A Pesar de Sequía y Violencia, la Vida Tiene que Seguir: Nahle
Zacatecas, Zac.- «Si no tienes un amigo libanés, búscalo», fue la cita de Adolfo López Mateos utilizada por Arturo Nahle García, para iniciar no solo el recuento de los libaneses asentados en Zacatecas, sino la presentación de su último libro «Retratos, relatos y retazos».
En un Bar Moshu repleto de funcionarios y empresarios, y con la presencia del gobernador Miguel Alonso Reyes, el procurador general de Justicia, una vez más arrancó las carcajadas de los zacatecanos, con su conocido y reconocido humor.
Pero también recordó a sus antepasados que atravesaron «el mundo» para llegar a Río Grande, de donde es originario.
Y si por la mañana los de la izquierda tuvieron su pasarela, esta fue la ocasión para que los aspirantes a candidaturas por la derecha priísta también se placearán.
Así, ocuparon un lugar en el moderno bar, Alejandro Tello Cristerna, claro sentado a un lado del gobernador. También llegó Adolfo Bonilla, que quiere seguir los pasos de su padre José, y busca ser diputado federal.
En este ambiente electoral, Nahle García no desaprovechó la oportunidad de recordar a los presentes que ya en marzo del 2010, él había decidido «jugársela» con Alonso Reyes.
Esto al leer uno de sus textos dedicados al hoy gobernador de Zacatecas.
Como el procurador estuvo decidido a echar la casa por la ventana, leyó otro de sus relatos, este dedicado a Antonio Aguilar.
Pero para ello se hizo acompañar del hijo del Charro de México, Antonio Aguilar Jr., que con sentimiento entonó «Tristes Recuerdos», «Mi gusto es», «Un puño de tierra» y otras más que hicieron famoso al «priísta» Tony Aguilar.
Manuel González, cronista de Zacatecas, fue el encargado de la presentación de las 90 lecturas amenas que a lo largo del tiempo fueron publicadas en diferentes diarios de circulación local y hoy se publican a través de Taberna Libraría, que las distribuye ya en todas las librerías Gandhi del país.
Según el cronista, se trata de un libro sin otro afán que dejar marcado el oficio de vivir.
El antro elegido por el procurador, por supuesto lució blindado por decenas de guaruras que abarrotaron las calles aledañas. La fila de Suburban blancas último modelo, eran de llamar la atención.
Como también los bailables árabes y españoles que protagonizaron unas zacatecanas encabezadas por Claudia Alonso Reyes.
Al despedirse, Nahle García dijo que a pesar de la sequía, de la violencia y los momentos difíciles de la economía, «la vida tiene que seguir».
La tertulia terminó con la actuación de Antonio Aguilar Jr., quien dijo, estaba ahí porque no quería que le dieran «una calentadita».
