene leucemia, o sea cáncer en la sangre, pero esa enfermedad no le ha quitado las ganas de vivir, su alegría y su juventud.
Actualmente se somete a quimioterapias y por ello usa peluca, con una tímida sonrisa aclara que el tratamiento durará entre dos y tres años, por eso se encomienda a San Juditas, para que la cure.
Indicó que “ahora no me siento mal, aunque estoy tomando quimio”, al expresar que algunos días se pone verdaderamente grave, pero tiene muchas ganas de curarse, aunque también a veces tiene depresión, la cual pasa pronto.
Juana a veces piensa en la muerte, pero mejor reflexiona sobre la vida, de grande quiere ser dentista, aunque por el cáncer, tuvo que dejar la secundaria, porque se sentía muy cansada y no podía estudiar.
La juventud de sus escasos 15 años brota de su rostro de mejillas rosadas, que enmarca con un gorro tejido de colores, en el que el amarillo sobresale.
Debajo el gorro hay una larga trenza, que rápidamente explica que “es una peluca que una enfermera del Seguro Popular me regaló cuando comenzó a caerse el pelo por las quimios”.
Hace ocho meses que le detectaron la leucemia, entonces se sentía mal y por eso la llevaron al doctor, luego le diagnosticaron la enfermedad.
Juana Lizbeth es la mayor de tres hermanos y la única mujer, los otros son Emanuel de Jesús, de seis años y Martín, de 14. Ellos la inspiran para seguir luchando, afirmó.
La joven no tiene papá, es su mamá María de Jesús Castro Castillo quien la cuida, junto con sus hermanos. Proviene de una familia de escasos recursos del municipio de Ojocaliente, donde su progenitora trabaja aseando una casa.
Recibe atención médica por el Seguro Popular y con ayuda de la Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer (AMANC).
Zacatecas le brinda el recurso para los camiones que cada ocho días debe tomar para acudir a la capital a recibir tratamiento.
La madre afirmó que por ahora no ha tenido que pagar nada para la curación de su hija, pues cuenta con el apoyo de ambas instituciones.
Señaló que cuando le dijeron que su hija tenía cáncer le dio mucha tristeza, pero tuvo mucho valor para salir adelante y apoyarla, afortunadamente cuenta con la ayuda de una hermana.
Juana Lizbeth es una de las 50 niñas que la AMANC Zacatecas apoya con sus tratamientos, organización que en sus 13 años de existencia ha logrado la curación de 110 niños y niñas del estado.
La presidenta de AMANC, Susan Cabral, en entrevista resaltó que en estos 13 años de labor han apoyado en diferentes formas a un total de 402 infantes, con exámenes de diagnóstico, tratamientos, medicamentos, albergue, transporte y comida, entre otros.
Entrevistada en el marco de la carrera que AMANC realiza para recaudar fondos, aseguró que “la última palabra la tiene Dios”, pero la asociación hace un esfuerzo para ayudar a esas familias de escasos recursos que deben pagar tratamientos muy caros para atender el cáncer.
Destacó la necesidad de realizar una amplia campaña en el estado, que coadyuve a detectar oportunamente los signos y síntomas del cáncer infantil, para que los menores de edad puedan ser atendidos y curados.
Con ese apoyo se da esperanza a las familias y una mejor calidad de vida a los niños y niñas enfermos de cáncer, concluye al llamar a maestros, madres y padres de familia a estar atentos a cualquier síntoma o cambio que sus hijos registren, dijo.
LNY/Notimex
