«Clanes perredistas de Zacatecas se unen
Frenillo, Zac.- El pasajero 8-C del vuelo México-Aguascalientes llegó cinco minutos antes a la sala de espera. Se sentó y aguardó paciente. Con los brazos extendidos a cada lado, sobre el respaldo de los asientos, sonreía discretamente, como un niño que acaba de hacer una travesura. La gente lo mira de lejos, pocos se acercan.
Andrés Manuel López Obrador aguarda la salida del avión de 50 plazas que lo llevará a la tierra de su general, Ricardo Monreal.
Aterriza después de las dos de la tarde en Aguascalientes. Entonces inicia otro viaje de más de dos horas al pueblo de su coordinador de campaña. Ahí se viviría, casi cinco horas después, la reconciliación del clan Monreal con la ex gobernadora Amalia García y el ex gobernador Arturo Romo. Pero Ricardo Monreal no estaría ahí.
Piden voto al son de banda
En su entrada al pueblo, bastión monrealista, hay cientos de simpatizantes que lo reciben. Tarda casi 40 minutos en llegar al cruce de Hidalgo y Juárez. En la espera el grupo El Rey toca música de banda. Con botas y chamarras de cuero, bailan y piden el voto para López Obrador.
Unas nubes calman el ardor del sol. Cientos han desbordado las calles del centro de Fresnillo. La espera se prolonga. Los sombreros y las sombrillas son insuficientes. Unos cohetones truenan a lo lejos. Anuncian que el candidato está por llegar. Entonces los invitados suben a un templete que ocupa toda la calle.
Elías Barajas, líder del Movimiento Ciudadano en el estado, manotea con la seguridad que le impiden por un momento subir al templete. Llega Amalia García, la gente la abuchea, pocos le aplauden, la acompaña su hija Claudia Corichi, que del Senado quiere pasar a la Cámara de Diputados. Saúl Monreal va a un lado, David Monreal, con un eslogan en la espalda “amor con amor se paga” a otro, lejos de Amalia. Llegan Anaya y Armando López Campa, adelantito del tabasqueño.
Tres discursos
Tres discursos, Juan García Páez, candidato a diputado reproduciendo cada mensaje de López Obrador, David Monreal es breve. López Obrador amaga con ser breve pero al final habla 37 minutos ante sus seguidores emborrachados por el sol. Ahí, recibe el apoyo de Claudia Anaya y, de repente, el candidato presidencial anuncia la reconciliación de la izquierda en el estado.
La ex gobernadora deja su lugar en la fila formada por los liderazgos locales de Zacatecas. Habla el tabasqueño y Amalia va hacia donde se encuentra David Monreal, le toma la mano y la levanta, el ex gobernador Romo también da un paso al frente. López Obrador sonríe. Los clanes de Zacatecas se unieron de nuevo, pero no estuvo Ricardo Monreal, se quedó en el DF preparando el debate, decían unos y otros: “para no robarle reflector a David”.