Cañada política. Segob en Peñasquito: el ultimátum
MIGUEL ÁNGEL REYES
Finalmente, por exigencia de las comunidades afectadas por la minería en el municipio de Mazapil, Zacatecas; por lo tenso de las mesas de trabajo establecidas desde el 16 de mayo en la Ciudad de México, así como el poco avance en las mismas, la secretaria de Gobernación (Segob), Olga Sánchez Cordero, ha decidido enviar una delegación a las inmediaciones y comunidades aledañas a la mina Peñasquito, que encabezará el subsecretario Ricardo Peralta Saucedo, quien ya ha confirmado su presencia en el semidesierto zacatecano el próximo jueves 18 de julio.
Es menester, de inicio, trasladar la voz de los ejidatarios, transportistas, trabajadores y habitantes de las comunidades que han visto afectada su forma de vida desde hace diez años con la llegada de la trasnacional, y plasmarla en el marco de la visita del alto funcionario federal, en el sentido de advertirle que “no viene a Zacatecas hacer turismo político, ni para que le hagan caravanas al estilo ‘ciudadano distinguido’, mucho menos hacer una simple visita exploratoria tipo boy scout… sino a concretar soluciones claras para bien de Zacatecas pero, sobre todo, de los habitantes afectados por los daños de la minera”.
Esos graves daños ocasionados por la minera perteneciente a Newmont-Goldcorp no deben resultar una cosa menor, más si luego de varias reuniones el avance para solucionar el conflicto pareciera largo y tedioso, inoperante y disfuncional; por ello Ricardo Peralta, quien asumió el cargo como subsecretario el pasado 23 de mayo -en sustitución de Zoé Robledo, hoy director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS)-, tendrá que presenciar con sus propios ojos y sentir de carne propia la contaminación, el destrozo a la vida, a la flora, a la fauna, a la salud humana, la desaparición de los mantos acuíferos y la violación a los derechos humanos y del derecho al agua de los habitantes de las comunidades que han quedado en el abandono.
La visita de Peralta Saucedo debe dar certidumbre y esperanza para una solución inmediata del conflicto, ésa es la instrucción puntual de Olga Sánchez; solución que la propia minera se ha negado a concretar, gracias a sus ‘inoperantes altos ejecutivos’, que no han servido más que para estropear las mesas de diálogo y no ceder ante los reclamos legítimos de los ejidatarios de Mazapil, por un capricho belicoso que no da garantías de solución.
Su presencia en Mazapil será una gran prueba de fuego para que el funcionario federal garantice legalidad y solución; que dé la razón al derecho a agua y a la vida; con la salvedad de que pudiera verse tentado a corromperse azuzado por los vulgares directivos locales de Newmont-Goldcorp.
La población de las comunidades de Cedros, El Vergel y demás, le exige a Ricardo Peralta traer una respuesta satisfactoria luego de su visita a esta región, la más pobre y olvidada del estado. La comunidad ha sido paciente, pero esa paciencia llegará el momento en que se termine si no se resuelve un conflicto que se ha aplazado y polarizado por la falta de voluntad de la empresa.
Y es que en ésa vía, no se descartan más movilizaciones regionales y nacionales, que se enmarcarán en el 96 aniversario del asesinato de Francisco Villa (20 julio) y el 140 aniversario del natalicio de Emiliano Zapata (8 agosto), ésta última con una concentración nacional en el Zócalo de la Ciudad de México, por parte de todas las organizaciones del campo y defensoras de la vida del país, que se podrían trasladar a la propia mina si no se llega a un acuerdo ya desfasado por el tiempo.
Al subsecretario Ricardo Peralta le comenzarán a limpiar el camino para que se siga empapando del conflicto minero con los ejidatarios y transportistas de Mazapil, cuando este miércoles arribe como avanzada a Zacatecas, Sonia Salazar Ham, jefa de la Unidad de Atención a Organizaciones de la Segob, quien hará un recorrido en las comunidades afectadas, mientras que el subsecretario hará lo propio desde temprana hora del próximo jueves, acompañado del senador José Narro Céspedes, ejidatarios pertenecientes al Frente de Comunidades Afectadas por la Minería (FCAM) y de altos funcionarios federales cuyas dependencias están involucradas en el conflicto.
Se habla, extraoficialmente, que Peralta viene a instalar una mesa de diálogo similar a la que desde mayo ya se estableció en la Ciudad de México; visitará las inmediaciones de la comunidad de Cedros; posiblemente se instale un contingente a las afueras de la mina para realizar el acto; también visitará el socavón, las parcelas, los sitios cercanos donde la minera realiza explosiones, la presa de jales y verificará los daños ocasionados a las casas a causa de las explosiones que origina la empresa ecocida.
Lo acompañarán también los titulares de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), expertos del Instituto Tecnológico del Agua, de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), entre otros. Veremos.