Las Piezas del Ajedrez: La primera gran derrota
EFRAÍN ESPARZA MONTALVO
La primera gran derrota del gobierno de Alejandro Tello Cristerna se materializó la semana pasada cuando, obligado por las circunstancias más que por convicción de estadista, el titular del poder Ejecutivo removió a Froylán Carlos Cruz de la Secretaría de Seguridad Pública, y nombró a Ismael Camberos Hernández, un policía de carrera que domina el mapa delincuencial del país y en quien se tienen cifradas esperanzas de que devuelva la paz a Zacatecas. El hecho sin embargo tiene varias aristas que no debemos perder de vista, como la presión social, que cuando se manifiesta puede cambiar paradigmas que tanto daño producen a nuestra incipiente democracia.
Es derrota para el gobierno –y muy dolorosa–, porque se comprueba el fracaso rotundo que en materia de seguridad tuvo y que fue la bandera que enarboló el entonces candidato Alejandro Tello Cristerna durante su campaña: “votar por Tello, es votar por la seguridad”; hoy, a nueve meses de distancia ocurrió un relevo impensado y en el área más sensible de cualquier administración, la de seguridad.
Es derrota, porque en su afán de aparentar tranquilidad y esconder una realidad lacerante, el gobernador defendió siempre al ex secretario Froylán Carlos Cruz, no obstante, su pasado siniestro en el estado de Oaxaca cuando la represión de Nochixtlán, apenas tres meses antes de su toma de protesta, y que dejó como saldo 9 personas muertas y 23 detenidas, además de decenas de heridas, todas pertenecientes a la sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, CNTE.
Es derrota, porque, aunque el gobernador había manifestado su propósito de nombrar a un mando civil al frente de la Secretaria de Seguridad Pública, fue el secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda, quien se impuso y nombró al general oaxaqueño, demostrando con ello la subordinación que los gobernadores le deben al jefe militar, pisoteando así la investidura y representación libre y soberana de los estados.
Es derrota, porque Alejandro Tello nunca reconoció el brutal incremento de los hechos de violencia en casi todos los municipios de Zacatecas, y que llevó a la entidad a colocarse en la tercera posición de la muy despreciable lista de estados más violentos del país, apenas por detrás de Guerrero y Baja California. El gobernador siempre sostuvo que se trataba de un asunto de percepción ciudadana, mientras que los ríos de sangre corrían prácticamente enfrente de sus narices, y él ni por enterado se daba.
Es derrota, porque es volver a empezar.
Y lo es también porque un gobierno le apuesta a todo desde el principio y cuando algo no sale bien, como es el caso, la estructura administrativa y de mando se rompe y las consecuencias saltan a la vista, lo cual supone un reacomodo no sólo al interior de las fuerzas de la propia Secretaría de Seguridad, sino de los grupos de la delincuencia que operan en Zacatecas y que buscarán a toda costa negociar con el nuevo titular, a cambio de paz y tranquilidad.
El nombramiento de Ismael Camberos Hernández, es sin embargo esperanzador porque, aunque los zacatecanos nos habíamos acostumbrado a la violencia y a la muerte de ciudadanos, no debe ser esa, bajo ninguna circunstancia, la tónica de nuestra existencia, porque perder el sentido de asombro es volverse insensible, es malgastar el amor por el prójimo y eso es lo que menos conviene en momentos tan aciagos como los que vivimos.
De salida 1.- Es por demás. Mientras que la administración central de la UAZ, en voz de su titular, Antonio Guzmán Fernández, asume como imposible saldar el histórico adeudo con el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado, ISSSTE, en la institución sigue el derroche y los privilegios de unos cuantos. El plan de austeridad implementado desde el inicio de la gestión rectoral de “El Waca”, muy pobre resultado ha entregado, tanto así, que a los funcionarios de primer nivel les vale madres y se lo pasan por el arco del triunfo. Ejemplos tenemos muchos.
De salida 2.- Otra más de la UAZ. Siguen los conflictos en el CECIUAZ, por el control de la coordinación. Aunque este lunes tuvo lugar la graduación de los alumnos del tercer año de preescolar –muy desorganizada, por cierto–, los problemas se dejaron ver como nunca y las miradas de odio entre maestras, trabajadoras, y el coordinador, todos contra todos, evidenciaron la descomposición a la que han llevado a esa noble institución otrora orgullo universitario. Ojalá que el rector voltee la mirada, a la brevedad, y ponga orden en la escuelita antes que los padres tomen cartas en el asunto, –que es lo deseable–.
De salida 3.- Nombres. Suenan Paula Rey Ortiz Medina; Héctor Alvarado Gómez; Fabiola Torres Rodríguez; Jorge Luis Pedroza Ochoa; y Eduardo Yarto Aponte, como los próximos sacrificados de la nómina gubernamental, por ineficientes.
De salida 4.- ¿Muy contentos? Que los periodistas que el pasado 7 de junio acudieron al festejo por el día de la libertad de expresión, con el gobernador, salieron rete contentos pues les dieron, además de desayunar huevo con frijoles, su taza para café con la que recordarán toda la vida que fueron bateados por un gobierno insensible y antidemocrático, al que sin embargo, le deben reverencia a cambio de migajas.
Hasta la próxima.
El autor es analista.