Juventud Resiliente: Las locuras del emperador
RODRIGO RODRÍGUEZ OLVERA
Si bien la analogía con la película de Disney suena cómica, dista mucho de ser eso, hace unas horas el presidente Trump ordenó un bombardeo a un aeródromo de Siria y con ello empieza a tomar decisiones de guerra.
Si bien la ONU y la comunidad internacional se vieron fríos con el problema de la guerra civil en donde se pide la cabeza del presidente Bashar al Asad, no correspondería a Estados Unidos tomar el papel del “solucionador”, ya que interfiere con la corte internacional encargada de juzgar y adentrarse a este tipo de situaciones.
Se pudiera desde algún punto de vista agradecer que alguien se entrometa para derrocar a Asad, presunto responsable del ataque químico que mato a un centenar de personas, pero lo que no debemos olvidar que, si se le da ese poder a Estados Unidos, lo demás será lo de menos, es decir, poder invadir cualquier país con el pretexto de que son los adecuados para solucionar los conflictos internacionales.
Recordemos que la apreciación del dólar va a la baja, y que el principal aliado de Siria es Irán que por cierto es de los mayores productores de petróleo y amapola, por lo que el conspiracionismo amateur nos señala que es conveniente para nuestro vecino norteño iniciar un proceso de conflicto ¿teorías descabelladas? Al tiempo.
La ONU debe de tomar medidas de urgencia y solucionar este conflicto con un ejercito internacional, imaginar que Trump pueda invadir México con el pretexto de un estado anárquico provocado por el crimen organizado es verdaderamente horripilante, ojalá Dios nunca lo permita.
Trump va a ganar con este ataque, en economía oligárquica, en infundir miedo en las relaciones internacionales y van a perder los habitantes gringos, que, con este ataque enviado por su presidente, los expuso a atentados terroristas en respuesta del bombardeo.
Nos leemos el próximo viernes si Dios, adiós.
Twitter: @rodrigordzolv
