Disfrutan 60 mil de concierto de Britney Spears
México, DF.- AL menos 60 mil personas disfrutaron del concierto gratuito que la cantante Britney Spears ofreció en el Monumento a la Revolución, mismo que cobijó a la «Femme Fatale» por más de 90 minutos, tiempo que duró su recital.
De manera puntual, la «Princesa del Pop» comenzó su espectáculo y a las 20:00 horas las luces del escenario se apagaron para abrir el «show» con un video en donde la protagonista de la noche intentaba escapar de un hombre que la perseguía.
Acto seguido «La Mujer Fatal» apareció al centro del escenario, dos pantallas le abrieron el paso, y dentro de una malla blanca deleitó con «Hold it against me», vestida con un body en tono plata, ante la vista de todos, la cantante desapareció y apareció encerrada en una jaula y así cantó «»Up n» down».
Para su gira «Femme Fatale», Spears no escatimó en traer un espectáculo de primera en el cual reinaron los juegos de luces, los cambios de vestuario, las coreografías y sobe todo un nuevo arreglo a algunos de sus temas que le dieron el toque festivo a la noche.
No obstante, la cantante no realizó aquellos movimientos tan sensuales que cautivaron a su público años atrás, pero éste demostró que le sigue siendo fiel y en cada baile y en cada movimiento fue vitoreada hasta el cansancio.
«Hola ciudad de México, ¿cómo están?», preguntó Spears, lo que provocó una oleada de gritos ensordecedores que la cantante no pudo escuchar por lo que refirió «no puedo escucharlos», y de nueva cuenta las personas le hicieron notar que estaban ahí, atentos a ella.
Con el tema «3», Spears optó por usar una gabardina y fedora blancos, que también hicieron vibrar al público y aunque hubo quienes la elogiaron, otros más no callaban sus pensamientos y en varias ocasiones cuestionaron si estaba cantando o usaba pistas.
A la velada, a la cual acudieron familias completas, grupos de amigos, parejas y alguno que otro curioso, le siguieron temas como «Piece of me», también levantó los ánimos de los presentes.
Tras una breve pausa, Spear volvió a adueñarse del escenario pero ahora con un body rojo, cantó «Big fat bass» y al concluir el tema preguntó de nuevo «¿qué sucede Ciudad de México?», y tras estas palabras dio paso a «How I roll».
«Gracias México, es tiempo en el show para mostrar valentía», dijo la cantante y después hizo subir a un fanático al escenario, para que, a ritmo de «Lace and leather» le bailara de manera sensual.
El concierto gratuito siguió su marcha con «If u seek Amy» y «Gimme more», en éste último la cantante se convirtió en una «Reina Egipcia» cubierta en oro, pues tanto su atuendo como sus accesorios lucieron en ese tono.
El repertorio siguió tomando forma con «Drop dead beautiful», para la que utilizó marcos, en los que mostró diversas escenas que recreaban la letra de la canción.
Y aunque el concierto se tornó en una fiesta, la cantante no dejó de lado los momentos románticos y entonó «Don»t let me be the last to know» desde un columpio que se colocó en el centro del escenario.
En otro cambio de ropa, Spears lució otro body ahora en color negro con lentejuelas que daban la forma de una mariposa y así, cantó un «medley» compuesto por los temas «Boys», «Baby one more time», «S&M», éste último famoso en la voz de Rihanna.
Para «Trouble 4 me», la escenografía cambió completamente e incluyó motocicletas y para no dejar de lado sus orígenes, Spears cantó «I»m a slave 4 u».
«¿Quieres más ciudad de México?», preguntó y tras escuchar el «Si» eufórico siguió la noche con «I wanna go», que tuvo como bailarines a ocho personas más del público que hicieron un gran intento por seguir las coreografías de la cantante.
«Muchas gracias ciudad de México», fueron sus últimas palabras y con las cuales se despidió del público, pero éste insistente, la hizo volver al templete, no sin antes entonarle las «Mañanitas», puesto que el pasado viernes «La Princesa del Pop» llegó a los 30 años de edad.
En un último video, el hombre que la perseguía fue sorprendido por la cantante, quien lo amarró y le dijo «eres un mal chico», y enfatizó «te atrape», como buena Mujer fatal. Acto seguido, un samurai le dio la bienvenida a la cantante quien vistió un kimono multicolor sugestivamente corto y escotado para cantar «Toxic».
Para cerrar el recital, Spear escogió «Till the world ends», pero para ofrecerse como una esperanza, se elevó al cielo como un ángel, y así dijo adiós: «gracias ciudad de México, han sido maravillosos, los amo».
Un día antes, la cantante convocó a más de 40 mil almas que se dieron cita en el Foro Sol, lugar en el que ofreció su concierto del Distrito Federal.
La entrada a la plancha del Monumento a la Revolución sólo se le concedió a 50 mil personas y más de 10 mil pudieron disfrutar del concierto en las enormes pantallas que fueron colocadas alrededor del lugar. Asimismo, la seguridad pública no escatimó en enviar elementos y se contaron a dos mil policías.
Con información de: Notimex