A Mayor Profesionalismo en la Política, Menos Populismo
ISADORA SANTIVÁÑEZ RÍOS
En Zacatecas se vive una especial efervescencia entre la militancia del Partido Revolucionario Institucional (PRI), luego que cientos de priistas han manifestado su interés por encabezar las dirigencias en los 58 municipios del estado.
Todos ellos –en el entendido de que a mayor profesionalismo en la política menos populismo–, tienen el pleno convencimiento de que los retos del mundo actual, los retos de nuestro país y, claro está, de nuestro estado, exigen contar con políticos capaces de ofrecer respuestas acordes con los tiempos.
En México, y sobre todo en América Latina, hemos sido testigos de cómo el populismo es una salida falsa que, de ninguna manera, resuelve los problemas de ninguna sociedad, y menos ante un contexto global caracterizado por la incertidumbre y tensiones políticas, financieras y militares. Nuestro país tiene que reaccionar de forma rápida y acertada.
Por ello, soy también una convencida de la vital importancia de formar políticos profesionales que cuenten con las habilidades y competencias que les permitan ejercer el poder bajo principios democráticos, fortalecer a las instituciones, atender las demandas y planteamientos de la sociedad y proteger los intereses de nuestro país.
Hoy, que en Zacatecas vivimos este proceso de renovación de los Comités Directivos Municipales, los aspirantes, como requisito indispensable, tomaron un curso de capacitación y formación política y presentaron el examen respectivo, estando ciertos que, como lo dijo el presidente del Comité Directivo Estatal (CDE), Roberto Luévano Ruiz, "habrá piso parejo para todos".
La formación política, además de ser una responsabilidad legal y estatutaria, es una necesidad que responde a un escenario pluripartidista, de mayor competencia y a una ciudadanía cada vez más informada y demandante, de ahí la importancia de que los aspirantes a llevar las riendas de las dirigencias municipales estén capacitados y tengan siempre presente el ideario del Revolucionario
Institucional.
Entendemos que la capacitación es una exigencia ética, ya que la política no es don de la naturaleza, sino más bien el producto del esfuerzo humano, el cual tiene que ver no sólo con la vocación, sino con preparación, adquisición habilidades, conocimientos de técnicas y disposición permanente de aprender.
Con esto, ciertamente, evitamos que a los espacios de representación política arriben la improvisación, las ocurrencias, la ignorancia, la incapacidad y el pragmatismo sin ideas.
En el PRI, lo demostramos con hechos cerrando el paso a la improvisación, porque la gente merece servidores públicos honestos, comprometidos y profesionales. En Zacatecas, y sus municipios, requerimos de líderes que abanderen causas y generen las oportunidades para que
cada mexicano pueda escribir su propia historia de éxito.
La prioridad es generar condiciones para que los elegidos puedan encabezar los trabajos como partido, y que sepan que su compromiso con el PRI es con la democracia y la justicia social.
Por ello, también se debe remarcar, el PRI en Zacatecas tiene una deuda pendiente con su militancia, ya que continúa acéfalo el Instituto de Capacitación y Desarrollo Político AC (ICADEP), luego que Perla Martínez Delgado asumiera la presidencia del Organismo Nacional de Mujeres Priistas (ONMPRI).
Si queremos lanzar un mensaje de responsabilidad, es momento de que el ICADEP, lugar del que surgen los nuevos cuadros que tendrán en sus manos el futuro de nuestro partido, cuente justamente con un egresado como su presidente o presidenta. Ahí hay mucho talento y tiene que ser aprovechado.
El ICADEP representa la sangre nueva, las ganas de superarse, el amor al partido, a sus ideales, y es por esta razón que ha llegado el momento de que un o una priista destacado, capacitado y entregado guíe su camino en bien del PRI y de la misma sociedad.
* La autora es diputada en Zacatecas por el III Distrito
@Isa_GiSr