Autoriza Cofepris importación masiva de condones femeninos
México, Distrito Federal.- La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) resolvió que la importación masiva de condones femeninos de segunda generación puede comenzar, pues consideró que las pruebas de calidad internacionales son suficientes para introducirlos al país.
Lo anterior lo informó en entrevista Javier Domínguez del Olmo, oficial para México del Programa de Salud Reproductiva del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA, por sus siglas en inglés), quien indicó que a principios de julio la Cofepris respondió al mecanismo de la ONU que la importación masiva del producto no requería de una segunda prueba de calidad.
Domínguez subrayó que la Cofepris tardó ocho meses para responder a la agencia de Naciones Unidas, los cuales se sumaron a los dos años que tardó la Comisión dependiente de la Secretaría de Salud federal (Ss), para dar el registro sanitario a la empresa Prodifam para que comercializara condones femeninos de segunda generación de la marca Female Healt Company.
El oficial del Programa de Salud Reproductiva añadió que el tiempo que Cofepris tardó en otorgar el registro sanitario para la segunda generación de condones femeninos fue “excesivo”. Y a ese periodo de espera se añadieron los meses en que la Comisión tardó en contestar la petición del Fondo de Población.
Domínguez del Olmo detalló que la respuesta que entregó Cofepris a principios de este mes refiere que los preservativos no requerirán de una segunda etapa de pruebas de calidad, ya que reconocieron que son suficientes las pruebas internacionales a las que ha sido sometido el método anticonceptivo de barrera.
Actualmente, UNFPA revisa la información que le dio Cofepris para asegurarse de que haya “absoluta claridad” en los procedimientos y los condones femeninos entren al país sin ninguna dificultad.
Una vez que se abra el periodo de compra “cualquier gobierno estatal podrá adquirir estos insumos y ponerlos a la disposición de las usuarias de los servicios públicos de salud”, refirió Javier Domínguez.
El especialista en salud sexual y reproductiva dijo que se prevé que el abasto de condones femeninos sea semejante a la distribución de preservativos masculinos que el UNFPA ha realizado en al menos 23 estados del país, durante 10 años de cooperación entre la agencia de la ONU y el gobierno mexicano.
Al respecto, Olga Georgina Martínez Montañez, titular del Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva (CNEGySR), dijo a Cimacnoticias que en promedio el UNFPA importa 30 millones de condones masculinos para México al año.
La ventaja de obtener el condón masculino a través del Fondo de Población es que se adquieren a menor costo. En este sentido, Javier Domínguez ejemplificó que hace 7 u 8 años con lo que se podía comprar un condón en el mercado, la Ss podía comprar cuatro, y actualmente por cada condón en el mercado sólo se pueden comprar dos.
En un principio, agregó, la oferta de condones femeninos será “incipiente” porque las mujeres no lo están solicitando, pero irá en aumentó conforme las usuarias tengan “conciencia del uso” de este método.
Por su parte, Eugenia López, directora de la organización Balance, refirió que hasta ahora el condón femenino es el único método “en manos de las mujeres”, que además de prevenir un embarazo no deseado, evita la transmisión de infecciones de transmisión sexual (ITS).
El preservativo femenino de segunda generación puede colocarse ocho horas antes de tener una relación sexual, está hecho de un material sin látex llamado polímero de nitrilo que tiene niveles semejantes de protección que el de primera generación, pero es más cómodo y flexible.
A decir de la activista, la importancia del condón femenino permite “la protección de ti misma en un acto de empoderamiento y de respeto por tu salud”.
Por ello lamentó que la regulación quedara “atorada en Cofepris” durante tres años, pues a pesar de que la Ss incluyó el abasto de condones femeninos como parte del Plan Nacional de Prevención del Sida para el periodo 2006 a 2012, “llegamos a 2011 y no lo han incluido”.
Por Guadalupe Cruz Jaimes/CIMAC