Alonso se distancia de Tello
GABRIEL CONTRERAS VELÁZQUEZ
Si algo dejaron en claro los funcionarios que se reunieron este fin de semana en la finca San Miguel, propiedad del director del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), es que las lealtades y los compromisos que se construyeron durante el sexenio de Miguel Alejandro Alonso Reyes, alrededor de su figura, permanecen vigentes.
Como una práctica más propia de los clanes perredistas -parte innegable de su genética- que, de la disciplina priista, los estrechos lazos que al paso de la anterior administración formaron quienes ahí se congregaron tienen un poderoso incentivo: la red de complicidades que se tendió en los últimos seis años en que Zacatecas pasó de la crisis financiera al colapso de la hacienda pública.
De esta forma los alonsistas han decidido mostrar fidelidad y cohesión a un proyecto político cristalizado en el futuro de un solo hombre, no hacia un conjunto de ideas ni de un partido; herencia política de la forma de hacer gobierno en el sexenio de Ricardo Monreal.
La candidatura de Miguel Alonso hacia el Senado de la Repúblico en 2018 es el motivo central para iniciar una serie de visitas con las que se pretende fortalecer un “proyecto” unipersonal, tal como lo describiría Carlos Aurelio Peña Badillo, orador central en la polémica asamblea.
El futuro que tendrá esta “corriente interna” priista en el partido y en las elecciones del 2018 dependerá únicamente de la forma en que el contador Tello diagnostique y dimensione el inusitado acto político. El peso de sus decisiones, una vez auscultado el panorama, recaerá en la responsabilidad que tiene hoy como gobernador y como primer priista del estado.
Por el momento no existen indicios contundentes de una ruptura entre ex mandatario y sucesor, pero las diferencias que existen entre los equipos de cada uno son patentes al paso de la actual administración.
Algunos medios de comunicación no han permanecido ajenos a este desapego político. No pasemos por alto la editorial del director del diario Imagen de Zacatecas, Luis Enrique Mercado, del pasado 15 de marzo en donde, a días de la llegada del director de Fonatur a Zacatecas, condena la falta de continuidad a las directrices de gobierno que marcó Miguel Alonso durante su sexenio, y que actualmente, dice, han sido ignoradas en el Plan Estatal de Desarrollo de Alejandro Tello.
Se duele especialmente de que el presente gobierno haya desatendido al Consejo Estatal de Desarrollo Económico, concilio de empresarios a quienes Miguel Alonso dio facultades para incidir en la planeación de la política económica estatal, y que hoy se encuentra en espinosa rebeldía por la estela de rompimientos que generó el “impuesto ecológico”.
El día de ayer, signado como nota de Redacción, en el diario que encabeza Luis Enrique se filtraron los nombres de quienes asistieron al sínodo alonsista. Se aseguró en el mismo texto que al contador Tello se le había extendido invitación para participar en el convivio, misma que tuvo que declinar debido a que se encontraba de gira de trabajo en los Estados Unidos.
El detalle informativo, sin lugar a dudas, despierta cuestionamientos evidentes: ¿por qué los alonsistas no pospusieron el evento? ¿Por qué no buscaron la fecha para que el contador pudiera presentarse? ¿El gobernador hubiera respondido afirmativamente a la invitación? ¿Por qué el anfitrión de la francachela en San Miguel prefirió felicitar a Pancho Escobedo vía Twitter por su informe de labores, en vez de presentarse en ese mismo evento al que asistiría, como representante del mandatario, Cristina Rodríguez?
Las respuestas ofrecen un margen reducido para pensar que Tello hubiera dado el aval a la hermética reunión de alonsistas, a la cual se citó con varios días de anticipación. Los suficientes para que en los pasillos de Ciudad Administrativa prendieran alarmas sobre la convocatoria que extendió el legislador Carlos Peña a tal acto, y la intención de “filtrar” las particularidades del ágape en los espacios informativos.
Sin embargo, mientras el contador no fije una postura al respecto, incluso ya hay quienes sospechan de la posibilidad de que la reunión no le provoque malestar o siquiera preocupación. Quienes así piensan soportan su hipótesis en el hecho de que hasta ahora Tello ha tenido la oportunidad de provocar un verdadero cisma con su antecesor.
Las investigaciones sobre el uso de recursos durante el sexenio pasado, que se han hecho al interior de la Secretaría de Finanzas, pueden acabar de una vez por todas con las aspiraciones de todo aquél grupo (la caída de los eslabones débiles arrastraría a otros tantos), situación que el contador ha evitado de buena voluntad.
El escenario de ruptura, entonces, se mantiene en impasse. El contador podría evitar por ahora un frente más de conflicto; en su sexenio ya hay los suficientes. Empero, su respuesta evidenciará si entiende la política como liderazgo.
Twitter: @GabrielConV