Allanando el camino para la imposición
CAMERINO ELEAZAR MÁRQUEZ MADRID *
En los últimos días las autoridades electorales han dado muestras de la poca disposición que tienen por cumplir el papel histórico que les está tocando desempeñar, allanando así el camino para la imposición en México. Imposición que millones de ciudadanos rechazamos.
Ejemplo de ello es lo sucedido este fin de semana con las resoluciones emitidas por el IFE y el TEPJF.
No se puede dar otro tipo de interpretación a la actitud tendenciosa y parcial mostrada por la Unidad de Fiscalización del Instituto Federal Electoral, que al presentar los avances de su informe en la fiscalización de gastos de precampaña no vio los más de 4 mil espectaculares utilizados por Enrique Peña Nieto y sí 239 de la Coalición Movimiento Progresista, para sancionar al PRD con más de 5 millones de pesos y al PRI con 6 mil pesos.
El informe fue tendencioso y parcial. Revisa con lupa al PRD y deja pasar graves irregularidades del PRI. Es decir, castiga a quien denuncia las violaciones electorales y premia a quien las cometió. El mensaje que el IFE manda es claro.
Es realmente una burla lo que el informe fiscalizador del IFE resolvió, cuando existen cientos de pruebas del ofensivo gasto aplicado por el PRI y su candidato presidencial, tanto que “compraron la elección” y ahora resulta que todo el pueblo de México lo vimos, menos la autoridad electoral. ¿Miopía o ceguera? Para el caso es lo mismo.
Otro hecho que nos lleva a creer que la decisión final sobre la validez de la elección presidencial del 2012 no es la que el pueblo espera se dio el viernes, cuando el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación resolvió los 349 juicios de inconformidad interpuestos por la coalición del PRD, PT y MC referentes a cómputos distritales de la elección presidencial, cuando sólo anuló unos cuantos votos, que en términos reales no impactan en los resultados por todos conocidos.
A lo anterior se suma lo sucedido la semana pasada, cuando el IFE rechazó, sin una investigación profunda, que Enrique Peña Nieto hubiera comprado publicidad disfrazada para promover su imagen desde el 2005 hasta la fecha.
Esa fue otra burla más a la legalidad mexicana, porque la lamentable resolución se dio sin llamar a las personas y comunicadores involucrados para que aportaran más elementos a la investigación, no solicitó documentos a Televisa y desechó investigaciones periodísticas serias que comprobaban nuestra afirmación.
Esa actitud equivale a preguntarle al delincuente detenido infraganti que si hurtó lo que lleva en la mano y éste respondiera que no y se le dejara libre. Así, de ese tamaño está la situación.
En esta semana que inicia será revisado por el TEPJ el “recurso madre”, que es el cómputo final de la elección presidencial, para discutir el dictamen de validez de la calificación, el cual confiamos que los magistrados resuelvan invalidarla, en favor de la legalidad y hacer valer la decisión de millones de mexicanos y mexicanas.
Y ante esos hechos irrefutables de la actitud indolente de las autoridades electorales, las irregularidades y la “compra de la elección”, los priístas y sus compinches se atreven a acusar a las izquierdas de “amenazar” con estallido social si el TEPJF no invalida la elección presidencial.
Ellos saben que no son las izquierdas, es el pueblo de México. Son millones de habitantes cansados de la pobreza, de la corrupción, la falta de oportunidades, de la inseguridad pública, hartos de la demagógica que caracteriza a los priistas.
No puede considerarse una amenaza a la previsión que se hace sobre las graves consecuencias que podrían presentarse si no se invalida la elección “comprada” por la coalición Compromiso por México. Ahí está la actitud asumida por millones de jóvenes del movimiento “yosoy132”, de los familiares y víctimas de Atenco, de organizaciones y sindicatos que están en contra de la imposición.
Ellos y ellas no quieren a Peña Nieto en la Presidencia de la República. Esa ciudadanía es la que va a reaccionar si el TEPJF emite un fallo que no les satisfaga. No se necesita ser adivino ni amenazar para predecir la actitud social ante una inconformidad.
En el PRD esperaremos hasta que se emita la resolución del Tribunal sobre la invalidez de la elección presidencial para tomar las decisiones de actuación, que como hasta ahora serán prudentes, pero eso sí enérgicas, defensoras de la legalidad y exigentes de claridad para lograr la limpieza de los comicios.
*Representante del PRD ante el IFE.
