Radar Electoral 2018: Lula responde a las provocaciones con propuestas y trabajo
GABRIEL CONTRERAS VELÁZQUEZ
La mayor demostración de solidaridad y de respaldo al proyecto de Lula de la Rosa lo dio la gente en las colonias de la ciudad capital. Bardas con publicidad en apoyo a la candidata por el Distrito 1 fueron vandalizadas a media semana en las colonias Alma Obrera, El Orito, Camino Real, Constelaciones, Francisco E. García, Insurgentes y H. Ayuntamiento.
Un indicador indiscutible de que la campaña de Lula ya comienza a molestar a quienes presumen tempranamente el triunfo. No obstante, la intentona por destruir la propaganda de la maestra Lula lo único que logró en realidad fue reafirmar la lealtad de la gente que ya decidió votará por ella, y así se lo han manifestado los colonos capitalinos.
Las muestras de aversión han sido una constante en la campaña presidencial. Persisten las posturas polarizadas en todo el país, y en Zacatecas el clima electoral comienza a dar manifestaciones de intolerancia. Sin embargo, Lula responde con trabajo de calle y propuestas, al tiempo que invita a sus simpatizantes a no caer en provocaciones que sólo buscan arder la pradera.
El llamado de la candidata no sólo es pertinente, además deja ver la prudencia que caracteriza a Lula. Y es que, de llegar a la Legislatura –un escenario cada día más plausible- la gente ganaría un perfil profesional y humano. Basta platicar con ella un par de minutos para darse cuenta que la maestra no juega a la improvisación sino al compromiso, la honestidad y el trabajo.
Por cierto, a semanas de concluir la campaña, Lula sigue nutriendo su agenda legislativa. Recientemente ha dado en la diana del tema cultural: incluir en mayor medida a los municipios en las tareas de gestión y programación.
Entre algunos puntos clave: impulsar en el ámbito estatal, nacional e internacional a los artistas y desarrolladores culturales de los municipios. Pero previo a ello, mejorar la regulación para que los ayuntamientos mantengan un inventario actualizado de las personas que se dediquen a la creación, fomento, apoyo o promoción de las actividades culturales y artísticas del municipio, así como de los espacios públicos que auspicien estas actividades.
El gran ausente
Ulises Mejía se sabe débil. El haber omitido su participación en el debate organizado por el colectivo Fuerza Universitaria Autónoma, en el foyer del Teatro Calderón el pasado 2 de junio, habla muy bien de que no pretende arriesgar un milímetro su campaña, pues depende más de la marca Morena que de sus capacidades para conducir el gobierno municipal.
Además deja en claro que lo suyo no es persuadir, pues esquivar una oportunidad de debatir es renunciar a los argumentos. En un encuentro anterior, organizado por el Observatorio Ciudadano, los aspirantes lo vapulearon y, carente de reflejos, incrementó sus negativos en las percepciones de la población.
Morena prefirió guardar a su muchacho. Los Monreal miden bien el perfil del famoso restaurantero, y con el supuesto de la “guerra sucia” han protegido al endeble candidato. ¿Y qué va a hacer Ulises cuando le explote una crisis política o social en el ayuntamiento capitalino? ¿Recurrirán también a la victimización? Por lo visto, Mejía Haro seguirá lamiendo sus heridas, sin arriesgar, esperando el 1 de julio.
¿Quién asfixia al Partido del Pueblo?
Pese a recorrer un camino tortuoso, empedrado por el IEEZ, el Partido del Pueblo empuja una campaña que estrecha vínculos con la gente. Sus militantes tienen el pulso de lo que sucede en los municipios del estado, y para hacer política tocan puertas y ponen las cartas sobre la mesa. El consenso y los acuerdos son sus elementos distintivos.
La campaña del Partido del Pueblo va a dar de qué hablar. Corrupción, inseguridad, simulación del ejercicio de la ley, estarán presentes en sus mensajes políticos y electorales con la finalidad de hablar en serio de los problemas de Zacatecas.
Y no se andan en medias tintas. Piden a la población no olvidar la rapacidad e indolencia con la que Miguel Alonso llevó a Zacatecas a conocer los sótanos de la corrupción, y cómo, durante años, también intentó vincular a Amalia y a los Monreal con la inseguridad y el narcotráfico en Zacatecas, cuando en su sexenio se vivieron momentos tensos de violencia, secuestros constantes y asesinatos graves, que eran acallados por la prensa con la intervención del ex gobernador.
La diferencia, dicen, la hace la gente. Del “pueblo” siempre se ha hablado, y en su nombre se han tomado incluso las peores decisiones, por eso, me explica Alejandro “Lato” Carrera, el Partido del Pueblo lo que busca es que la ley prevalezca, porque las instituciones que merece la gente deben de ser sólidas. Basta de simulaciones, asegura.
Pero sucede que al Partido del Pueblo, misteriosamente, le han cerrado la llave de recursos para proselitismo electoral que ya deberían de estar ejerciendo en la campaña. Con la distinguida ineptitud de las autoridades electorales, e instituciones financieras que se niegan a aperturar –arbitrariamente- cuentas bancarias donde puedan recibir y manejar el dinero que les corresponde para la campaña, el PP se ve imposibilitado a gastar un solo quinto.
¿Qué intereses, en las sombras, buscan asfixiar al Partido del Pueblo? Recordemos que el único partido local al que el IEEZ le ha dado todas las facilidades es al PAZ de Nacho Frayre, una franquicia que la consejera Adelaida Ávalos cuida con particular celo.
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