La Casa de los Perros: Los enemigos de David Monreal
CLAUDIA G. VALDÉS DÍAZ
Ámpula levantó la comilona organizada por el restaurantero Cuauhtémoc Calderón Galván, y el cuñado del exgobernador Miguel Alonso Reyes, Pedro de León Mojarro. Ellos pidieron al coordinador nacional de ganadería, David Monreal Ávila, los acompañara. Le dijeron que lo querían apapachar. No más.
Al final, la reunión que habían planeado para 60 personas creció y creció hasta casi llegar a las 200 personas. Ahí, nadie disimuló sus intenciones. Ven en David Monreal al próximo candidato de Morena y, también, al futuro gobernador de Zacatecas. Por ello ofrecen su apoyo, pero olvidan que, como lo predica el presidente Andrés Manuel López Obrador, los movimientos hueseros ya no existen, se acabaron.
Entre los asistentes figuraron reconocidos chapulines de la política que ayer estaban con el inquilino de La Casa de los Perros y hoy, ante el ocaso de su gobierno, lo abandonan para buscar nuevos rumbos. A eso están acostumbrados. Ya saben el camino y lo quieren repetir.
Pedro de León Mojarro, aún bajo sospecha por su participación en la Estafa Maestra, caso que tiene tras las rejas a su exjefa y principal patrocinadora Rosario Robles Berlanga, a quien haciendo gala de su nombre ya ha negado en más de tres ocasiones, se encargó de recibir a los invitados.
Cuando las promesas de apoyo servil de los presentes estaban en su apogeo, el expanista, expriista, exmorenista, exverde ecologista y ahora otra vez morenista, Cuauhtémoc Calderón, titiritero de la síndica Ruth Calderón Babún en el Cabildo de Zacatecas, hizo un llamado a cerrar filas para incluir “a todos que siempre hemos estado con David”. Vaya, vaya…
Ya con el ánimo desbordado, el restaurantero y el cuñado incómodo procedieron a autonombrarse coordinadores de organización del grupúsculo que lideran y al que han denominado D21. Con calcomanías incluidas.
Estos coordinadores se brincaron todas las trancas habidas y por haber. Actuaron de manera por demás irresponsable. Se piensa ya que operaron bajo consigna y hoy se encumbran como los principales enemigos del propio David Monreal. Este fin de semana ellos, los que ayer domingo le besaron la mejilla al fresnillense, dieron armas a los opositores para que, no lo dude usted ni un momento, inicien una batalla en tribunales. La sospecha de una campaña anticipada ellos no sólo la propiciaron. La promovieron a los cuatro vientos.
David Monreal, quien como buen político que ya aprendió la lección agradeció las muestras de cariño desinteresado de los asistentes. Ofreció el apapacho requerido, pero realmente no se comprometió a nada públicamente. Ahora tendrá que poner los puntos sobre las íes. Él más que nadie lo sabe, y lo ha dicho una y otra vez, que un error, una equivocación o un desliz puede tirar por la borda su proyecto.
Quizás por ello la notoria ausencia a esta reunión –a excepción de Kike Rayas–, de quienes forman parte del primer círculo de confianza de Monreal Ávila.
Todos anticipados
Del lado del tricolor, y con la anuencia del gobernador Alejandro Tello Cristerna, también hacen campaña anticipada el vitivinicultor, y dicen que próximamente restaurantero en Aguascalientes, Roberto Luévano Ruiz. Él, con el programa UNE, patrocinado por la Sedesol, recorre el estado entregando cuadernos y lápices a los infantes de Zacatecas. Anda en campaña.
Está también Adolfo Fito Bonilla, quien desde Secampo no descansa. Un día sí, y el otro también, hace lo propio y también visita las comunidades del estado entregando apoyos para el campo. Anda en campaña.
Lo hace también Carlos Peña Badillo, quien ahora en su papel de alfabetizador, llega a los zacatecanos a enseñarles a leer y escribir. No quiere que llegada la hora de la votación no acudan a las urnas sin haberse aprendido de memoria su nombre. Anda en campaña.
Pero ante la ley no aplica eso de dolor de muchos, consuelo de…
Fin de feria
Hoy, con la presencia del boricua Ricky Martin, llega a su fin la Feria Nacional de Zacatecas. El balance, al menos en seguridad es blanco. Las riñas disminuyeron y no hubo un incidente que pusiera en peligro a los miles de familias que desde el 5 de septiembre pasearon, y pasearán hoy, en las instalaciones.
Benjamín Medrano Quezada entrega buenas cuentas. El incidente con el reggaetonero Ozuna es harina de otro costal que, ya concluida la fiesta, deberá explicar con detalle el propio coordinador del Patronato.
Hasta este día, Medrano Quezada mantuvo el control de lo que le correspondía. Los artistas de renombre (no los aprendices de cantantes), cumplieron con su parte; las instalaciones estuvieron vigiladas. Se notó la mano del fresnillense.
Ya los abusos en los antros, que llegaron a cobrar hasta 800 pesos de cover; la arbitrariedad en los estacionamientos que exigieron en días clave un pago de cien pesos; la reventa desbordada de quienes sacaron jugo a sus desvelos en las filas de las taquillas, eso ya es otro cantar. El festejo, sin duda, le quedó corto a la Profeco que lució por su ausencia.
Esta organización sin duda le regresó a la Feria Nacional de Zacatecas, el brillo perdido durante años. Los zacatecanos pueden presumir que el festejo dejó de ser una kermés pueblerina.
Van por la unidad
Todo parece estar listo para que este miércoles, en la Ciudad de México, Alejandro Tello se reúna con los senadores y diputados federales para, juntos, en unidad, ahora sí se pongan a trabajar y pugnen por un buen presupuesto para Zacatecas.
Y es que, con la decisión de que sea la superdelegada Verónica Díaz Robles quien maneje los recursos de los programas sociales, y deje a un lado al gobierno diferente, que ya se ha cansado de ir a llorar sus quejas por aquí y por allá, la situación económica de Zacatecas será complicada.
Por ello, si los legisladores federales le vuelven a fallar a Zacatecas, como sucedió el año pasado, tendrá que ser el nuevo doctor en Administración Pública, Jorge Miranda Castro, quien tenga que sacar la casta para que la recaudación aumente y poco a poco se deje de depender tanto de la Federación.
Pero también el gobernador deberá apretarse de verdad el cinturón y recortar tantas plazas creadas a modo, las mismas que hasta hoy no han traído ni un sólo beneficio. Igualmente, cumplir con la no contratación de asesores externos, esos que dijo no existirían más pero que han sido una constante en todas las secretarías, incluida la misma Oficina del Gobernador.
El reto es bien grande y de eso dependerá que este año, Alejandro Tello, salga bien librado, tomando en cuenta que aquello que no haga en este su cuarto año de gobierno, y penúltimo, no lo conseguirá después. La carrera por la sucesión, tan avanzada, ya desde hoy marca la agenda de la despedida de su quinquenio.
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