Una tarde de toros, valentía y arte en La Jerezana

Jerez, Zacatecas — Bajo el cálido sol de la tarde, la Plaza de Toros La Jerezana se vistió de gala para recibir uno de los eventos más esperados de La Jerezada 2025: la Gran Novillada. Con la presencia del presidente municipal, Rodrigo Ureño, y su esposa, Estefana Casas, así como del senador Saúl Monreal, la tarde se convirtió en un homenaje a la tradición taurina, donde la emoción y la adrenalina se mezclaron con el arte y la valentía de los novilleros.

Aunque la tarde no culminó con trofeos para los jóvenes toreros, el público fue testigo de momentos memorables. Sebastián Soriano «Tatán», Rafael Soriano, Tomás Alejandro, Juan Flores y Sergio Gerardo desplegaron su destreza frente a los astados de la Ganadería Progreso San Mateo. Con pases de muleta que dibujaron figuras en el aire y banderillas incrustadas con precisión, los novilleros lograron conexiones únicas con el público, que no dudó en ovacionarlos con entusiastas «Olé».

La tarde no estuvo exenta de caídas y momentos de tensión, pero cada novillero demostró entrega y valentía, recordándonos que la tauromaquia no solo es un arte, sino también un acto de coraje y pasión. La Banda de la Escuela de Música «Candelario Huízar» acompañó cada lance con su inigualable interpretación, añadiendo un toque de solemnidad y júbilo al evento.

Aunque las estocadas precisas no llegaron, la tarde dejó claro que La Jerezana no es solo una plaza de toros, sino un espacio donde la tradición se vive con intensidad y donde el público, más que espectador, es parte fundamental de esta fiesta que une a generaciones.

Al caer el sol, cuando los últimos acordes de la banda se desvanecieron en el aire, quedó claro que esta Gran Novillada no solo fue un evento taurino, sino una celebración del espíritu jerezano, que año con año se renueva en cada pase, en cada ovación, en cada instante de emoción compartida.

LNY/Redacción