Acerca del abandono de Minera Santa Cruz a trabajadores durante pandemia
JACOBO CRUZ
La unidad minera Santa Cruz que opera en la cabecera municipal de Vetagrande dio a conocer que suspendería sus operaciones durante medio año debido a un proceso de remediación ambiental impuesto por la Procuraduría Federal de Protección Ambiental (Profepa) que inició en 2014 y con ello se afectó el ingreso de al menos 319 trabajadores en quienes esta erogaba unos 2 millones 800 mil pesos en nómina, según datos que circularon en medios de comunicación.
El hecho es lamentable porque deja en la incertidumbre a la población y directamente a las familias que dependían del salario percibido en el sitio, con el agravante que se da en el tiempo menos oportuno debido a la pandemia generado por la covid-19. Su gerente general, Miguel Adalberto Díaz, declaró en días pasados que es un cierre temporal para cumplir con los informes requeridos por Profepa donde sigue pendiente un proceso administrativo ambiental de la presa de jales que permanece a cielo abierto, de lo que cabe precisar vierte sus aguas contaminadas a la parte baja sobre el cauce del arroyo de Sauceda de la Borda, a pesar de eso las autoridades afirmaron que tenían todo conforme a la norma, por lo que Minera Santa Cruz estuvo logrando concentrados de oro, plata y zinc de hasta 15 mil toneladas mensualmente.
Pues bien, a través de su gerencia se afirmó que se reanudarán actividades una vez que se culmine con el citado procedimiento, a la vez que ofreció a los afectados ser recontratados en unidades mineras de Charcas, San Luis Potosí y Zimapan, Hidalgo, lo que es casi imposible para el personal que allí laboraba por todo el desacomodo que esto conlleva, sin embargo esta es una vieja estrategia para consolar y suavizar la realidad que viven los vecinos en Vetagrande acostumbrados ya a ver como cosa ordinaria la destrucción del entorno es este bello municipio.
Los motivos por los cuales se va la minera no quedan claros, sin embargo, trascendió que la producción de plata equivalente de la compañía aumentó un 346% desde 2018 alcanzando 2.8 millones de onzas en 2019 (Moz); Zimapan produjo 1,6Moz Ag-eq para Santacruz en 2019, en comparación con las 761,262Moz Ag-eq de Vetagrande y las 465,576Moz de Rosario, (https://mineriaenlinea.com/2020/03/santacruz-suspende-mina-de-plata-en-mexico/), entonces puede deducirse que ya no es rentable seguir en la explotación de su planta en Zacatecas y puede ser uno de los motivos por los que se retira.
Por otro lado, según el testimonio de habitantes de Vetagrande, la mayoría de las casas de la cabecera municipal, aunque en su mayoría están construidas con material adecuado estas presentan daños estructurales en diferente magnitud como cuarteaduras en pisos, paredes o techos y cuando alzaban la voz como reclamo e indemnización es cuando la minera amenazaba con retirarse.
Es muy conocido que la extracción de los minerales de este lugar se hace justo bajo de la localidad y para ello se emplean explosivos derivándose afectaciones de los hogares, esto fue reconocido en su momento por el presidente municipal opinando que por esa causa se tenía con la empresa una relación distanciada, pero adelantaba que su cierre traería caída en la poca actividad comercial.
Cabe decir que esta no es la primera vez que alguna minera ha sido acusada de dañar el patrimonio de los lugareños, cosa similar sucedió hace unos años en Salaverna, municipio de Mazapil por parte de la empresa Frisco-Tayahua del magnate Carlos Slim donde el yacimiento mineral se encontraba justo bajo el pequeño poblado, finalmente los afectados tuvieron que aceptar la reubicación después de años de pugna con la empresa y la mediación de las autoridades.
Pero volvamos a Vetagrande. Hoy, los ex trabajadores de la minera Santacruz exigen el pago de su salario y liquidación que suma unas 5 semanas de retraso, hoy que sufren por problemas económicos derivados de la covid-19 y a pesar de que el acuerdo entre las partes se firmó el 18 de marzo les están regateando su pago como si no tuvieran dinero para atender un compromiso.
El lugar está cerrado por los afectados que no les resuelven y una de las formas que encontraron fue evitar que saquen la maquinaria y herramientas, solo así tienen garantía de que les paguen. Pero ellos no son los únicos que enfrentan los problemas, sino que centenas de familias también se han manifestado con cartulinas con leyendas como: “Urgen Alimentos” pidiendo auxilio de autoridades federales y de la población civil, además esperan que personajes políticos repartan despensas durante la cuarentena y que federación ponga en pausa los megaproyectos como el tren maya o la refinería de Dos Bocas, porque ahora las prioridades son la salud y comida.
Hoy vale la frase acuñada por el sudafricano Nelson Mandela que fue un referente internacional por su mensaje de reconciliación y fin del racismo: “Erradicar la pobreza no es un acto de caridad, es un acto de justicia” y eso es lo que se requiere en Vetagrande: el respeto a los derechos, el pago de salarios, el arreglo de las viviendas dañadas y que entreguen alimentos durante la pandemia.