Basta de irresponsabilidades en Río Grande: Badillo
Vía comunicado, el Partido Acción Nacional en Río Grande, señala que el presidente municipal Mario Alberto Ramírez Rodríguez, ha sido motivo de acusaciones por parte de sectores de la ciudadanía que acuden al edificio municipal, con la necesidad de atención del mismo, entendiéndose este cargo como el primer servidor público del municipio, no como a quien se le deba rendir tributo por el cargo que ostenta.
La queja repetitiva es que nunca atiende al ciudadano y cuando lo hace es con prepotencia, malos modos y altanería y con pocas opciones de solución a la problemática del ciudadano, que en la mayoría de las ocasiones se regresa sin haber conseguido ser atendido por Ramírez Rodríguez y cuando obtiene la audiencia, la respuesta a su petición es en sentido negativo.
Las constantes ausencias en el municipio del edil municipal se justifican con viajes a diversas ciudades del país y del extranjero con el fin de obtener recursos, programas, beneficios a favor de la ciudadanía.
En estos viajes la mayoría de las ocasiones se hace acompañar por un gran séquito de personajes erogando recursos importante en detrimento de las arcas municipales y son muy pocos los logros que se han visto, merced a estos constantes viajes.
Los servicios públicos, que por obligación se tienen que otorgar a la ciudadanía, son de pésima calidad y en algunos casos inexistentes: Alumbrado público, servicio de limpia, panteones municipales, agua potable, drenaje y alcantarillado, imagen urbana, seguridad pública, pavimentación, entre otros rubros, que siendo obligación de la administración municipal otorgar de manera eficiente, vemos que en la práctica no se cumple.
La justificante retrograda que desde hace nueve meses se sigue terca y neciamente ventilando es el endeudamiento del municipio que dejara la pasada administración que encabezara el priista Genaro Hernández Olguín.
Se han señalado en muchas ocasiones la inoperatividad e ineficiencia de algunos funcionarios municipales y después de nueve meses el alcalde los ha seguido protegiendo sin dar signos de querer corregir estos departamentos entre los que destacan Desarrollo Económico y Social, Obras y servicios públicos, Registro Civil, Simaparg, Oficialía Mayor, Comunicación Social, Comercio.
Uno de los pocos funcionarios que respondieron con resultados a la población, Manuel de Jesús Pérez Aguilar, sin argumentos de peso que respaldaran los motivos, fue destituido de la Secretaría General de esta administración municipal, a pesar de que la ciudadanía, en voz de delegados municipales, hiciera ver su inconformidad ante esta decisión tomada por el presidente municipal.
Delegados de las comunidades, haciendo uso de su derecho de protesta, han optado por tomar el edificio de la presidencia municipal, con el fin de sensibilizar o de plano, obligar Mario Alberto Ramírez, a que cumpla con sus promesas de campaña, que en resumidas cuentas fueron la ejecución de obras y atención en beneficio de la ciudadanía riograndense.
Postura
Después de haber efectuado el análisis de la situación que priva en lo político y administrativo de nuestro municipio y preocupados por el cauce que ha tomado esta problemática, instamos a los actores protagonistas de este conflicto en el municipio a ser sensibles y actuar conforme a la legalidad pero sin afectar los derechos de la ciudadanía en general.
A los delegados que están tomando la presidencia municipal los instamos a que presenten su pliego petitorio, de manera formal, clara, sin intransigencias y fijen su postura ya que hasta la fecha no ha habido claridad en qué es lo que en realidad solicitan, virtud a que no han exhibido de manera formal un pliego petitorio.
Es bueno manifestarse, es bueno ser parte actuante en nuestra sociedad, sobre todo cuando nos cansamos de que pisoteen nuestra dignidad como personas humanas, pero también debemos tener nuestros pensamientos claros y lúcidos en saber qué es lo que queremos, qué es lo que exigimos y qué rumbo vamos a tomar, hasta el día de hoy lunes no nos queda claro, en el PAN las verdaderas intenciones de este grupo que ha tomado el edificio de la Presidencia Municipal.
Al presidente municipal, Mario Alberto Ramírez Rodríguez, lo conminamos a que deje su postura que siempre ha adoptado con la sociedad de “no oigo, no veo” y atienda estas demandas ciudadanas y dé una respuesta a las mismas.
No es posible que apenas a nueve meses de administración municipal ya estemos cargando toda la población riograndense con la fama de volver a ser un pueblo conflictivo, un municipio sin rumbo, una comunidad sumida en el atraso y en el ostracismo, causado todo ésto por su poco empeño en desarrollar el trabajo para el cual se le eligió y para el cual se le está pagando y muy bien, sin recibir a cambio nada bueno.
Los exhortamos a que ya aperturen la mesa de negociaciones, a que se sienten y en base a un diálogo se lleguen a acuerdos, pero acuerdos no políticos que beneficien sólo a los interesados de manera personal, sino acuerdos de trabajo que repercutan en la liberación del edifico que alberga la Presidencia Municipal y que por fin, Mario Alberto Ramírez Rodríguez, sindica y veinte regidores se pongan a trabajar en beneficio de todos los ciudadanos que vivimos en este municipio.
En el PAN estaremos atentos al desarrollo de los acontecimientos y a asumir responsablemente decisiones a favor de la sociedad, porque si de algo estamos convencidos es de que ya basta de irresponsabilidades, de corruptelas, de inoperancia, de malos tratos, de despotismos e intransigencias de quienes ostentan y hacen mal uso porque mal entienden la palabra poder.
El poder debe ser entendido como una facultad para servir, para beneficiar, como un privilegio que gozan los gobernantes para llevar obras y servicios a la sociedad, para apoyarlos en sus carencias y necesidades, no para abusar de los mismos y arbitrariamente, a su libre albedrío, hacer lo que les pegue en gana y buscando sólo un bienestar personal, pisoteando los derechos de los demás.
