Intereses de partido y personales rompen quórum en Congreso
Zacatecas, Zac.- La aprobación de la reforma a la Constitución del Estado, para que el derecho al agua esté considerado como una garantía para todos los zacatecanos, pasó desapercibida cuando la falta de acuerdos y los intereses personales y de partido salieron a relucir.
Y es que en la sesión ordinaria, que era una continuación de la del jueves, cuando decidieron «parar» el reloj legislativo para irse de puente vacacional, las cuentas públicas que evidencian los malos manejos que del erario hicieron los ahora ex alcaldes topan con la pared de la impunidad.
De 30, solo 24 diputados asistieron a la sesión, pero justo cuando intentaban iniciar la discusión y, en su caso, aprobación de las cuentas públicas 2009 de los municipios de Juchipila, Villa de Cos, Guadalupe y Zacatecas, la falta de acuerdos políticos entre las bancadas se hizo evidente.
El diputado Ramiro Rosales Acevedo, del partido Nueva Alianza, dio lectura a una petición para que se sometiera, ante la asamblea, la posibilidad de regresar los dictámenes a las comisiones, Primera y Segunda de Hacienda y la de Vigilancia, mientras las demás fracciones impulsaban su discusión en el pleno.
En su exposición, el diputado había señalado que la razón principal de solicitar regresar estos dictámenes era para darle mayor transparencia a la revisión de las cuentas públicas, y al mismo tiempo para solicitar a la Auditoría Superior del Estado “que realice trabajos adicionales (de revisión de expedientes) de los cuales deberá informar a las comisiones, para que en razón de su contenido éstas se pronuncien”.
A ello, la diputada petista Geovanna Bañuelos reviró diciendo que “no hay ningún fundamento legal para (hacer) eso”, y detalló que la ley orgánica de este poder mandata que luego de dar lectura a los dictámenes, deben someterse a discusión y, en su caso, aprobación en la siguiente sesión legislativa.
Y le pidió a la presidente de la mesa directiva, la diputada María de la Luz Domínguez, “de manera respetuosa, que se apegue estrictamente a lo que nos ordena la Ley Orgánica”.
Finalmente, la diputada presidente invocó nuevamente los artículos y procedimientos que regulan el quehacer legislativo, y determinó que los dictámenes deberían ser inmediatamente discutidos, ante lo cual fue notorio el desacuerdo de muchos legisladores.
El desacuerdo provocó que, sin argumento de por medio, los legisladores del PRI y Panal abandonaran el salón de plenos, rompiendo así el quórum legal y obligando a suspender la sesión, que fue citada nuevamente para reanudarse a las 18:00 horas.
Pero nada sucedió, ya que los priístas y panalistas optaron por no asistir nuevamente y ante la falta de quórum, la sesión no pudo continuar.