Migración implica cambios psicológicos y mentales: Rafael Samaniego
Zacatecas, Zac.- Invitado por la Iniciativa de Salud de las Américas, Rafael Samaniego, docente-investigador de la Unidad Académica de Psicología y del Área de Ciencias de la Salud de la UAZ, acudió a impartir la conferencia “Salud Mental y Migración”.
La actividad estuvo dirigida a migrantes, así como su familia, a miembros de los consulados y de la Secretaría de Salud de Zacatecas, además de líderes de las comunidades migrantes. Lo anterior en el marco del Día del Zacatecano, celebrado el fin de semana por la Federación de Clubes Zacatecanos del Sur de California.
“La migración no sólo es cruzar fronteras geográficas de un país a otro, y no solamente son fronteras económicas, políticas y sociales, también implican fronteras psicológicas y de salud mental”, indicó el universitario zacatecano, al abordar las implicaciones de este fenómeno.
Explicó que independientemente de las ganancias económicas que tenga un migrante, los costos emocionales y psicosociales son muy caros tanto para él como para la familia que se queda en México. En Estados Unidos –sostuvo– no se contempla la salud física de los migrantes, menos la salud mental, ya sea esto por discriminación, por el idioma o por los costos de los tratamientos.
Asimismo, en su conferencia el docente universitario hizo una descripción de los factores de riesgo de los migrantes cuando se van a Estados Unidos, en donde sufren extorsiones, asaltos y deportaciones, así como las travesías mortales. “Todo esto tiene un impacto fuerte en el estado mental de los paisanos”.
Al llegar allá –continuó– también sufren el shock cultural, un problema de adaptación al no hablar el idioma, al no encontrar el empleo soñado o que los ingresos sean muy poco. Todo ello va generando trastornos emocionales. “Hay estudios que señalan que el estado mental del migrante refleja cuadros de depresión, esquizofrenia, consumo de drogas y alcohol y problemas de personalidad”.
Manifestó Rafael Samaniego, que las políticas propuestas van encaminadas a la investigación binacional en el aspecto de la salud mental, así como la formación de profesionales de la salud al interior de la UAZ enfocados al estado mental y físico del migrante.
otra de las propuestas –finalizó– es trabajar con la familia del migrante que se queda en el país, ofreciéndoles programas que minimicen su estado depresivo causado por quedarse sin un integrante de la familia.