Amor romántico fomenta violencia de género
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Por Dedenhi Hernández Ramírez
CIMAC
El modelo de amor romántico presente en la cultura occidental es uno de los factores que facilita, favorece y sustenta la violencia de género en las relaciones de pareja.
Lo anterior lo afirma la psicóloga y sexóloga española Pilar Sampedro en el artículo “El mito de amor y sus consecuencias en los vínculos de pareja”. Explica que las mujeres que buscan el amor romántico tienen más posibilidades de vivir violencia, consentirla y permanecer en ella “porque esa relación da sentido a su vida”.
Sampedro retoma al filósofo suizo Denis de Rougemont, quien estableció algunas características del modelo amoroso de la cultura occidental: el gusto por las desgracias, por los amores imposibles, la hiperidealización del amor y de la persona amada; ideas que no fomentan el conocimiento y el respeto del otro.
En entrevista, la doctora en ciencias sociales Marta Torres Falcón comenta que mujeres y hombres deben romper la idea de relacionar amor y violencia, así como dejar de vincular los celos, la posesión y los golpes con el amor.
La profesora-investigadora en el Departamento de Sociología de la UAM Azcapotzalco observa que “si las mujeres permanecen en una relación donde hay maltrato no es en aras del amor, sino porque creen que puede cambiar”.
Resalta que las jóvenes responden a ciertos “mandatos de género” que estipulan que el éxito y el reconocimiento social y familiar dependen de una relación de pareja. Estas concepciones –abunda– hacen que las mujeres soporten cosas que les desagradan porque piensan “que la vida sin pareja puede ser bastante peor”.
Sugiere que mujeres y hombres deberían preguntarse qué tipo de relaciones quieren construir. Ambos tendrían que considerar que “la idea del amor debería estar vinculada con relaciones equitativas y de respeto genuino por la otra persona”.
“Amar es sufrir, querer es gozar”
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De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH 2006), cuatro de cada diez mujeres que tienen o tuvieron una pareja, han vivido situaciones de violencia emocional, económica, física o sexual en algún momento de su relación.
Las estadísticas muestran que de cada 100 mujeres de 15 años o más que tienen o tuvieron una relación de pareja, 38 han padecido violencia emocional; 23 violencia económica, 19 violencia física, y nueve violencia sexual.
El INEGI registró que más del 65 por ciento de las mujeres que padecieron violencia física o sexual no denunciaron. En el 12 por ciento de los casos, las mujeres no recurrieron a las autoridades debido a la desconfianza en el sistema de seguridad y procuración de justicia.
Mitos y creencias
En el estudio “Del mito del amor romántico a la violencia contra las mujeres en pareja”, coordinado por la investigadora Esperanza Bosch Fiol, de la Universidad de las Islas Baleares, se indica que el modelo de amor romántico es uno de los factores que contribuye a favorecer y mantener la violencia de género en la pareja.
Este tipo de violencia es ejercida por parte de los hombres hacia las mujeres con el objetivo de controlar y lograr el poder sobre la relación.
En la investigación se señala que el modelo cultural de amor implica para las mujeres una renuncia personal, un olvido de sí mismas y una entrega total que potencia comportamientos de dependencia y sumisión hacia los hombres.
Las expertas que participaron en el estudio definen al mito como una creencia que parece una verdad expresada de forma absoluta. Los mitos poseen una gran carga emotiva y contribuyen a crear y mantener la ideología del grupo. Por ello suelen ser resistentes al cambio y al razonamiento.
Las investigadoras resaltan que en el caso de las mujeres, los mitos y creencias relacionados con el amor forman parte de su socialización convirtiéndose en “eje vertebrador y proyecto vital prioritario”. Son un conjunto de creencias socialmente compartidas sobre la “supuesta verdadera naturaleza del amor”.
Mencionan que existe una creencia de que los celos son un signo de amor, e incluso el requisito indispensable de un “verdadero amor”.
Violencia en el noviazgo
Para la psicóloga Claudia Ivonne Guerrero Salinas, mujeres y hombres viven de forma distinta las relaciones de pareja. Mientras que ellas procuran y cuidan a los otros, ellos priorizan su individualidad.
En entrevista con Cimacnoticias, señala que las mujeres no identifican la violencia y cuando lo hacen, la justifican, por lo que salir de esta situación es difícil. Aunado a esto, advierte que existe una legitimidad social hacia la violencia que se vive dentro de una pareja.
El amor tendría que vivirse “con mucho disfrute y aprender a identificar lo que nos impide ese disfrute. Lo que nos lastime, lo que nos incomode, lo que nos impida el desarrollo profesional, académico, personal”, sostiene Guerrero Salinas.
En su tesis de licenciatura sobre la violencia que han experimentado alumnas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) durante su relación de pareja, la psicóloga encontró que algunas universitarias vivieron violencia de pareja desde los 12 años, en la mayoría de estos casos con actos que buscan producir daño emocional.
El estudio fue aplicado a 183 universitarias entre los 17 y 27 años de edad. El 60 por ciento de ellas de la facultad de Psicología, el 40 por ciento restante de la facultad de Ingeniería, quienes también reportaron haber vivido violencia económica, sexual y física.