Breves recetas de Economía. ¿Qué es una bolsa de valores?

JAVIER LARA CABALLERO

Todos, en alguna ocasión, hemos escuchado de que existen las Bolsas de Valores, sin que necesariamente entendamos lo que son, o para que sirven.

Imaginemos un tianguis común y corriente como los conocemos en México; hay compradores y hay vendedores; y algunas veces lo que compramos no acaba por gustarnos. Por ejemplo, compramos jitomates que a la vista lucen espectaculares, pero al llegar a casa nos damos cuenta que están bastante maduritos y no tan frescos como imaginábamos. El vendedor sacó provecho de la falta de información con que contábamos quienes le compramos.

Imaginemos que en los tianguis existiera un intermediario que garantizara tanto al comprador como al vendedor una operación transparente, en donde ambas partes contaran con la información de la operación de compra-venta. Se lograrían tratos más justos para todos.

Eso es precisamente el espíritu que llevó a la creación de las Bolsas de Valores; un espacio privado, debidamente regulado en donde vendedores y compradores de unos instrumentos de valor, llamados acciones, hacen negocios con certeza y garantía de que lo que están comerciando no tiene vicios ocultos, ni información incompleta, ni manipulación mañosa para hacerlo mas atractivo.

En la vida real ¿Cómo funcionaría una transacción en la bolsa? Veamos: el ciudadano “X” tiene algunos ahorros y decide analizar la posibilidad de invertirlos en el mercado accionario de la Bolsa Mexicana. Por su parte, el Vendedor “Z” ha decidido vender una parte de su empresa “W”, por que le urge comprar maquinaria nueva.

“X” consulta a un ejecutivo de una casa de bolsa (intermediario), y juntos analizan distintas opciones de inversión, con base en la amplia información disponible en la bolsa. Después de analizar alternativas, solicita a su ejecutivo de cuenta que le proporcione la cotización de mercado para adquirir acciones de la empresa “W”, y firma un contrato con la casa de bolsa (contrato de intermediación).

Los ejecutivos del comprador y del vendedor, ingresan en los sistemas de sus casas de bolsa respectivas, las características de las órdenes de “X” y “Z”. Las órdenes de compra y de venta son entonces ingresadas por los operadores de las casas de bolsa en al Sistema Electrónico de Negociación, Transacción, Registro y Asignación del Mercado de Capitales (BMV-SENTRA Capitales).

Tres días hábiles después de haberse concertado la transacción, el depósito central de valores de México (S.D. Indeval), transfiere los valores accionarios de la cuenta de la casa de bolsa vendedora a la cuenta de la casa de bolsa compradora. “X” liquida a su casa de bolsa el importe correspondiente a la operación de compra, y “Z” recibe de su casa de bolsa el importe correspondiente a la operación de venta, menos una comisión previamente pactada.

Las Bolsas de Valores no son otra cosa que mercados de lujo en donde se venden y compran partes de empresas, al igual que nosotros compramos mercancías en cualquier tianguis cualquier día de la semana, con la pequeña diferencia de que ahí las transacciones son millonarias y reflejan, en muchos sentidos, el estado de salud de nuestra economía. Si el número y monto de las operaciones aumentan, es signo de buenas épocas, y si en contraparte, disminuyen, comenzamos a hablar de una “caída de la bolsa”, lo que todos sabemos, son malas noticias.

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