Los profesionales de la intriga
ENRIQUE EDUARDO BERNALDEZ RAYAS
Para los mexicanos no es ninguna novedad que el PRI utilice a la intriga como estrategia política. El día de ayer a través de una red social, el comité nacional del PRI publicó la foto de un documento que se intenta mostrar como proveniente del partido Morena. En la imagen supuestamente existe una orden deliberada que en las entidades donde no gobierna Morena, los ejecutivos estatales sean abucheados en presencia del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
En la lógica perversa del PRI, los genuinos reclamos al mal gobierno de algunos gobernadores son artificiales, es decir que son preparados por los funcionarios públicos que representan al gobierno federal en la entidad.
Como una muestra mayúscula de su mezquindad, en lugar de reconocer la dinámica de reconciliación que promueve el Presidente, dan el viraje y asumen un papel de víctimas, con el propósito de hacer que los servidores de la nación sean vistos como unos provocadores.
El ruido mediático no sobrevive a unas simples pruebas que no ameritan ser aplicadas por peritos acreditados, sino que cualquier estudiante de secundaria (o cualquier habilísimo priista promedio) está perfectamente capacitado para descargar un logotipo de internet, pegarlo a manera de membrete en cualquier programa de edición de texto y redactar la fantasía que tenga el propósito de desacreditar al gobierno federal que tanto ha golpeado sus privilegios.
Es simple: se trata de guerra sucia que en mi opinión no merece siquiera un pronunciamiento de parte del Presidente López Obrador. Si tuvieran la certeza, los priistas ya hubieran denunciado, mostrando un documento donde además apareciera la firma.
Los que seguro responderán son los dirigentes de Morena por ser los agraviados. Si yo estuviera en su lugar les diría que tienen buenos diseñadores para fabricar noticias falsas, pero que para su desgracia el pueblo de México ya no se traga este tipo de canalladas.
La mejor muestra de que los gobiernos emanados del PRI son repudiados es que el 1 de julio de 2018 fueron barridos por la fuerza moral de Morena y sus partidos aliados. La libertad de expresión se encuentra consagrada en el artículo sexto de la Constitución Política del Estado Mexicano y en ella no se prohíbe que haya abucheos a los gobernantes del país.
Si el PRI fuera un partido de leyes como presumen, en lugar de andar difundiendo fake news, procederían a denunciar ante las autoridades competentes. Pero solamente arman un show con el propósito de causar lástima y enlodar al movimiento democrático que hoy dirige a las instituciones del país.
Lo admito, yo porque propongo una manera de responder a las infamias del PRI; pero la Presidenta nacional de Morena Yeidckol Polevnski puede optar simplemente por ignorar su farsa y guardar silencio.
Esta semana el PRI cumple 90 años. Bien lo decía mi abuelita: de jóvenes chistosos, de viejos unos auténticos payasos.
